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Tomé varias bocanadas de aire. Muchas, bastantes diría yo. Lo único que tenía que hacer ahora era esperar. Y lo malo de esperar en estas circunstancias son la deshidratación y el aburrimiento total. Sentí que me jalaban del brazo y supe que era el momento.

—Toma, muevete. —Sostuve la caja entre mis manos y comencé a caminar, claro, con mi guía Grayson. —Detente. —Me susurró y yo obedecí.

Me quedé parado ahí un buen rato, no quería pensar que mi hermano me había traicionado dejándome en ridículo vestido así. Escuché un extraño sonido, como si alguien se hubiera asustado y como sonó bastante igual a Akadia en pleno orgasmo, abrí la caja. No podía ver exactamente lo que pasaba, pero quería imaginarmelo de una buena manera. Estaba vestido con una gran botarga de pizza y tenía una caja de pizza en las manos. Vaya forma de pedirle a alguien que sea tu novia, ¿eh? Escuché el cierre bajar y la caja ser removida de mis manos. Cuando quedé al descubierto, Akadia estaba llorando de nuevo, pero esta vez estaba sonriendo y no sufriendo como hace rato. Verla llorar por lo que acababa de pasar me hacía pensar que no era buena señal.

—¿Es en serio? —Preguntó cubriéndose la cara.

—¿Qué parte?

—La de la caja. —Sonrió.

—Ah. —Reí por lo bajo. —Muy en serio. —Me rasqué la nuca.

Ella sonrió aún más grande, luego asintió varias veces mirándome fijamente a los ojos. Solté el aire que estaba reteniendo e inmediatamente la abracé, para luego besarla algo salvaje. Grayson y Jake comenzaron a bailar a nuestro alrededor e informarle a cada persona que pasaba que oficialmente éramos pareja. La respuesta de Akadia no me había sorprendido del todo, y no porque yo fuera Ethan Dolan y quién me diría que no, sino porque creí que ya estábamos juntos por todo lo que habíamos pasado, es decir, que no era necesario esto, sin embargo, yo quería hacer esto por ella.

Así que oficialmente, Akadia Brady era mi gatita.

***

Comenzaba a sentirme triste, ya extrañaba a Akadia, y eso que nuestro vuelo todavía no estaba listo para partir.

—¿Por cuánto tiempo será? —Me preguntó.

—Quizá tres semanas. —Frunci los labios.

—No hagas eso. —Me besó la mejilla.

—¿Por qué? —Reí por lo bajo.

—Me haces pensar que no quieres visitar a tus amigos por mí. —Rodó los ojos y acarició mi rodilla.

—Estoy considerando bajar del avión justo en el momento, gritar algo como “¡Necesito volver con el amor de mi vida, detengan el avión!”. —Bromeé, ella rió.

—¿Amor de tu vida?

—No lo dije literalmente, es solo que en las películas así lo dicen, ¿no? —Asintió mientras seguía riendo.

Nos quedamos un rato en silencio, eran las siete de la mañana y todavía faltaba una hora para que comenzáramos a abordar el avión. Me estaba quedando dormido, sentir a Akadia tan cerca de mí, me estaba relajando. Sentí un tirón en mi cabello y desperté asustado.

—Jake. —Dijo ella riendo, volteé confundido hacia Jake y él me saludó con la mano.

Bostece y me quedé mirando a Akadia, ella frunció el ceño.

—¿Recuerdas cuando me viste la primera vez? —Levanté una ceja, rodó los ojos y sonrió.

—Sí, recuerdo la manera en la que me miraste. —Reí por lo bajo.

—Estaba confundido. —Acaricié su espalda. —Pero aclaraste mis dudas cuando la cabecera se golpeaba con la pared. —Bromeé...pero incluso yo supe que me había pasado un poco de la raya.

—Eso es algo que no quiero tocar, en serio. —Dijo bajando la mirada, inmediatamente la tomé de la barbilla e hice que me mirara.

—Eso es algo de lo que deberíamos hablar siempre. —Le tomé su mano y la besé. —Eso es una prueba del verdadero amor, ¿sabías? Por eso te admiro, Akadia. —Le acaricié la mejilla.

—¿Cómo puede ser eso algo de admirar? —Negó ligeramente con la cebeza y sus ojos se llenaron de lágrimas.

—Porque gracias a eso has sacado a tu madre y a ti adelante, probaste de que no es necesario de un hombre para tener dinero y eso. —Limpié la primera lágrima. —En un futuro, cuando seas una gran arquitecta, sabrás que esa etapa de tu adolescencia, quizá no fue la mejor, pero sí te ayudó bastante, y a tu mamá. —Le susurré.

Sabía que no había palabra alguna que pudiera sacar a Akadia de su frustración y desdén de lo que sentía por ella misma, pero si por mí fuera, le haría saber cada día que estemos juntos que lo que antes hacía no me importa, al contrario, es algo que admiro y lo diré cien mil veces más. Admiro a Akadia Brady, punto.

—¿Y si mis hijos se enteran de que su madre era prostituta?

—No tendrían que hacerlo. —Pasé un mechón detrás de su oreja. —En ese caso tendrías que decir lo que ya varias veces te he dicho, que lo hiciste para sacar adelante a tu madre y a ti, y que no es algo de lo que debas avergonzarte si tienes un propósito. —Besé su mejilla y ella sonrió.

—Quizá debas escribir un libro de superación personal. —Me abrazó y recostó su cabeza en mi hombro, yo reí por lo bajo.

—Debería. —Pasé mi mano alrededor de su espalda y la sostuve.

Los últimos cuarenta minutos pasaron con rapidez, pronto comenzaron a llamar a los pasajeros del vuelo hacia Los Ángeles, lo que significaba que tendríamos que irnos. Mientras caminábamos hacia el pasillo de entrada, Akadia no dejaba de besar mi mano y de decirme lo mucho que me quería, cosa que, sinceramente, comenzaba a molestarme.

—Te veré en tres semanas. —Sonrió ampliamente mientras me abrazaba.

—Voy a extrañarte, gatita. —Besé su frente.

—Y yo a ti. —Hizo una voz más aguda.

—Trata de no meterte en problemas, por favor. —Tomé su mano y comencé a caminar hacia mis amigos.

—Igualmente, Ethan. —Su rostro enrojeció, así que la abracé de nuevo.

—¿Estarás bien aquí sin mí? —Le susurré.

—No, pero trataré. —Me besó, y yo la abracé aún más fuerte.

La solté y me despedí con la mano, los chicos también se despidieron de ella. Mientras caminábamos hacia el avión, empecé a pensar en lo mucho que extrañaría a mi novia, y en lo mucho que me costó que lo fuera. Todos los recuerdos, desde la primera vez que la vi hasta ahora.  Ella llevaba una de mis camisetas favoritas y unos pantalones azules, se veía tan descuidada pero igual de hermosa y natural. La amaba demasiado, y por ahora, nada en la maldita tierra podría cambiar eso...ni tú, Beyoncé.

★★★

MUCHAS GRACIAS A TODAS LAS QUE ME APOYARON EN ESTO Y...este no es el último capítulo nenorras ͡° ͜ʖ ͡°  bueno, técnicamente lo es, solo falta el puto epílogo y ya, ahora se acaba SATYR BATOOOOS  D':
YA SABEN, SI QUIEREN QUE SUBA PRONTO EL EPÍLOGO, TIENEN QUE COMENTAR Y VOTAR POR ÉL G G G BAIS❤

satyr «e.d.»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora