Esto no da para mas

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Narra Sam_:

-Sam, Sam- Niall salio gritando.

- Hay, Niall, ¿ que hice?- lo abraze.

El me devolvió el abrazo- Soy una estúpida. Metí la pata hasta el fondo.

- ¿ Quieres que te lleve a casa?- me limpió una lagrima

-Si, solo deja me ir a buscar mi bolso.

Entre, tomé mis cosas y antes de salir Aless se interpuso en mi camino.

- Sam ...

- Ahora no Aless,- lo esquive y me fui.

Al llegar al apartamento trate de llamar a Harry pero me mandaba a buzón de vos así que decidí escribirle mensajes pero no respondió ninguno de ellos.

- Sam_, ten, te prepare una chocolate caliente para que te sientas mejor- dijo pasandome una tasa.

- Gracias Niall- dije y me senté en mi cama.

- Ey, no me gusta verte así- se señor a mi lado- vamos cambia esa cara.

- Niall como quieres que sonría, sabiendo que Harry esta mal por mi culpa y con razon ; si yo estaría en su lugar ya lo habría mandado a la mierda.

- Eu escuchame, yo se que lo que hiciste no estuvo bien, porque sabemos que es un juego y que a Harry lo que le molesto fue que te hayas besado con Aless, pero el te quiere y aunque ahora este enojado, te va a saber perdonar. Ustedes están hechos el uno para el otro y van a poder solucionar las cosas, ya veras.

- Gracias, Niall, nose que haría son vos- Sonreí.- tengo suerte de tenerte como amigo.

- Y yo a vos.

- Nosotros, pasamos por un montón de cosas y me alegra poder contar con vos siempre y saber que estas cada vez que necesito a alguien.

- Es que somos almas gemelas - bromeo.

- Si es verdad, tenemos muchas cosas en comun, aunque yo nunca te vi como algo mas que a amigos, no me molestaría pasar el resto de mi vidas con vos.

- A mi tampoco- sonrio- te propongo un trato, si en un futuro ninguno de los dos termina en pareja y vemos que vamos a este solos por el resto de nuestras vidas, vos y yo nos casamos- dijo divertido.

- Este bien, es un trato.

- ¿Quieres que me quede a dormir con vos esta noche?

- Me encantaria, pero quiero ir a ver a Harry para arreglar las cosas.- dije

- Esta bien, llevate mi auto, cualquier cosas me llamas - avisó

Salí de mi casa, encendí el auto y arranque rumbo a la casa de Harry. Al llegar me baje del auto y entre al edificio. Al llegar a su puerta toqué timbre pero nadie me contestó, volví a tocar pero nada.

Yo no me podía ir así, tenia que arreglar las cosas con Harry, me quede esperando en su puerta un rato hasta que se me ocurrió ir a la terraza ya que el a veces una allí a pensar.

Subí por las escaleras hasta llegar a la terraza y empuje la gran puerta dejando que una ventisca choque contra mi cara.

Salí y divise a Harry tapado con una manta al lado de una fogata. Parecía estar dormido, me acerque despacio para no despertarlo pero sin querer pise una rama que estaba tirada haciendo que Harry se sobresalta se.

Me miró, su cara era una mezcla de molestia y tristeza. Volvió a su posición anterior dándome la espalda.

- ¿ Que haces aquí?- pregunto sin mirarme

- Quiero arreglar las cosas .- respondi

Soltó una sínica carcajada como si se burlase- ¿Arreglar las cosas dices?- me miró para luego parase

- Si Harry, quiero arreglar las cosas entre nosotros.

- No hay nada que arreglar, me di cuenta que lo nuestro es imposible.- se acercó a mi

- ¿ Que dices?

- Si Sam, no tenemos nada en común y no da para mas.

- Me parece que estas exagerando,no puedes querer dejar todo por un beso insignificante.

- Un beso insignificante dices?, perdón pero lo que yo vi no era algo insignicante. Al principio me sentía mal por aquella escena que te hice en el hospital pero después me di cuenta que no estaba tan equivocado como pensaba.

-No, Harry, te estas equivocando y estas diciendo cosas que no son asi.- dije aguantandome las lágrimas.

- Puede ser que me equivoque pero ahora lo mejor va a ser que cada uno siga su camino.

- Harry, por favor... no podemos terminar así porque yo...te quiero.

El cero los ojos al escuchar esas palabras y una lágrima cayo por su mejilla- Te acordaste muy tarde de eso- dijo y se alejo de mi.

Lágrimas se apoderaron de mi rostro, inalé profundo y me fui de ahí dando un portaso. No entendía porque las cosas tenían que ser asi. Nosotros nos queríamos pero dejamos que estúpidas cosas nos separaran. A veces el amor no es tan fuerte.

De vuelta en mi departamento,me encerré en mi habitación y deje que las lagrimas calleran, queriendo arrancar este dolor que ciento en mi pero al final me quede dormida con una angustia terrible en el pecho.

-Sam_, vamos abreme la puerta que tenemos que ir a la escuela.

- No Niall, no voy a ir a la escuela hoy.

- Si vas a ir, no te voy a dejar acá tirada viendo como te pasa la vida. Tenes que salir, no dejes que Harry te arruine el día. Vamo levantate- golpio la puerta.

Me levante y la abri- Tienes razon-dije

Me cambie y nos dirijimos a la escuela. Cuando estábamos en el salón de clases, vi a Aless entrar al aula.

- Disculpe, señor - le dijo a profesor- soy nuevo y estoy perdido.

- Deja me ver tu horario -Aless le extendió el papel - Si, este es tu salón.- Clase el es Aless, su nuevo compañero. Ve y toma asiento

Aless paso portal lado mio mirándome sorprendido y se sentó en ultima fila.

Al tocar el timbre de finalizada la clase salí del salón para dirigir e a la cafetería.

- Sam_ - escuhe que alguien gritaba.

- Ahh Hola, Aless- dije cuando nos encontrábamos frente a frente. La verdad todavía me sentía un poco rara al conversar con el debido alto que pasó ayer.

- No sabia que venias a esta escuela.

- Ah bueno, si, Niall y yo venimos acá.

- Me alegra que estemos en el mismo salon- sonrió.

- A mi también, justo iba a la cafetería.

- Yo también, ¿ porque no almorzamos juntos?

- Seria genial- finji una sonrisa.

- Al entrar nos sentamos en una mesa y nos pusimos a conversar de distintos temas. En verdad Aless era una persona muy interesante y divertida.

Le estaba dando un mordisco a mi manzana cuando veo a Harry entrar a la cafetería. Saluda a unos amigos y se voltea y nos ve. Su cara se torna en rojo furioso y comienza a caminar hacia nosotros, me paró para ir y hablarle.

- Harry, tranquilo

- ¿ Que hace el aquí? pregunta señalando a Aless.

- Comenzó a estudiar aquí -le dije- puedes calmarte.

- No, no puedo calmarme si el esta aquí, sera mejor que te cuides la espalda - dijo para luego irse de la cafetería, dejando me confundida.

Una casualidad explosiva [H.S.]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora