Los Susurradores

Capitulo 40 - Peleando por Sofía

Cayetana no podía estar más sorprendida y decepcionada por la revelación de Sofía. Tanto fue el golpe que no se contuvo y le dio una fuerte cachetada en la cara. Sofía no esperaba esta reacción tan violenta de parte de su madre, entonces se quedó desconcertada y sorprendida, poniendo su mano en su mejilla, donde su madre le había golpeado.

Arturo de pronto se puso delante de Sofía, puso su brazo alrededor de sus hombros, con la intención de protegerla de cualquier otro ataque por parte Cayetana.

"No voy a permitir que maltrate a mi mujer" - dijo él enojado.

Cayetana decidió ir por la agresión verbal en contra de Sofía.

"Desvergonzada! ¿Cómo es esto posible? Ensuciaste el nombre de nuestra familia! Tu no mereces llevar este apellido"

"Yo no me considero indigno de él, sólo porque estoy enamorada, mamá -Sofía replicó.

"Sofía, no te reconozco, ¿cómo pudiste caer tan bajo?" - dijo Andrea, en apoyo a su madre, pero no dijo nada más, pues sabia de la relación de su hermana y Arturo y no quería empeorar las cosas, así que se mantuvo callada, aunque no estuviera de acuerdo con esa relación.

"Andrea, mamá, no la torturen más, no ven que está embarazada y esto puede perjudicar a su bebé" - habló Irina yendo hasta donde Sofía, en signo de apoyo.

"Toda mi vida, escúchenme bien, voy a lamentar que mi nieto lleve la sangre de un hombre de tan baja categoría" - Cayetana habló con arrogancia.

"Cayetana no reniegues de tu sangre" - criticó Don Felipe, muy serio.

"Soy un hombre humilde, sí lo soy, pero también soy trabajador y jamás voy a tratar a mi hijo como usted está tratando a su hija, señora" - dijo Arturo dando otro paso hacia delante.

"Usted no me dirija la palabra - dijo Cayetana de manera altanera - ¿Qué sabe usted de hijos y de trabajo? casi me mata con su obra, pero como no lo logró, quiere quítame a mi hija, lo que más amo" – dijo desesperada- "ahora entiendo Sofía la manía que tenías de defender a este desgraciado. Como es posible que mi hija se estaba revolcando como una cualquiera! "– dijo escupiendo las palabras.

"No la vuelva a insultar, señora!", gritó Arturo, a punto de perder el control.

"Cayetana, no ofendas a tu hija de esa manera" - intervino Don Felipe - "no hicieron bien al haber entrado a la casa bajo un engaño, pero si ella te ama como ella dice, cuentan conmigo" dijo a Arturo.

"¿Cómo es posible papá? ¿Cómo puedes apoyar algo tan absurdo como esto? Arturo no es el hombre que merece mi hija!" - gritó de nuevo, fuera de control.

"Arturo es un hombre de principios, con eso me basta - dijo Don Felipe a su hija y dirigiéndose a Sofía y Arturo añadió - si se aman, tienen mi aprobación."

"Pero esto es el colmo, abuelo - criticó Andrea.

"Andrea, mamá, lo que importa es que Sofía sea feliz, ¿porque no lo pueden entender?" - habló Irina, indignada con la actitud de las dos.

"Gracias, güera" - agradeció Sofía mientras limpiaba una lágrima de su mejilla. Todo le dolía demasiado, sabía que iba a ser difícil, pero era peor de lo que había imaginado.

"Abuelo, perdóname si te decepcioné, pero Arturo es el hombre de mi vida y no quiero renunciar a él" - dijo Sofía, de rodillas delante de Don Felipe para poder mirarlo a los ojos.

"Gracias por la confianza, general, no voy a defraudarlo, la hare feliz y la protegeré con mi vida si es necesario" - dijo Arturo acercándose y dándole otro abrazo protector