Maniac |H.S|

34.

Punto de vista de Wendy.

Sonreí por sus palabras y acaricié su mano con mi pulgar.

—Lo importante ahora es que estás bien.—Le dije.

—Pero, ¿Tú lo estás?—Dijo con una ceja arqueada.

—Sí, claro.

—Wen no me mientas, por favor.

Me mordí el labio nerviosa.

—No creo que este sea el mejor lugar para hablar de ello.—Digo finalmente.

Finalmente sopló con fuerza cansado y dejo el tema de lado, cosa que agradecí. No me sentía para nada bien al hablar de ello, me sentía sucia. Un hombre ajeno a mi circulo social y desconocido para mí, casi me viola. Eso me ha dejado una huella que es probable que nunca llegue a olvidar.

—¿Wen?—Dijo Harry sacándome de mis pensamientos y le miré.—¿Estás bien princesa?

Asentí con la cabeza repetidas veces y él alzó una ceja.

—Estoy bien.—Dije finalmente.

—¿Seguro? Sabes que puedes contarme lo que sea...

—Estoy bien Harry.—Le interrumpí.—De verdad.—Sonrío haciendo que él tambien lo haga.

—No tienes ni idea de lo feliz que estoy de que estés bien, no sé que habría hecho de no llegar a tiempo.—Dijo acariciando mi mejilla.

El sonido de la puerta abriéndose nos interrumpió y mi cabeza se giró hacia ella.

—Señorita, tenemos que hacerle unas pruebas al señor Styles ¿le importaría  salir de la habitación por unos minutos?—Dijo una enfermera y yo asentí.

—Suerte.—Le susurré a Harry y le di un beso en la mejilla antes de salir de la habitación.

Salí de la habitación con la intención de ir hacía la cafetería del hospital, necesitaba algo para mantenerme despierta, quizás un café, o dos incluso. Cuando estaba yendo hacía el ascensor pasé por una sala que tenía la puerta abierta, no sé porque, pero algo me dijo que mirara que había dentro.

Era una sala con una camilla, no como las normales, sino que esta era para hacer observaciones, una mesa de consulta justo enfrente y una pequeña pantalla al otro lado, justo encima de algunos aparatos.

Justo cuando estaba apunto de marcharme una puerta que estaba dentro de la sala se abrió y salió de ella una chica no demasiado joven hablando al parecer con alguien al otro lado de la puerta.

—¿Disculpe quién es usted?— me preguntó la doctora.—¿Viene a hacerse la prueba de embarazo también?

Iba a contestar, enserio que esa era mi intención pero al verla salir del otro lado de la puerta y saber que eso era una consulta para las embarazadas me quede muda, no podía hablar palabra. Ella se acercó a mi pero aunque quisiera no podía retroceder, mi cuerpo no se movía, así que me quede parada en mi lugar esperando a que ella llegara hasta mi.

—Hola Wendy.— habló con voz normal como si no se acordará de la última vez.

—¿Qué haces aquí?— pregunté impaciente sin saludarla.

—Estoy embarazada.— contestó bajito, incluso asustada ¿Será de él?—Sí, es de Harry.— respondió a mi pregunta con la cabeza agachada mientras se metía un mechón de pelo detrás de la oreja.

—¿Cuándo?—fue lo único que pude decir.

—Tres semanas.

No aguanté más, salí corriendo de allí. Desde luego ese viaje a la cafetería se había cancelado, necesitaba respirar aire puro. Cuando atravesé las puertas de la salida del hospital lo primero que hice fue tirarme al suelo de rodillas entre la lluvia.

Harry iba a tener un hijo con Cory.

Cerré los ojos para no llorar, y tras varias respiraciones profundas, conseguí que mi pulso volviera a la normalidad.

—Señorita, ¿Está usted bien?— sentí un leve toque en mi hombro y de repente el agua ya no caía sobre mi, me estaba tapando con su paraguas.

—Gracias, sí no hay ningún problema.— le di una sonrisa algo forzada mientras él me ayudaba a levantarme del suelo y llevarme de nuevo hacía dentro.

¿Qué se supone que tenía que hacer yo ahora? Hace tres semanas es más o menos cuando yo conocí a Harry, no le puedo recriminar nada si él aún no estaba conmigo. Pero lo que sí puedo y debo hacer es dejarle libre para que forme una familia con su nuevo hijo, como debe ser.

El chico que me había ayudado, después de asegurarse de que estaba completamente bien se marchó de nuevo y yo tras unos largos minutos pensando en que iba a decir subí de nuevo a la habitación de Harry dispuesta a hablar con él.

Al llegar frente a la puerta cogí una inspiración profunda y giré la manilla.

—Cariño tardaste mucho, pensé que me habías dejado solo.— se rió por su propio comentario, pero enseguida se cortó al ver mi cara.— Joder cariño no me asustes ¿estás bien?

—Tenemos que hablar.— intenté sonreír para que la situación no fuera tan preocupante.

—Mierda, esa frase nunca me ha gustado. No sé si hice algo mal pero de todos modos lo siento.—era tan tierno que incluso me reí por su comentario, iba a echar esto mucho de menos.

—Harry... lo siento no quiero romper una familia, centrate solo en ella ¿sí? esto entré nosotros quedará como un bonito recuerdo.—una pequeña lágrima rodó por mi mejilla y instintivamente la limpié.

—¿¡De que cojones estás hablando Wen!? ¿Me estás dejando? ¿Por qué? Puedo cambiar, seré un novio mejor lo prometo no me dejes por favor.—hablaba mientras sus ojos comenzaban a ponerse vidriosos.

—Lo siento, solo quiero que sepas que te quiero mucho. Me hubiera gustado que las cosas no fueran así.— me acerqué a él para darle un último beso, que disfruté como si fuera el primero.

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Heyyyyyyyyy

Buf buf buf, este capítulo es intenso.
Cory es una €&%# :)
Bueno pues yo sigo siendo #TeamHardy
Nos vemos el proximo domingoo.

Att: Luci✅

Holiiii

El final de este capi ha sido algo triste ¿Creéis que lo podrán arreglar? Definitivamente Cory me cae fatal ¿Se irá Harry con ella? Bueno chicas, un besote y nos vemos el próximo domingo :)

Att: Lore ✅