Capítulo 43

429 16 2
                                    

Volvimos juntos pero nunca subimos, nos quedamos hablando en las escaleras del edificio.

-Me parece que me voy a ir antes de que baje Julián.

- ¿Por qué?

-No le gusta que pasemos tiempo juntos, ya me lo dijo.

El se rió y yo lo mire.

- ¿No salían juntos?

-Todo iba bárbaro hasta que me vio chapando con Lola.

Hice un poco de memoria: Su prima. Hice una cara rara, y lo mire.

-Sí, casi me caga a trompadas. Al otro día nos mamamos y éramos amigos de nuevo.

-Entonces, ¿estás con ella?

-Mas o menos, un poco con ella, un poco con otras...

Me sonrió.

-Chau, no te mangas ninguna cagada.

Lo saludé y a penas lo vi desaparecer saqué mi celular de mi bolsillo. Entre al Whatsapp y el contacto ya se había editado solo, sonreí al ver que tenía una foto de perfil conmigo. Sin dudar, le escribí.

"Te estoy esperando abajo, ¿qué esperas para venir?"

Me quedé un rato mirando la pantalla, el "escribiendo" aparecía y se iba, probablemente ni sabía quien era. Después de un rato, sin darme vuelta, escuché el ascensor, acto seguido la puerta de entrada y luego, a él:

- ¿POR QUÉ TENES UNA FOTO EN BIKINI EN EL WHATSAPP?

Bufe.

- ¿Vamos a hablar o no?

-Sí, perdón.

Lo miré. Estaba lindo, tenía un jean apretado y una remera blanca. Le sonreí un poco, al segundo me di cuenta y cambié la cara.

-Ya se que te gusto, no lo podes disimular.

- ¿Quién dijo que quiero disimularlo?

Me sonrió.

-Entonces, ¿te gusto?

- ¿Cuándo dejaste de hacerlo?

Se sentó al lado mío y yo me pare.

-No, vamos a otro lado.

Le estiré mi mano para ayudarlo a levantarse y cuando se paro quedamos muy junto, demasiado para mi gusto.

- ¿Por qué ahora querés hablar?

Me separé y empecé a caminar.

-Porque...aunque a vos no te caiga muy bien, Agus me contó un par de cosas.

-Me cae bien cuando esta lejos de vos.

Lo mire y el hablo rápidamente.

- ¿Dónde vamos?

-A la costanera, hace mucho no voy.

-Va a oscurecer en un rato, Ori.

- ¿Y? Estoy con vos, ¿vos no sos Superman?

-No soy Superman pero no te va a pasar nada estando conmigo, sí.

Y sí, le sonreí nuevamente. Agh, odiaba el poder que tenía sobre mí. Pero no, no voy a hacérsela tan fácil, eso me dijo mi amigo, ¿no?

Cuando llegamos nos sentamos mirando el agua, en verdad se estaba haciendo de noche pero el anaranjado del cielo se reflejaba en el río y había un poco más de luz. Ninguno dijo nada hasta que decidí romper el silencio.

-Sí.

El me miro extraño.

-Si, ¿qué?

-Sí, te extrañé y te extraño.

El me miró y giró sus piernas para quedar de frente a mí, yo seguí con mi mirada al agua.

-No pensé en otra cosa que no sea en vos estos meses. Sé que suena un poco egoísta, pero esperaba encontrarme con otra cosa. Supongo que porque no tenía más nada que hacer en Londres que preocuparme y cuidar de mi hermana.

Suspiré, no lo mires. Si lo miraba iba a llorar, no lo mires. Ok, lo mire.

-Soy un estúpido.

Sus ojos se pusieron cristalinos y tuve la necesidad de hacer un chiste para cortar el momento tenso.

- ¿Qué? ¿Qué Superman va a llorar?

Se rió, festejé internamente. Me encogí de hombros y lo mire.

-Supongo que el tiempo lo dirá.

- ¿Qué cosa? ¿Qué tenemos que estar juntos? Eso te lo digo yo.

Negué con la cabeza.

-Ya nada es como antes, somos distintos. Juntos y separados, no hay que forzar las cosas.

- ¿Forzar las cosas? Mi corazón se acelera cuando te veo, ¿cómo es que fuerzo eso?

Lo mire anonadada.

-El mío también hace eso.

-Sí, ya lo sé, se sale por tus ojos cuando me ves sin remera.

We protect each other II Orian II AdaptadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora