16.

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Punto de vista de Wendy.

Me desperté exaltada, miré hacía todos lados asustada sin saber porque, pero todavía lo hice más al ver que Harry no estaba junto a mi y no me encontraba en el hospital; sino en un banco en medio de un bosque.

Me levanté y miré hacía abajo, la ropa que llevaba puesta era la misma que la de ayer ¿Cómo había llegado aquí?

Hacía frío, mucho frío demasiado como para estar solo en septiembre. Froté mis manos esperando obtener un poco de calor, no llevaba abrigo y lo más probable sería que tardara mucho en buscar la salida. Así que comencé a andar en busca de una salida o incluso un lugar donde poder refugiarme del frío y pedir ayuda.

Llevaba horas caminando, los pies me estaban matando junto con el frío, me sentía impotente ante la situación. Y sin más me senté junto a un árbol rendida a llorar dispuesta a quedarme congelada.

Escondí mi cabeza entre mis rodillas y abracé a mis piernas, con la esperanza de entrar un poco en calor.

Me sobresalté cuándo algo o alguien me tocó el hombro. Levanté la cabeza y vi una pequeña figura mirándome inocentemente.

Era una niña, de unos cuatro años, con el pelo castaño, liso y ojos verdes.

-¿Te has perdido, pequeña?-Le dije limpiándome algunas lágrimas.
La niña asintió lentamente con la cabeza.-Yo también me he perdido, ¿Sabes?

Ella inclinó la cabeza hacia la derecha, sin comprenser la situación.
Puede que en su pequeña cabecita no cabiera la posibilidad de ver a una persona adulta perdida en el medio de un bosque.

-¿Cómo te llamas?-Le pregunté con dulzura.

-Maddie.-Murmuró.

-¿Maddie? Que bonito.-Le sonreí, intentando transmitirle algo de tranquilidad.-¿Estabas aquí con tu mamá?- Ella asintió de nuevo.-Bueno, pues te ayudaré a buscarla.-Me levanté del suelo y me sacudí los pantalones, para a continuación, agarrar la pequeña mano de Maddie y comenzar a caminar.

-¿Por qué llorabas? ¿Estás triste? Mi mamá dice que cuando estés triste pienses en que todas las personas que te quieren no te querrían ver así.-se paró y levantó su cabecita para poder mirarme bien.

-Tu mamá es una mujer muy sabia.- me agache y cogí a Maddie en brazos con la intención de tenerla lo más cerca que pudiera, aunque fuera sin saber porqué.

Se estaba haciendo de noche y no encontrábamos a la madre de Maddie, a la que por cierto le había cogido un gran cariño en estas horas que habíamos pasado juntas. Estaba por desistir cuando vi a lo lejos una pequeña casa de madera.

-¡Mira Maddie, una casa!-señale hacia su dirección.

La niña comenzó a aplaudir en señal de alegría y patalear con la intención de que la bajara para poder correr hasta la casa, así que la bajé y ambas agarradas de la mano comenzamos a correr hacia ella.

Llegamos e intenté abrir la puerta, que, para mi sorpresa, se abrió de par en par al darle un pequeño empujón.

Maddie parecía asustada, ya que cuando la puerta se desplazó se ocultó detrás de mi.

-Tranquila Maddie, seguro que la gente que vive aquí es muy buena.-Le dije y ella asintió.

Le agarré la mano de nuevo y caminamos lentamente al interior de la cabaña.

Estaba todo oscuro y cuándo entramos la puerta se cerró de golpe a nuestras espaldas.

Maddie gritó y se abrazó a mis piernas.

-Seguro que ha sido el viento Maddie, tranquila.

Segundos después, a nuestro alrededor se empezaron a escuchar pasos, de una forma extraña, ya que eran como pasos lejanos que estaban cerca a la vez, como si hubiera eco.

-Wendy.-Me llamó Maddie con la voz temblorosa.
¿Cómo sabía mi nombre? No se lo había dicho.

Me giré un poco para mirarla y vi que la pared estaba en llamas.
Cogí a Maddie en brazos y corrí hacia la entrada de la casa, ya que ahora todo a nuestro al rededor estaba prendido de fuego.

Llegué a la oscuridad del bosque de nuevo, y fué cuándo me di cuenta de que Maddie no estaba conmigo.

-¡Mamá!-La escuché gritar desde el interior de la cabaña.

Corrí hacía la cabaña de nuevo en llamas, no pensaba dejar a Maddie ahí.

-¡Mamá!- volvió a gritar.

Las llamas eran demasiado intensas como para poder entrar de nuevo a por ella, no podía hacer nada. Solo oía sus gritos desesperados llamándome una y otra vez.

-¡MAMÁ!

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Holaaaaaaa!
Este capitulo puede ser algo confuso, lo sabemos, queriamos que os comierais la cabeza un poquito jajaj.
Por cierto, pasa algo? ahora solamente votan unas... diez personas.
Antes había al rededor de 20 votos y muchisimos mas comentarios.
Bueno, pues nada :)

Att:Luci

Holiii!!!

Bueno, esperamos que os guste el capítulo, todo parecerá extraño pero lo explicaremos en el capítulo del domingo. No olvideis votar y comentar, para nosotras es muy importante :) Un beso

Att: Lore

Maniac |H.S|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora