6-Apuesta

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Caminé directo a mi siguiente aula,para mi mala suerte me tocaba la clase que más odiaba; matemáticas y me sentaba junto con Ross. Aún recuerdo que hace una semana lo conocí, como pasaban rápido los días.

—Hola cielo.—dijo Ross incorporándose a mi lado.
—H-hey Lynch. —observé que el maestro ponía algo en el pizarron pero por su tremenda cabeza de la de al frente no podía verlo tan bien como Ross.
—Oye pasame la taree, he olvidado hacerla.—susurro.
—¡No quiero!—dije para probarlo, quería ver como reaccionaba ante mi negación.
—Ah esta bien no te preocupes.—mantuvo su sonrisa y reí,al menos no actuó mal.
— Jóvenes sus tareas porfavor.—grito el profesor— joven Lynch ¿su tarea?—Eh...—Ross negó con la cabeza y me miró.
—Vaya a la dirección por favor.
—¡Eso te pasa por idiota!—le susurre y una risita salió de mi boca.

Ross me miro divertida mente y beso mi mejía antes de irse, no pude evitar reír al ver a Ross quien se iba directito ala dirección.
Entregué mi tarea y cuando volví hacía mi lugar, una chica rubia se encontraba ahí.

—Hola.—me señalo el asiento de Ross y me acomode ahí.
—Eh ¿te conozco?
—Pues no que yo sepa.—río— mi nombre es Grace.
—Soy Lia mucho gusto.—dije tímidamente.
—Encantada de conocerte.
—Bien sigamos la clase.—dijo el profesor.

Por lo poco que me hablo Grace de ella me pareció muy interesante su vida, dijo que había venido hasta aquí por su novio Ian, el Ian que yo conozco.
Salimos de la clase y le presente a Rydel. Luego Grace y yo nos fuimos por la dirección dónde Ross se encontraba aún.

—¡Hey grace!¿qué diablos haces aquí? —sonrió Ross y se levantó para abrazarla.
—Uh ¿se conocen?.— pregunté.
—Amiga de infancia.—susurró Ross.
—Mis padres me han cambiado de escuela, ya sabes lo hice por Ian.—dijo Grace —¿Ya vino tú madre?
—Si, se acaba de ir. Ya vamos, Lia acompañanos.— Ross agarró uno de mis cachetes y lo estiró.
—Bueno, vamos por aquí.—dijo grace.

Fuimos hacía el patio, donde habían alumnos, Grace me dirigió hacía una parte escondida de la preparatoria y había un chico... Oh es Ian.

—Hey Lia —dijo Ian.
—Hola Ian.—le dije.
—Bien. Ross le entras ¿o qué?— le pregunto Grace.
—Sabes que siempre chiquita.— Ian miró a Ross con celos y él lo noto—Tranquilo bro, ya sabes como soy.
—Juro conseguirte novia
—Lia se que no tienes idea de esto, pero... Bueno nosotros fumamos.—musito Ian sacando su cajetilla de cigarros.
—Creó que mejor me voy.—dije nerviosa.
—Anda Lia, fuma con nosotros.
—No soy así grace.
—Bueno creí que si.
—Te equivocaste.—rode los ojos.
—Huy la peque no quiere fumar.— Ross comenzó a reírse.
— Esta bien lo haré,y  no soy "la peque".

Me pasaron un cigarro, lo encendí y seguí las instrucciones de Ross, lo sentí feo al principio pero luego me fue bien aunque tosía de vez en cuando. Estúpido Ross y más estúpida yo por hacer estas cosas.  Me sentía extraña fumando, jamás lo volvería a hacer.

—Muy bien.—dijo Ian.
—Me sorprende tu chica Ross.—dijo Grace.
—No es mi chica.—suspiró Ross.
—Ni nunca lo seré. Si me disculpan debo irme.—tome mi mochila pero la mano de Ross hizo que no le fuera.
—Oye.
—¿Qué quieres?
—Saliendo de aquí iremos a una fiesta ¿vas?
—¿En serio? Una fiesta alas ¿3 pm?.
—No es cualquier fiesta.—grito Grace. — además en el lugar donde será, esta obscuro.
— Genial si voy.—me apunté, quería divertirme, quería ver la manera en que Ross se divertía.
—Bien. Oye no entraré a esa clase, inventa que falte.—susurró Ross, nos tocaba otra clase juntos.

•••
Al salir de la preparatoria me encontré con Ross, Grace e Ian esperándome. Ross me abrió la puerta del auto que parecía ser suyo, y cuando entre, Grace se puso a mi lado, no sin antes golpear mi hombro.

—Vámonos ya.
—¡Oye!—frunci el ceño.
—Grace, calmada.—dijo Ian.
—Disculpa, por momentos soy así.

Textee a mama y le avisé, por suerte me dejó ir después de tantos mensajes convenciéndola. No se por que se preocupaba tanto por mi, es decir, lo apreció mucho pero igual me gusta sentirme libre. En el camino Grace me dio ciertos puntos, número 1-No aceptar bebidas de alguien más, a excepción de ella, Ian y Ross, 2-Evitar tratar con otras personas y 3-No separarme de ellos. Ross me dio una chaqueta negra y dijo que me la pusiera, antes de que entremos al lugar, él hizo lo mismo. Mientras que Grace a Ian llevaban una chaqueta color café. Bajamos a un local que desconocía por completo, tomé la mano de Ross por miedo.

—No temas. No te harán daño, no lo permitiré.
—¿Te molesta si tomó tú mano?—observó nuestras manos entrelazados y negó.
—No para nada.

Grace e Ian igual se tomaron de la mano, pero por que son novios. Entramos al lugar y en lo cierto, estaba todo obscuro que podrías creer que ya era de noche, habían pocas luces y las personas gritaban algo que ni podía entender.

—Escucha, no te separes de mi—susurro Ross y asenti.
—Nos vemos en la salida alas 6,vamos amor.—dijo grace jalando a Ian.
—Vamos a beber un poco. ¿Te parece?—preguntó Ross.
—Claro, desde luego que si.

Esto no parecía una fiesta,más bien parecía un lugar para pelear, beber, drogarse y todo eso. Sin duda este no era mi estilo, pero mi subconsciente quería demostrarle a Ross que puedo ser ruda si quiero. Habían puros jóvenes e inclusive adultos tomando, el ambiente era bueno y la música mejor. Tomé un par de cervezas con Ross mientras que reíamos de nuestras estupideces aunque aún estábamos conscientes.
Luego Ross dijo que juguemos con unos chicos al famoso "botellita". El juego consistía en una botella al centro que cuando la giraban ya sea que te tocaba reto o ser la persona que ponga los retos, en esta ocasión no permitían dar a escoger si queríamos verdad o reto.

—Tu turno Donkan.—dijo una castaña.
—Bien.—un chico mayor giró la botella y le tocó a Ross y a él mismo.
—Joder.—dijo Ross.
—Esta bien, te daré una apuesta como reto.

Los gritos alrededor de nosotros me hacían querer golpear a todos, me frustraba por completo.

—Vale, donkan.—sonrió Ross.
—La apuesta es que...—donkan se quedo pensativo y me observo— que sean novios la chica y tú.
—¿Qué? No no.—dije frunciendo el ceño.
—Tienen que cumplirlo.
—El retó es para él no para mi.—grite.
—Yo pongo reglas en este juego, lo que se hace se cumple ¿entiendes werita?—Está bien lo cumpliremos.—suspiro Ross.
—Los estaremos observando, recuerden que vamos en la misma preparatoria. — esto parecía una broma.— solo será por una semana.
—No podre.—grite— es decir no.
—Sólo será una semana Lia. —susurró Ross.
—Bien. Cumpliremos.

Cambiar por ti.(Ross lynch) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora