Dos igual a uno.

Partículas

—¿Santiago? Hey vete... Estoy cansada hoy, quiero dormir.— le susurro con irritación.

—¿Que nunca vas a llamarme desde el balcón invitándome a subir? Algún día esperaré abajo a que me llames "Romeo, Romeo.." — decía imitando la voz de Ailana.

—No seas idiota... — observó como Santiago se dirigió a una esquina de su habitación, con exactitud en la unión de dos de las paredes, tomo la silla del escritorio, y se subió en ella, y entre la unión de las paredes colocó una cinta extraña. — ¡Hey... Hey...! ¿¿Que es lo que haces??.

—Guarda silencio... — le dijo en voz baja sin voltear, hizo lo mismo en cada una de las uniones de las paredes, cuando terminó sacó un objeto semiesférico, el baingpop, presionó algo en el y una luz relampagueante pasó a través de todas las paredes.

—Santiago, ¿¿Que fue eso?? ¡Explicate!

Santiago se dirigió hasta ella con brusquedad, quedando a centímetros de distancia.

—Ailana, lo que acabas de ver, es la activación de un aislante, es algo muy complejo, solo voy a decirte que mientras esas cintas estén entre las uniones de tus paredes, de esta habitación no se escucharan sonidos, no podrán rastrearte, ni siquiera satiletalmente, nadie podrá ver nada desde afuera de la habitación...

Santiago se detuvo cuando notó que Ailana comenzaba a llorar.

—¿Que vas a hacerme? — decía con un hilo de voz.

Santiago captó entonces que ella pensaba que el planeaba hacerle daño, era lógico, ese sistema en aquella epoca podría utilizarse bien para secuestros, violaciones, etc.

—No, no, no entiendes, tranquila... — le hablaba lo mas dulcemente posible y ella retrocedía. — Sólo quiero hablar contigo...

—¿Que eres? Tu no eres humano, las cosas que tienes, son extrañas, Emmanuel también tenia de esas cosas, y esta muerto. ¿Que quieren?

Ohh... Esa niña si que tenia imaginación... Conclusión salvaje de que ni siquiera era humano.

—Si, Ailana, soy de Júpiter, vengo a destruir tu planeta pero quiero salvarte a ti.

Ailana comenzó a lagrimear más.

—No estás hablando en serio...

—No, no lo estoy. Ailana escuchame, no saques ese tipo de conclusiones... Yo... Tengo que hablar contigo de algo... De a poco te iré diciendo cosas... Mejor sentemonos, no se cuanto tomará esto.

Se sentaron en la cama, ella se sentía incomoda de tener a Santiago sentado en su cama, pero tenia demasiadas preguntas para el, y tenia interés en lo que iba decir.

—Bueno, dime, ¿Sabes algo de física?

—¿Que? — Ailana se molestó.

—Eso, que si sabes algo de física.

—Pues por supuesto, se da en el colegio.

—Bien, te sabes la formula de velocidad, supongo.

—Velocidad se halla de varias maneras...

—Lana, la fórmula principal... Velocidad es igual a velocidad inicial...

—Más aceleración por tiempo. — completó Ailana. — Sí, ¿Que hay con eso?

—Bueno, eso no se aplica siempre ¿Sabes? Cuando la velocidad llega a la velocidad de la luz, la parte de 'tiempo' en la formula, ya no se cumple.

—Maldicion, Santiago, ve al grano.

—Trato de hacer todo lo mas lógico posible, por favor ten paciencia.

Ella guardó silencio y dejó que el prosiga.

—Bien, cuando la velocidad llega a la luz entonces hay otra fórmula, Energía igual a masa multiplicado por la velocidad de la luz al cuadrado.

—Ajá.

—Un cuerpo, en la superficie terrestre, no puede ir a la velocidad de la luz, se desintegraría. Es lo mas lógico.

Ailana asentía vacilando.

—Pero, hay una tecnología, que llegara dentro de unos muchos años, se llama teletransportacion. — se detuvo, el hablaba lento, requería total atención de Ailana. — Bueno, la teletransportacion es hacer viajar algo a la velocidad de la luz, pero al desintegrarse, lo vuelve a... ¿Reintegrar? Sería la palabra supongo...

—Santiago... — ella lo miraba como si fuese un bicho raro.

—La teletransportacion desintegra partículas y las reintegra en otro lugar a través de teletransportadores. — terminó de decir y clavo su mirada en la de ella.

—Santiago ¿Te has fumado algo?

—¿Pero que pasaría si puedes ir aun mas rápido que la velocidad de la luz? — prosiguió Santiago. — Estamos en 2015, físicamente eso es imposible actualmente, pero en el año 2295 se creó un teletransportador mas avanzado.

Ella lo miraba entrecerrando los ojos.

—Se que en estas épocas hay leyendas, ¿Nunca oíste sobre lo de que, si das vueltas alrededor del planeta a la velocidad de la luz vuelves en el tiempo? Las partículas se desintegran y se reintegran en otra época.

—Espera, espera... — ella lo miraba muy confundida. —No se si entiendo bien, tu sabes todo esto... O mas bien, me dices todo esto ... ¿Por que....?

—Vengo del futuro, Ailana Aguilera.

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Ohhhh que corto! Ya los compensaré.