Nicholas
-¿Estás seguro de esto?-Preguntó nuevamente Matt.
Levanté mi vista de los planos que tenía sobre mi escritorio para mirar una vez más a quien era mi mejor amigo, sus ojos azules me veían preocupados, como lo hacían cada vez que planeaba un nuevo golpe. Aún no lograba entender como era posible que luego de años de ayudarme él siguiera preocupándose tanto, digo, es cierto que a veces los planes eran un poco difíciles y que el más mínimo error podía significar un viaje pagado hacia la horca, pero realmente no era como para que se preocupara tanto, ni siquiera yo era tan impulsivo como para cometer los suficientes errores como para que me descubrieran.
-Sí, Matt, estoy seguro...relájate un poco.
-¿Cómo puedes pedirme que me relaje? ¿te das cuenta siquiera de lo que quieres hacer?
-Oh, lo tengo bastante claro, y no es para tanto, sólo otro trabajo.
-¿Otro trabajo? Nicholas, estás planeando robarle a uno de los hombres más poderosos y peligrosos de todo Londres ¿y tú dices que es sólo "otro trabajo"?
Rodé los ojos, maldición, sonaba peor que mi madre, de hecho ella sólo me había dicho que más me valía que no me atraparan porque ella odiaba usar ropa negra, la cual sería necesaria si descubrieran la verdad y para mi posterior ejecución.
-Si te pones nervioso me colocaras nervioso a mí y harás que me equivoque-Dije al tiempo que tachaba otro corredor en el plano del edificio.
-Oh, lo lamento, no quiero poner nervioso al caballero, a pesar de que él no tiene ningún problema en ponerme neurótico a mí.
-¿Te das cuenta de que en este momento suenas como una mujer con veinte años de casada, cierto?-Dije sin levantar la vista.
No necesitaba mirarlo para sentir su mirada fulminante sobre mí, y la verdad es que no me interesaba ni un poco, estaba demasiado ocupado viendo cómo hacía esto sin morir en el proceso.
Recorrí con mi vista el plano una vez más mientras ignoraba tranquilamente las quejas de Matthew, siempre era mejor ignorarlo cuando se ponía así, era como tener una pequeña y molesta mosca zumbándote en el oído, y no era que no lo apreciara, era agradable saber que él era tan buen amigo como para incluso ayudarme con algo como esto, pero no podía evitar sentir que de vez en cuando exageraba.
Lo pensé un par de minutos más antes de decidirme por un trayecto en específico.
-Bien, ya está listo-Dije mientras me enderezaba en mi asiento.
Fijé mis ojos en los de Matt, sus ojos azules me miraban furiosos. ¿Ahora qué?
-Nicholas Thomas Rockford, ¡No puedes estar planeando en serio robar una pintura de millones en las narices de toda la sociedad aristocrática.
***
-Sólo quiero recordarte que esta es una pésima idea-La voz de Matt sonaba baja y molesta.
Contuve el impulso de rodar los ojos, él llevaba diciendo lo mismo la última semana.
-Pues ya es algo tarde, tengo todo listo y no planeo arrepentirme a último minuto.
-Por favor, Nick, sólo piénsalo una última vez-Pidió.
Suspiré y cerré los ojos por unos diez segundos, luego los abrí.
-Ya lo pensé...deséame suerte.
Matt gruñó antes de mover las manos en un gesto exasperado pero que me indicaba que no iba a oponerse más. Le dediqué una de mis sonrisas más inocente que pude.
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Juegos de Ladrón
Historische RomaneJulieta es la mejor amiga de Nicholas. Nicholas es el mejor amigo de Julieta. Nicholas tiene un secreto... ¿Qué pasara con su amistad?