El Cielo Tras el Infierno

22. Mascarada

XXII. MASCARADA

Los días que siguieron fueron un poco de tortura para Snape y lo demostraba sacando lo peor de su carácter con los alumnos. En las clases que le impartía a su novia era habitual que quitara puntos a cualquier casa incluida la suya si algún alumno volteaba a mirarla más de lo estrictamente necesario o trataba de darle conversación. En los pasillos si tropezaba con algún grupo de estudiantes que la seguían inmediatamente los sancionaba y los corría lejos de ella. Para quienes sufrían su ira era altamente angustioso encontrárselo en cualquier sitio aunque nadie adjudicaba lo ocurrido a la chica, asumían que solo era su agrio carácter aunque exacerbado; pero para sus amigos era muy divertido verlo en ese estado de celos y le hacían muchas bromitas. Más de una vez Remus y Minerva lo interceptaban y se lo llevaban en un intento de apaciguarlo y para evitar que hiciera una estupidez, sobre todo la profesora que además lo reprendía -"Por Salazar Severus contrólate pareces un adolescente, ella no les hace caso y tú te pasas el día persiguiéndola". Ni de Harry se salvó -"Quien me diría que un día vería al gran Snape enamorado en estado puro sin poder evitar estar celoso. Ahora veo que Remus no exageraba con lo de territorial".

Incluso Dumbledore lo cito en la dirección con la idea de distraerlo, para su desgracia no lo logro. Había algo más que celos por su parte y a nadie se lo dijo excepto a lunático una noche en su despacho mientras departían.

- Severus de verdad que si no te calmas te va a dar algo, y yo no puedo estarte siguiendo a todas horas -se reía de su amigo-

- Lamento interferir en tu vida sabes que no es mi intención, trato de estar más centrado pero no lo logro y no son solo celos

- ¿No es solo miedo a perderla, a que se pueda interesar por alguien más?

- No, si ella llegara a querer salir con otro, a enamorarse de un chico yo jamás interferiría porque eso la haría infeliz, y para mí su felicidad es primero que la mía

- Y entonces que te sucede, a veces actúas como un maniaco

- Mi temor es que la lastimen, no puedo olvidar lo que Weasley le hizo, es como si hubiese estado ahí, tengo las imágenes grabadas y la culpa de que no pude evitarlo, no me perdonaría que por un descuido mío eso se repitiera, ¿tienes idea de cuantos alumnos tienen pensamientos lujuriosos con ella ahora?

- ¿Piensas que algún estudiante sería capaz de eso?

- Y porque no, nadie se imaginaba que el imbécil ese rompiera un plato y mira todo el daño que hizo, gracias a sus acciones ella intento matarse. Tienes idea de lo impotente que me sentí en ambas ocasiones que la encontré, la primera gravemente herida y la segunda más muerta que viva

- Creo que todos te hemos creído tan fuerte que olvidamos el impacto que esos hechos causarían en ti y las heridas psicológicas que te pudieran quedar. Cuando me mostraste el ataque a Ginny, aunque aliviado de saber que no llego a más, no pude evitar sentir agonía por ella y varias veces tenía pesadillas con eso; de verdad no puedo imaginar como lo has pasado tú con lo de Hermione siendo mil veces peor. ¿Por qué no lo dijiste antes?, tú no tuviste la culpa ni podías hacer nada por evitarlo, nadie podía hacerlo y ahora veo que eso te está consumiendo. Severus si tú no estás bien no podrás cuidarla, tarde o temprano te agobiara y te quitara el control, te va a destruir y a la relación en el camino, no es sano; tanto decirle a ella que se desahogara y tu obstinado no lo haces, a ver si empiezas a aplicarte tus propios consejos

- Sé que tienes razón y esto me está quebrando, tengo días sin poder dormir bien

- ¿Lo has hablado con ella?, lo de tus razones para actuar así me refiero