YOUR LOVE IS MY DRUG

TENER UN SENTIMIENTO

No supo a qué hora despertó, no tenía noción del tiempo, pero estaba segura de que jaspe no estaba a su lado, esto fue un alivio. Pero ¿Era de día o noche? No había ventanas para saber.

"Por fin despiertas" lapis empezó a escuchar a azul, cosa que no era buena "¿Cómo te fue después de tu primer día de puta? ¿Te sientes desfallecer, no? ¿Por qué no te levantas?"

Lapis volvió hacer el intento de sentarse, pero le dolió más que la vez pasada, volviendo a recostarse.

"uh que pena, te duele todo. ¿Qué era eso que jaspe te dijo? ¿No decirle a Peridot? Yo si fuera tú, lo cual soy, le diría. No sabemos que es y tenemos dudas, Peridot dijo que le dijéramos cualquier cosa que dudemos. Y mira para que yo te dé un consejo bueno, es algo extraño"

-lo sé. Pero no pienso decirle, jaspe tiene razón, Peridot es algo celosa...

"¿y tú cómo sabes?"

-lo intuyo.

"es algo estúpido. Aquí no se puede intuir."

-no le voy a decir.

"créeme que te arrepentirás..."

Sus pensamientos fueron interrumpidos cuando escuchó el sonido del timbre, era Peridot.

"hey Elena, yo si fuera tú me taparía ese tallón rojo que tienes en el cuello, de eso sí estoy segura, Peridot se espantará si te ve con esa marca"

Lapis se tapó con la cobija hasta el cuello. Escuchó algunos pasos hacia la habitación y finalmente Peridot entró a la habitación.

-hola lapis.-dijo mientras se sentaba en la cama a un lado de lapis.- ¿cómo te fue?

-no sé cómo se pueda describir.

-¿jaspe te hizo algo "de más"? ¿Te pegó, cortó, quemó, algo?

-no, todo bien.

Peridot entrecerró un poco los ojos para analizar a lapis, sabía que algo no estaba bien, así que de un pequeño tirón de la cobija alcanzó a ver la marca en el cuello de lapis.

-eso no está bien.-dijo totalmente seria.- lapis, no la estés encubriendo.

-no la estoy encubriendo, esto solo fue... algo leve.

-¿leve? Oh entonces... levántate y vístete.

Lapis sabía que no lo podía hacer, le dolía todo.

-no puedo.-dijo en voz baja.

-¿ya te duchaste?

-no.

-trata de vestirte, nos vamos ya.- Peridot sale.

Lapis alcanzó a percibir un tono molesto en Peridot, algo no iba a estar bien. Así que aguantándose el dolor se empezó a poner nuevamente la ropa, pero no pudo evitar soltar algunas lágrimas al recordar cada cosa que le había pasado aparentemente en la noche.

Mientras que en la sala, Peridot y jaspe se encontraban discutiendo.

-¡te dije que no le hicieras daño!-gritaba enojada la rubia.

-¡no le hice daño! Solo le enseñé un poco de lo que se debe hacer. ¿Recuerdas que me dijiste que yo le podía enseñar? Pues ese fue su curso básico.

-¡le dejaste una marca roja en el cuello!

-se le quitará.

-¿¡pero qué te pasa por la cabeza?!

-no lo sé.-saca un fajo de billetes.- quizá si vale la pena ¿no crees?

Peridot miró por unos instantes enfadada el dinero, pero después lo arrebató de la mano de la peliblanca.