23. Rebel Yell.

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"I'd sell my soul for you, babe
for money to burn with you.
I'd give you all, and have none, babe..."

ANDY

- No lo sé, Connor. Fue algo muy extraño. - Explico con la mirada perdida en la nada mientras juego a prender y apagar la mecha incandescente del encendedor en mi mano. - Por una vez en mucho tiempo estuve tranquilo. En paz.

Recordar como me hizo sentir el pasar unas horas con Odette y la pequeña Allison seguía siendo extraño pero satisfactorio. Había optado por hablarlo con Connor. No quería un consejo, ni que me dijeran que debía hacer. Sólo quería tener el pequeño placer de relatarlo.

Espero a la respuesta de mi amigo pero al ver que esta era ausente, lo miro y él tiene una expresión de sorpresa.

- ¿Quién eres y qué hiciste con Andy Ryder?

Suelto un suspiro de frustración. No era la respuesta que esperaba después de sincerarme por una vez en la vida.

- Olvídalo, - Me levanto del sillón. - no sé por qué te cuento esto.

Camino hasta las puertas de cristal, abriendo las para salir a la pequeña terraza de mi departamento. Es pasado medio día pero el cielo está nublado y se siente frío cuando el viento sopla. No puedo sacar el día de ayer de mi mente, ¿por qué esa sensación de tranquilidad? ¿La había sentido antes? ¿Cuándo? ¿Por qué? ¿Qué necesito para sentir esa calidez de nuevo?

- No te molestes por lo que voy a decir, hermano, - Connor se recarga en el barandal de la terraza, junto a mí. - pero creo que esa "tranquilidad" que ayer sentiste no la volverás a experimentar en clubes nocturnos y acostándote con chicas como Scarlett.

- ¿Qué quieres decir?

- Necesitas a alguien... Diferente. - Le cuesta buscar palabras para expresarse y eso me pone a pensar el rumbo que esta conversación está tomando.

- Por favor, dime que con la expresión "alguien diferente", no te estás refiriendo a la pequeña Belikov.

Él hace una mueca. Lo estaba haciendo.

- Bromeas, ¿cierto?

- No, no lo hago. - Admite. - Piénsalo un momento, tú y Odette son muy distintos; no por nada dicen que los opuestos se atraen...

- Connor, - Lo interrumpo antes que pueda decir algo más. - no te ofendas, pero si lo que buscas es emparejarme con la mejor amiga de la chica que tú quieres, será mejor que saques esa idea de tu cabeza porque no será así.

Probablemente fui un poco rudo pero él más que nadie sabe que yo no busco una relación seria. Ni siquiera con Scarlett.

Connor suelta el aire con derrota y ninguna palabra sale de él esta vez.

- Mira, - Comienzo a hablar. - sabes que no estoy buscando ningún tipo de relación amorosa porque sé que es una pérdida de tiempo. Todas las chicas, sobre todo las del tipo de Odette, quieren alguien a quien acosar las veinticuatro horas del día. Quieren alguien a quien presumir ante los demás y que sólo les preste atención a ellas; quieren a alguien que diga todo lo que ellas quieren escuchar, que les regale chocolates para luego quejarse del peso que tienen y flores para luego reclamar que no son las que a ellas adoran; quieren a alguien que eleve su ego diciéndoles lo bonitas que son y que las lleve a casa después del colegio. ¿Crees que tengo ganas de ser eso?

Connor me mira con cierta burla.

- Amigo mío, recuerda lo que estas diciendo este día porque cuando te vea haciendo todo eso que recién mencionaste, no dejaré de molestarte hasta mi tercera vida.

Amarte a MorirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora