CAPÍTULO XXXV

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PARTE 2

POV CAROLINE

Al llegar a casa voy directo a mi cuarto, necesito una ducha. Necesito aclarar mis pensamientos y revivir un poco del alcohol en mi cuerpo. El agua fría se siente tan bien sobre mi cuerpo. Mi dolor de cabeza disminuye ¿Por qué tuve que tomar de esta manera? Oh ya recuerdo, no quería pensar en Klaus, ni Damon con esa chica. Que aunque me picara la curiosidad por saber quién es. Agradezco que no lo haya dicho, hubiera arruinado el pequeño momento entre nosotros, ese que me hizo darme cuenta de cuanto lo extraño. ¡Dios! ¡Esto es tan difícil!

Luego de ponerme algo de ropa cómoda me dejo caer sobre el colchón de mi cama con la cabeza enterrada en la almohada. Mi mente va a Damon, ¿estará en estos momentos con esa chica? ¿Serán pareja? ¿Amantes, tal vez? Pero si fuera así, ¿no habría venido a verme? ¿o sí? ¡Joder! Estoy volviéndome loca.

Me acomodo boca arriba sobre la cama tomando las sabanas en mis manos para cubrirme. No dejo de pensar en Damon, ¿Por qué todo tuvo que acabar así? ¿Estuve mal en no darle una oportunidad antes? ¡Dios mio! Estoy tan confundida. Pienso en Klaus y lo maldigo internamente. Si él estuviera aquí nada de esto estuviera pasando por mi mente. Estaríamos felices viviendo nuestro amor. ¿Pero dónde rayos esta? ¿Qué demonios sigue haciendo en Seattle?. Para ahí Caroline, me reprendo. ¿Lo estoy culpando? ¿Lo culpo por tener sentimientos por Damon? No esto es mi culpa, nunca debí dejar que mis sentimientos por el crecieran, debí acabar con ellos en cuanto comencé a sentirlos. ¿Pero cómo saber cuándo fue? Apenas acabo de aceptarlo hace unos meses, puesto que era tan ciega para darme cuenta. Y en realidad es algo que no pude evitar, la manera en que él se preocupaba por mí, como siempre ha demostrado su amor por mí, a pesar de todo. A pesar de las mil veces que lo rechace por Klaus. ¿Pero quién manda en el corazón?.

Tomo mi celular entre mis manos sin pensar muy bien en lo que estoy por hacer. No quiero pensar en lo correcto o en lo incorrecto. ¿Por qué, que mierda importa?. Busco el contacto y me quedo mirando la pantalla un momento, basta de darle vueltas al asunto, hazlo, dice aquella vocecita en mi interior. Pico el icono amarillo del mensaje y comienzo a teclear con rapidez para enviarlo antes de arrepentirme.

"¿Tendrás tiempo para almorzar conmigo mañana? -Caroline"

Veo por un momento más en nombre del contacto. Damon Salvatore. No pienso más y pulso enviar. Me escondo bajo las sabanas tapando hasta mi cabeza, sintiendo tan patética. ¡Ay dios mío! ¿Y si no me contesta? O peor aún ¿me dice que no? Tonta, tonta, tonta, Caroline. Pienso negando con la cabeza. El timbrado de mi celular a mi lado me sobresalta. Desbloqueo la pantalla con los dedos temblorosos.

"Supongo que la empresa puede estar bien sin mí un rato... ¿te veo ahí a las 9:30 a. m? -Damon Salvatore"

Una sonrisa se forma en mi rostro. ¡Acepto! Suelto un suspiro, todavía hay esperanza para que arreglemos las cosas. Espero un momento para responderle.

"Está bien, gracias....te veo mañana. Que descanses -Caroline"

No tarda mucho en responder.

"Igualmente, hasta mañana - Damon Salvatore"

Me quedo mirando su último mensaje por un buen rato hasta que la pantalla se oscurece. Estoy nerviosa, y ni si quiera ser porque, es solo un almuerzo. Platicaremos un buen rato, comeremos, tal vez incluso reiremos y espero que para el final de eso las cosas entre nosotros puedan comenzar arreglarse. ¿Qué puedo perder al decirle que lo extraño y que quiero que nuestra situación mejore? Nada, absolutamente nada.

Después de programar la alarma pongo el celular sobre el buro y apago la lámpara, preparándome para dormir. Abrazo una de las almohadas recargando ahí mi cabeza. Mis ojos van cerrándose poco a poco, mientras mi mente crea diferentes escenarios sobre lo que puedo ocurrir mañana en ese almuerzo, hasta quedarme completamente dormida.

The Sound Of Your Hearbeat(Pausada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora