Maniac |H.S|

1.

Punto de vista de Wendy.

Quizás a una chica normal de mi edad no le gustaría un libro y menos pisar una biblioteca, aunque de hecho es algo que pocos hacen, hoy en día todo se basa en Internet y lo puedo decir de primera mano, eso seguro.

Trabajo en una antigua biblioteca de la ciudad y esto casi siempre esta desierto salvo por algunos viejos que vienen a echar la partida de ajedrez al tranquilo silencio que reina aquí.

Eran las 7:45 de la tarde y mi turno estaba apunto de acabar por lo que pedí amablemente a Joe y Carl que se fueran del establecimiento ya que estábamos apunto de cerrar.

Comencé a recoger algunos libros que no estaban bien colocados en su respectivo lugar y ya había terminado todo para poder irme a mi casa como todos todos los días después del trabajo.

Cogí mi bolso y salí.

Hacía algo de frío fuera, estábamos en octubre y el otoño comenzaba a sentirse.

Mi casa quedaba a unos...diez minutos andando, así que no tenía problema en caminar. A mitad de camino vi una sombra en un callejón y me asusté.

Comencé a caminar más rápido y cuando me di cuenta ya estaba corriendo por el miedo a que esa sombra fuera quizás un atracador o incluso un violador que quería hacerme algo.

Sentía pasos fuertes corriendo al igual que los mios y eso me asustaba más, sabia que me estaba siguiendo alguien y la verdad ya no sabía en que calle me encontraba.

Al ver esa sombra simplemente corrí sin rumbo y por lo que me estoy dando cuenta no voy dirección a mi casa.

Estaba perdida y con algo o alguien siguiéndome.

Me metí en un callejón para intentar esconderme y pasar desapercibida para que no lograra verme. Me encontraba detrás de un contenedor de basura no demasiado grande, pero para esconderme era suficiente.

Estaba oscuro pero pude diferenciar que una sombra de una persona estaba pasando lentamente junto delante del callejón.

Si hacía el más mínimo ruido notaría mi existencia y eso me daría por muerta.

La sombra se paró y comenzó a adentrarse en el callejón. Contuve la respiración y abracé mis piernas.

—Vaya,no sabía que había bellezas en los contenedores.—Dijo una voz rasposa.

Cerré los ojos con fuerza.

—Tranquila hermosura.—Se arrodilló a mi altura e intentó tocarme pero me arrastré hacia la pared.—Sh, no pasa nada ¿Quiéres venir conmigo?

Me agarró del brazo y me levantó. Intenté escapar pero me acorraló contra la pared. A estas alturas mis ojos ya estaban llenos de lágrimas.

—Si intentas huir, será peor para ambos.

Escuché unos pasos y vi que otra persona se acercaba. Seguro que viene a ayudar al que me está agarrando, este es el fin, estoy perdida.

No pude distinguir el rostro del segundo individuo, pero me sorprendí cuando le lanzó un puñetazo al hombre que me mantenía apresada.

Le separó de mi y comenzó a propinarle patadas y golpes.

—Maldito crío.—Escupió el hombre.—Ya nos veremos las caras.

Y se fué ¡se fué!

Suspiré aliviada y me limpié las lágrimas.

—Hey ¿Estás bien?—Dijo el chico y se acercó a mi.

Me fijé en sus ojos,eran verdes y guau,nunca había visto unos ojos tan bonitos en mi vida.

—S-sí, gracias.

—Creía que no llegaría a tiempo, vi como se metía aquí después de ti.

—¿Lo viste?

—Iba de camino a casa, por cierto, soy Harry.—Sonrió.

—Wendy.—Le dije.

—Oye Wendy ¿Qué hacías sola en un callejón en medio de la noche? No es muy normal que digamos.

—He acabado de trabajar y tengo que volver andando.

—¿Puedo acompañarte?

Le miré confundida, acaba de conocerme ¿Y quiere acompañarme a casa?

—De...acuerdo.

Salimos del callejón y comenzamos a caminar.

—Y dime, Wendy ¿Dónde trabajas?

—En la biblioteca municipal.

—¿En serio?—Dijo aguantando una carcajada.

—Si vas a burlarte será mejor que camines solo.

—Lo siento, es solo que...no es muy común.

—¿Y eso me hace tan rara como para que te rías de mi?

—Eh, yo no he dicho eso, solo es...diferente y supongo que te hace interesante.

—Genial, ¿Me acosarás por ello?

—Yo no diría acosar, sino seguirte y vigilarte.—río. Valla, incluso parecía majo.

—¿Cuántos años tienes?

—Diecinueve, ¿Y tú?

—Veintiuno.

—Demasiado mayor para mi, no me hables.—Aceleré el paso.

—¡Oye!—Harry caminó hasta llegar de nuevo a mi lado.

—Sólo bromeaba.

—Creo que tienes demasiada confianza, eso no es bueno.

—Soy una persona sociable.

—Lo he notado.

Cuando llegamos a la puerta de mi edificio Harry se acercó a mi, tanto que pensé que incluso me besaría, por lo que me alarmé sin saber que hacer.

Cuando estaba apunto de alejarme y entrar en el portal rápidamente, siento sus brazos rodear mi cuerpo.

¡Me estaba dando un abarzo! O por dios y yo que pensé que era un completo descarado que me iba a besar...

—Buenas noches Wendy.— depósito un beso en mi mejilla y en un abrir y cerrar de ojos ya se había mezclado entre la oscuridad de la noche dejándome allí, sola y confusa.

¿Por qué ahora sentía la necesidad de que tenía que haberlo besado? ¡Era un completo desconocido!

Dejando esos estúpidos pensamientos de lado entre de una vez al portal para subir al quinto piso donde se encontraba mi apartamento.

Al llegar al rellano del piso un escalofrío recorrió mi cuerpo y cada vez que me acercaba a la puerta era más intenso que el segundo anterior.

La puerta del apartamento estaba entreabierta y eso puedo decir que me asustó, demasiado.

—¿Hay alguien ahí?—pregunté acojonada mientras abría la puerta lentamente.

—Antes pudiste escapar, pero ahora no hay nadie que pueda salvarte.—se oyó una voz desde el interior del apartamento.

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Hola!
Esta es la primera historia que escribimos juntas y no sabemos que tal se nos da pero espero que os haya gustado!

Att: Lucía✅

Hey!
Bueno creo que la historia puede quedar bastante bien a mi parecer, bueno espero que os guste y no dudéis en votar o comentar.
PD: si quereis poner en comentarios lo que os gustaría que pasara en el proximo capi no dudeis n hacerlo.
Un beso.

Att: Lore✅