Los días fueron de volada. Ross ya estaba mucho mejor, ya no tenía sus muletas ni su collarín. Le conté todo lo sucedido desde aquella noche el dice que no haga travesuras, al menos no sin el.
Estábamos tomados de la mano mientras caminabamos por la plaza,hoy era Halloween y varios estaban ya vestidos asustando a gente. El estúpido de Donkan estaba en la plaza, nos espiaba.
Junto a nosotros se encontraba Grace e Ian. Donkan se acercó hacía nosotros y abrazó a Ross, ¿Que diablos sucedía?—¿Ya le dijiste bro?—preguntó Donkan.
—Justamente eso iba ha hacer. Gracias Donkan.
—Cuando necesites otro favor, buscame.
—Lo tendré en cuenta.Donkan volvió a irse por donde vino y me detuve, solté la mano de Ross y les indiqué a Grace e Ian que siguieran caminando.
—La apuesta termino. En realidad pudo suceder antes..
—¿Qué?—susurré. Note su expresión de preocupación — ¿A qué te refieres Ross?
—Todo término Lia. Tenía un trato con Donkan y. .
—¿Por qué Ross? ¿No pudiste esperar decirlo después de halloween?
—Lia yo lo siento.. Solo quería saber que se siente ser tu novio por una apuesta.
—¡No Ross! Tu no sientes nada.
—Lia, escuchame, en verdad quería sentir la sensación de tenerte al menos por una apuesta, Donkan y yo quedamos en que nos daría un mes y..
—¿Así que por eso cambio la fecha? Me mentiste. No me contaste absolutamente nada, ¿sabes algo Ross?, yo no seré tú novia, y espero hayas disfrutado de esta maldita farsa.Comencé a irme pero alguien me detuve, me di media vuelta y miré a Grace.
—Vale no sé que ha pasado pero lo que sea, por favor no arruines está noche.—me dijo y observó a Ross — no lo arruinen. Ahora vamos por nuestros disfraces que tenemos una fiesta ala cual asistiremos.
—No esperes que vaya.—grite.—No quiero ir si un mentiroso igual estará.
—Vale ¿que te he dicho? No arruinen esta puta noche. Ross irá Lia, te guste o no.No me quedo mas que aceptar. Me aleje de Ross pero seguí con mi camino, la plaza era demasiado grande así que seguro si habían varias tiendas de disfraces. Pasamos a una tienda, Grace escogió su traje de sally la de el extraño mundo de jack, y Ian su vestuario de jack de la misma película.
Ross decidió vestirse del sombrerero loco y yo de Alicia, fue culpa de Grace ya que ella exigió que me vista de Alicia para combinar con él.
Compramos todo, nuestros disfraces,nuestros maquillaje y nos fuimos directo a mi casa.—Al fin traes a tu novio y amigos a casa.—dijo mi madre.
—Mama...—la fulmine con la mirada.
—¿Desean almorzar?
—Si no es mucha molestia, señora.— dijo Ian.
—Oh para nada.Mi madre trajo consigo los platos de nuestra comida. Nos sacó plática y noto la tensión entre Ross y yo.
—Vaya señora se ve exquisito esta comida.—dijo Grace sonriendo.
—Lo esta.—sonrio y se retiró.
—¿Así que no traes a nadie más a casa?—pregunto Ian.
—Además de ustedes no.—reí y di un sorbo a mi jugo.
—Bueno, ¿Lia no te importaría si nos arreglamos en tu casa? Ya sabes para llegar juntos ala fiesta.—comentó Grace.
—Por mi esta bien.—no estaba segura de mi respuesta.Después de nuestro exquisito almuerzo nos subimos a mi habitación. Los chicos se fueron a darse una ducha en la habitación de huéspedes, mientras que con Grace fumaba.
—Es como una obsesión, si Ian me ve, me mata. Le prometí dejarlo.—ella tosió.
—Idiota, esto lo hago solo por ti.—reí y di una calada.
—Gracias, a partir de ahora ya no más fumar. Esto es lo último. Te agradezco por acompañarme.—río_ pero si Ross te ve igual te mata.
—Da igual Ross. Me mintió Grace.
—Losé nena. Ian y yo escuchamos todo hoy en el centro comercial, lo lamento tanto.
—Ya no importa, no se como no pude darme cuenta.— mis párpados comenzaban a pesarme.— No me siento muy bien.
—Lo estarás.
—Le pusiste seguro ala puerta ¿verdad Grace?—pregunté.
—Uh si, creo—río —¿ tienes chicles? Sólo para quitar el olor a cigarro.
—Si en mi cajón.—señale.— Yo voy por ellos.
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Cambiar por ti.(Ross lynch)
FanfictionEn la vida de Lia, todo era tranquilidad o al menos hasta que llego a su vida; Ross Lynch. Nunca creyó que él fuera un chico odioso y difícil, así que su proposito sería ayudarlo a cambiar, pero... nunca se imaginó que para lograrlo tendría que pasa...