ODETTE
Estamos muertos. - Dijo Ty alarmado.
- No si intento detener la bala antes que nos atraviese. - Respondí decidida.
Subí corriendo la escalera hasta llegar a la puerta abierta del cuarto de mi hermana. En el umbral de la puerta, se veía a mi mamá con las manos en las caderas. Eso era señal de que estaba molesta. Erick se encontraba junto a ella, con los brazos cruzados frente su pecho. Eso era señal de que aquí rodarían cabezas. Caminé hasta detenerme detrás de ellos para poder ver a Scarlett. Ella estaba pasmada y pálida de susto y nervios con los ojos rebotando en todos lados, intentando desesperadamente encontrar algo que la ayudara a ingeniar una idea que la sacara de éste embrollo. Por otro lado, Andrew estaba recargado en el escritorio de Scarlett, en su fachada rebelde y despreocupada, con las manos escondidas en los bolsillos de su pantalón, mirando al piso con una sonrisa burlona en su rostro. Al menos mamá y Erick encontraron a la pareja vestida y peinada correctamente y no de la forma en la que hace unos días yo tuve la infortunia de encontrar.
- ¿Y bien? - Presionó mamá. - ¿Quién es este muchacho y por qué carajo lo acabo de encontrar en tu habitación?
- Yo... - Scarlett en un acto casi milagroso, me encontró con la mirada y de pronto su cara se tornó con sorpresa como quien acaba de descubrir algo. Oh no, acaba de tener una idea. - Yo... Yo no conozco a éste muchacho. - Todos la miramos extrañados, incluso Ryder, que despegó la mirada del piso y miraba confundido a mi hermana.
- ¿Qué? - Preguntaron mamá y Erick al unísono.
Scarlett me miró de nuevo sobre el hombro de mamá.
- Eso. - Respondió. - Qué éste chico yo no lo conozco... Bueno, lo he visto un par de veces pero...
Andy, mamá y Erick seguían con rostros confusos. Yo pasé de confundida a modo de pánico. ¿Qué estará pensando ahora mi hermana?
- Un momento, jovencita. - Intervino Erick. - Explícate. ¿Lo conoces o no?
- Sí lo conozco pero no es mi amigo. - Y de nuevo me miró. - Es amigo de Odette. Vino a buscarla a ella.
Y como si me hubieran declarado la verdadera culpable de un acto de homicidio, todos en la habitación me miraron. Yo todo lo que hice, fue quedarme pasmada en mi lugar como si mi cuerpo y mi mente se hubieran congelado, procesando lo que acababa de ocurrir.
- ¿Odette? - Preguntó mamá con sorpresa.
- Sí, él es amigo de Odette y vino a buscarla pero al parecer se equivocó de habitación y entró a la mía. - Continuó Scarlett. A este punto, Ryder ya había pasado de confundido a completamente impactado. - De hecho, es justo lo que le decía a éste chico cuando ustedes llegaron.
- ¿Eso... eso es cierto, tesoro? - Preguntó mamá mirando de Scarlett a mí, una y otra vez.
De nuevo, todos me observaban. Pasé mi vista a Scarlett y esta me dedicó unos ojos de súplica para que le siguiera el juego. Oh, maldita sea.
- S... sí, mamá. - Respondí con voz temblorosa. - Es cierto... Andrew... Andy, es... amigo mío.
- Oh. - Mamá estaba sorprendida. - Bueno, aún así... Jovencito, - Se dirigió a Andy esta vez. - No deberías estar entrando por las ventanas en casas ajenas, mucho menos al cuarto de unas jovencitas.
Andy asintió con la cabeza sin apartar la mirada curiosa de mí. ¡Rayos! No me veas. ¿Qué traía algo en la cara?
- Lo lamento, señora. - Contestó éste amablemente. - Yo quería darle una sorpresa a Odette pero... - Miró a Scar con severidad y ella devolvió la mirada. - me equivoque de ventana.

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Amarte a Morir
Novela JuvenilDos hermanas: Ángel y demonio. Un muchacho: Los mismos problemas. Triángulos amorosos, círculos viciosos. Nadie estará a salvo. ¿Por quién te dejarás llevar? ¿Te permitirás ir al cielo o te dejarás arrastrar por el infierno?