Love me Again // Luke Hemmings// (5SOS #1)

-Capítulo 40-

Lenna al salir al jardín notó como el frío aire impactaba con suavidad sobre su rostro y enviaba pequeños escalofríos a lo largo de su columna vertebral. El olor a humedad mezclado con el olor a césped se colaba por su nariz, recordando las veces que jugaba ahí cuando era una niña. 

Luke la abrazó por los hombros y la atrajo más cerca de sí. Había tranquilidad allí, el sol estaba por ponerse y la linea del horizonte se confundía con el mismo. Era casi precioso, no quedaban más de unas horas de sol y el reflejo pegaba en el agua de piscina. Los McMahon tenía uno de los jardines más lindo que Luke había visto en su vida. 

Tomaron asiento en uno de los muebles de exteriores que rodeaban la piscina mientras observaban con tranquilidad como el agua se ondulaba gracias al viento. Luke se acomodó dejando a ella entre sus piernas y con el torso recargado en su pecho. Un respiró de alivio lo atravesó al sentirla en sus brazos otra vez. Ella no se había ido, ni lo había olvidado. Seguía a su lado esperándolo y respetando su agitada vida, sin reproches, ni peleas, sin recriminaciones. Cuidando a un bebé con dieciocho años por sí sola y, así mismo, se daba un tiempo para ella. Tenía una vida de adulta siendo una niña.

No a todas las madres adolescente esto les resulta fácil, casi a ninguna  pero ella contaba con el apoyo de sus padres y de toda su familia. Ninguno tenía problemas económicos y ambos estaban involucrados con sus responsabilidades a pleno. Podían a acomodar sus horarios y sus tiempos para satisfacer todas sus necesidades y con un poco de ayuda las cosas no eran tan complicadas. Él estaba muy orgulloso de su chica y de como su hijo parecía adaptarse a las situaciones. 

Por supuesto que el hecho de que Lenna siempre hubiera soñado con tener un bebé entre sus brazos, ayudaba a la situación, pero aquello no lo hacía más fácil. Ella no se entristeció al notar su embarazo o maldijo su vida, porque ella siempre anheló ser mamá. Puede que en un par de años más, pero era su sueño máximo y ahora podía tocarlo con sus dedos a pleno.

Una suave sonrisa se voló por el rostro de él mientras besaba detrás de su oreja. Ella tenía el pelo recogido en un flojo recogido a la altura de su nuca y él podía asegurar que era improvisado. Luke corrió un poco su recogido para poder besar un poco su cuello. Con sus labios tomó el colgante con corazones y lo movió hasta que estos quedaran en su nuca, él besó los corazones y volvió a dejarlos en su lugar. 

Lenna sentía desfallecer ante su tacto y su aliento rozando algunas partes sensibles de su anatomía y él podía notarlo, como acariciaba sus manos y la manera en la que sus piernas se contraían.La mezcla de los perfumes de ella y de él era empalagosa y aromatizaba sus alrededores. 

—Estas demasiado cariñoso—susurró ella perdida en sus besos y en sus manos rodeando su estrecha cintura. 

—No he podido estar contigo durante meses. Quiero recuperar mi tiempo perdido.—El aliento de Luke rozó la oreja de ella decorada con un par de pendientes a juego con su vestido.

—Solo fueron dos meses.—Él se encogió de hombros y dibujó pequeños patrones en la cintura y caderas de ella. 

Si bien solo habían sido dos meses para Luke habían sido los dos meses más cercanos al infierno que había pasado. Ni siquiera cuando ella se alejó por completo de él lo había pasado tan mal. Suponía que aquella vez tenía pensado superarla y sabía que ella no volvería en cambio, esta vez ella si lo estaba esperando junto a su hijo y aquello le molestaba. No saber como ellos estaban, no poder hacer nada por ayudarla con su bebé y solo conformarse con llamados  y vídeos le enfermaba. Más de una vez, cuando estaban en Londres, pensó en tomar un vuelo y desobligarse de su papel de famoso por unos días, olvidarse de porque estaba allí e ir con ella pero claro sus amigos siempre sabían frenarlo.