*Narra Samuel*
Horas después llegamos a casa, decidimos tumbarnos en la cama abrazados, era gracioso como los sacos de ambos estaban encima de la mesa de noche y las corbatas en el suelo.. Muy poco nos importó el orden de la casa con el cansancio que teníamos encima, tanto, que minutos después de tumbarnos nos dormimos, abrazados.
Me desperté a las 8:00 PM con el ruido de una notificación de mi celular, abrí mis ojos como pude y observe el nombre de mi tío en aquel mensaje: "Samuel, ven rápido al trabajo, luego te explico".
Suspire exageradamente de mala gana pero luego me di vuelta y observé a Guillermo dormir, me parecía la persona mas tiernas del mundo cuando dormía, !Mierda¡, No podìa estar tan enamorado, realmente no quería irme, pero.. Es la primera vez que mi tío me pide que vaya temprano al trabajo, por lo que debe ser importante.
Acerqué mi cabeza a su oreja y susurré su nombre repetidas veces intentando despertarlo, cuando abrió sus ojos me miró confundido.
- Tengo que ir a trabajar -. Expliquè mientras me levantaba de la cama mientras me dirigía a cambiarme la ropa.
- ¿Ya es tan tarde? -. Preguntó mirando la alarma a su lado.
- No, me pidió ir temprano -. Aclarè mientras me colocaba los zapatos.
- Oh, yo voy a seguir durmiendo.. -. Luego de eso bostezó fuertemente y se giró en la cama.
- Eres un vago -. Me acerqué a él y le di un beso corto mientras me iba.
- Es fin de semana, en fin, cuidate -. Se defendió mientras cerraba los ojos.
Con ello, recojì mi mochila y me fui del departamento.
Mientras camina hacia el trabajo pensaba un poso sobre todo lo que estaba ocurriendo entre Guillermo y yo, la felicidad, los momentos románticos y pasionales que sentíamos, en realidad pensaba que esta podía ser.. No se.. ¿"El amor de mi vida"?.. Se que es muy esrupido pensar en esto pero.. A veces me pongo a pensar.. ¿Que nos podría separar?.. Y mi mente se pone en blanco, ninguna respuesta llega..
Entre al lugar con una sonrisa, como si no me importara nada, solo quería volver a casa, me parecía extraño que no haya nadie en la recepción por lo que decidí ir a la oficina de mi tío, donde en efecto, estaba.
Me sorprendió la mueca de mi tío al verme era como de una felicidad extrema, cuando me acerqué a el me abrazó y comenzó a reirse sin razón alguna, estaba realmente confundido..
- ¿Que te ocurre? -. Pregunte bastante desconcertado mientras recibía ese abrazo.
- !Samuel¡, Hay una mujer que pagó un dineral bastante grande para tener una sesión contigo cuando le dijimos que no estabas disponible, prometió triplicar el precio normal de la sesión con tenerte lo antes posible-. Explicó emocionado mientras nos separábamos.
¿Que mujer pagaría tanto dinero con tal de tener unas simples relaciones conmigo?.. Mi mente poco a poco comenzaba a lanzar nombres intentando encontrar alguno que concuerde pero no tenía sentido..
- ¿Donde esta ella? -. Pregunté entuciasmado, quería saber quien era.. Quizás simplemente era una vieja adinerada que se había enamorado de este cuerpo.. Que muy difícil no es.. Me reí en mis adentros..
- La traeré -. Luego de eso se retiró bastante rápido quedándome solo en aquella oficina llena de papeles y olor a cigarrillo.
Me quede en esa oficina con la intriga comiendome por dentro, pero, en realidad, ¿A quien le importa?, seguro será una mujer cualquiera que se enloqueció con mi cara y tendré que darle placer al final así que.. No me emocionare demasiado.
Intentando desconcentearme me di vuelta y jugué un poco con los archivos hasta que.. Pensé que una alucinación había llegado a mi cabeza, o que mi mente me había jugando una mala pasada nostálgica, pero.. Esa voz había llegado a mi cerebro bloqueándolo por completo, no quería darme vuelta luego de escuchar a esa persona decir mi nombre.. Pero lo hice.
Cuando me di vuelta mi boca se entreabrió y mi ojos se cristalizaron, sentía que me había bloqueado por completo, no podía creer que mi ojos estaban viendo sus piernas largas y finas calzando esos tacones como solo ella sabía, levante mi vista un poco para pasar rápidamente por sus senos para no caer en la vulgaridad y la simplicidad mas ordinaria, me quede en su cuello que alguna vez quise llenar de mis besos, y luego fui a su cara.. Esos ojos eran como arrancados de los estrellas y sus labios rojos encendían la pasión de aquellos días, oh si, era ella definitivamente.. Era Jessica, Alguna vez.. El amor de mi vida que me hizo caer en esa obsesión dañina, que me hizo caer en esta mierda de vida, que me hizo tener problemas psicológicos y Sentimentales.. Era ella.. Jessica.
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¿Pornografìa? ➖ Wigetta
DiversosGuillermo era un hombre que nunca tuvo suerte con las mujeres, Y Tampoco tuvo suerte con el dinero, por eso es que vive en una renta con muy malas pintas, Sus amigos son de lo peor, Y ni hablar de que no tiene trabajo, Pero un día conoce a Samuel, U...