Love me Again // Luke Hemmings// (5SOS #1)

-Capítulo 35-

Ashton esperó con paciencia a que la pantalla de su laptop mostrara a su amiga y su hijo. Hacía algo más de dos semanas que ellos se habían ido y el humor que tenía Luke era terrible. Parecía no quedarle nada bien, estaba siempre molesto y refunfuñando. Como un niño pequeño. 

Ashton volvió a llamarla por Skype y esperó un rato hasta que ella apareció. Se notaba algo cansada e incluso tenía unas pronunciadas ojeras debajo de sus ojos. Parecía que no había dormido en días.

—Lenna.

—Hola Ash.— Lenna tapó un bostezo con una de sus manos. Su cuerpo le estaba mostrando claros signos de que debía tomar una larga siesta. 

—¿Te encuentras bien? —Él frunció el ceño un poco preocupado por verla en ese estado. Semejaba a como ella se veía luego de dar a luz a Ethan. 

—Si, solo estoy un poco cansada.—Frotó sus ojos e intento mantenerlos abierto. Mientras hablaba con Ashton trataba de terminar unos contratos para entregarle a su primo a primera hora de la mañana. Solo rogaba que Ethan se comportara esta noche.—¿Cómo van las cosas por allí?

—Un poco agitadas, pero bien.— Ashton observó como los ojos de ella se cerraban conforme pasaba el tiempo. Él siguió contándole acerca de lo que estaban haciendo hasta como ellos estaban. Lenna intentó no dormirse, pero se perdía en lo que se él decía.—¿Estas segura que te encuentras bien?

—Tengo un par de problemas en el trabajo y Ethan ha estado raro últimamente.— Ashton volvió a fruncir su ceño e hizo una mueca con sus labios, como si estuviera consternado y preocupado a la vez. 

—¿En qué sentido?

—No duerme por la noches a no ser que sea conmigo o con una de las prendas que hay de Luke aquí, parece siempre molesto y la poca simpatía que le quedaba despareció.

—¿Los has llevado al médico?—A través del monitor se escuchó unos quejidos de bebé y segundos más tarde un llanto un poco agudo.

—Si, lo he hecho— contestó ella antes de ir corriendo a la habitación de su bebé y acunarlo sobre su pecho. Este buscó desesperado el cuello de su mamá para apoyar sus pequeños labios rosados. Una costumbre que tenía desde que había nacido. Lenna sentía como el pecho de Ethan subía y bajaba al paso que lloraba y eso le rompía el alma. No sabía como calmarlo, había intentado de todo, pero nada le complacía. Y había sido así durante una semana. 

Tomó su chupete de la cuna y un par de juguetes para ir hasta donde había dejado la computadora.  Al llegar notó que Ashton no estaba solo, Calum lo acompañaba.

—¿Qué le ocurre al enano?— Ethan giró la cabeza al instante de sentir la voz de Calum. Al verlo, el pequeño sonrió y su  llanto parecía algo muy lejano, de un pasado.  Calum le hizo una mueca rara y Ethan tiró sus brazos como para que lo tomara, pero solo tocó la pantalla. 

—Creo que los extraña— contestó Lenna un poco dudosa. Su hijo nunca había extrañado a nadie que no fuera ella. Calum y Ashton sonrieron apenados al ver como el pequeño seguía intentado tocarlos sin éxito. Al ver que no iba a poder tocarlos ni nada volvió a largar un llanto que aturdió a todos. —Shh, shh.—Lenna meció sobre su pecho al bebé.— Vamos, cariño, los tíos no quieren verte llorar.

—Anda, Ethan, no llores.— El bebé volvió a girar la vista a la pantalla cuando Ashton habló. Lenna hubiera deseado ir con ellos en este momento, pero no podía. 

Él se volvió a quejar un poco y ella le acomodó su chupete entre los labios y le entregó uno de sus sonajeros en forma de auto para impedir el llanto.

—Luke se esta comportando igual que Ethan ¿sabes?—Lenna los observó un poco extrañada.—Sacando el llanto, claro.

—Vamos, ven aquí con nosotros—volvió  a insistir Calum. Y esa era la rutina, cada vez que ella hablaba con cualquiera de los cuatro le rogaban que vaya allí con ellos, que no se preocupara por nada. La trataban de convencer con palabras dulces y le recordaban lo mucho que ella deseaba estar con Luke. Él insistía en que no quería perderse nada más acerca de su hijo y sabía que estaba próximo a dar sus primeros pasos y a decir sus primeras palabras, le enfermaba el solo pensamiento de perderse aquello.