Alexia

Capítulo 18

-De que eres adoptada, Alexia.

Mi mente queda en blanco. No logro procesar las palabras. He bloqueado mi mente de tal manera para no creer nada de lo que Axel me está diciendo. No podía ser cierto no lo era. Mis padres me lo hubiesen dicho. O mis hermanos, incluso. ¿Por qué tenía que ser Axel? ¿Por qué el fue el que me lo dijo? Mis ojos amenazan con cristalizarse pera al instante cierro los ojos y doy un fuerte suspiro. Debo tener fortaleza, no importa si es verdad o si es una mentira, si era una mentira igual me dolería ya que cupiese de Axel.

-Estás jugando conmigo, lo sé. Eres como los demás. ¡Yo no te importo! Si te importara no me estarías diciendo esto solo para herir mis sentimientos.-Digo en voz alta, casi gritando.

No me importaba que el mundo entero me escuchase. Estaba molesta con Axel, indignada con el por esta clase de mentira. Yo no merezco esto señor Dios. ¿Por qué tienes que hacer que la persona que más quiero en el mundo me haga esto?

-No te estoy mintiendo, Alexia. Te lo digo por que me importas.-Dice en el mismo tono que yo. El da un paso hacia delante al cual que yo respondo dando otro paso hacia atrás.

No le quería ver. No le odiaba. Tampoco iba a ser muy drama queen. Pero me molesta en la manera que ha buscado con herirme. Le he confiado a Axel mis problemas familiares y como me afectan. Le he dado la razón por la cual soy muy rara. ¡Soy la chica rara del colegio! ¿Cómo pude ser tan estúpida de creer que él querría estar conmigo. El es un Playboy solo que una versión mejorada y que no se acuesta con tantas chicas, y el es amable, cariñoso, tierno... Y un cretino y un mentiroso y un... No puedo pensar en insultos hacia él.

-¡No te importo! Eso es solo una apuesta o algo por el estilo. Por que yo te he confiado mis secretos, problemas y sentimientos etcétera. ¿Y Yu qué me has dicho? Nada.- Demando. La primera lágrima se deslizó por mi mejilla, dejando un rastro húmedo tras esta. Dejé que saliera y deslizara, no me sequé la mejilla. Pero solo fue una lágrima, no más.

Pude ver como los ojos de Axel amenazaban con soltar un lago. Pero Axel no iba a llorar como un moño pequeño, el se aguantó. Giro mi cabeza para la izquierda para ver una simple casa. De ella salían una madre con sus dos hijos, una niña pequeña y un niño. Ella tenía prisa he intentaba apresurarlos para que entraran en el coche. Ella les miraba con amor y tenía una sonrisa llena de amor en su rostro. Era una madre que sí amaba a sus hijos. No quería ver esa escena más así que giré mi rostro hacia el de Axel. Al ver su cara pude ver una línea húmeda, era un rastro de un lágrima. El no quería que yo le viera llorando.

No le creas Alexia, no lo hagas.

¡Hazlo ya! No seas una drama queen.-Mi voz interior habló. 

Sé que debería escucharla. Cuando tu voz interior te habla hazle caso, no la ignores. Si no la escuchas luego te arrepentirás de no haberla escuchado.

-Te daré una oportunidad para que te expliques.-Dije fría. Sin ninguna expresión en mi rostro.

-¿Así qué mi hermano te dijo que yo era adoptada pero que yo no lo debía saber? Y luego mi hermana te lo confirmó mientras tenían... Sexo.-Dije esto último en voz baja.

Aparentemente, mis hermanos saben que yo soy adoptada, ellos no lo son. Mis "padres" debían haberme dicho esto antes, pero a medida que iba creciendo a ellos la duda ante mi reacción les hacía temer. Según ellos, todos me estaba "protegiendo". ¿Por qué algunos prados adoptivos a veces deciden que es mejor decirte que eres adoptada mientras que es mejor que lo sepas desde pequeña? Por más que ven la reacción en las películas de los chicos que son mayores y se enteran que son adoptados, no entiende, no reflexionan. ¿Acaso mis padres nunca pensaron de cuál sería mi reacción cuando me enterara por otra persona de que era adoptada? No, al parecer no.