La historia cuenta que una mujer apareció en el hospital cedro senai en nada mas que un vestido cubierto de sangre. Esto no debería ser demasiado sorprendente, la gente a menudo tiene accidentes cerca y viene al hospital mas cercano para la asistencia medica. Pero había dos cosas que causaron en la gente ganas de vomitar y escapar de terror. El primero, era que ella no era exactamente humano. Era mas parecido a un maniquí, pero tenia la destreza y la fluidez de un ser humano común. Su rostro, era tan impecable como el de los maniquíes, sin cejas ni maquillaje. La segunda razón, por la cual las personas necesitaban salir de hay corriendo, era porque en su boca yacía un gato, apretado tan fuertemente en medio de sus dientes, que estos no se podían ver a través del animal, la sangre chorreaba a montones sobre su vestido y el piso. Ella entonces, ante la vista de todos, abandono al gato, y acto seguido se dejo caer en el suelo.
A partir de ese momento ella fue tomada en el hospital, y fue limpiada,antes de ser preparada para la sedacion. Ella se mostraba completamente impasible, inexpresiva e inmóvil. Los doctores habían pensado mejor refrenarla hasta que las autoridades llegaran, y ella no puso objeción, ellos eran incapaces de obtener cualquier respuesta proveniente de ella, y la mayoría de los doctores se sentían demasiado incómodos como para mirarle directamente a la cara por mas de dos segundos seguidos, ella no se movía. Pero cuando los doctores intentaron darle un calmante, ella se defendió con fuerza extrema. Dos miembros de los que la sostenía con su cuerpo, quedaron flotando en el aire, mientras el rostro de la muñeca continuaba inmutable. Volteo sus ojos, con su rostro inamovible de aquella expresión vacía hacia el doctor que la estaba mirando asustado e hizo algo insólito. Ella rió. En cuanto lo hizo, la enfermera grito de terror y se desmayo por el shock, porque el la boca de la mujer no había dientes humanos, tan solo puntiagudos y afilados puntos.
El Doctor la miro fijamente con cara de asco y terror antes de preguntarle "¿que es usted?" ella se libero de los doctores que aun la sostenían espantados aun sonriendo. La seguridad había sido alertada y se les podía escuchar bajando por el vestíbulo. cuando ella los escucho se abalanzo hacia donde estaba el doctor y le arranco la yugular en un baño de sangre después lo soltó dejándolo morir en el suelo... Sobre el piso el doctor moría lentamente ahogado en su propia sangre. Ella levanto la mirada, una mirada fría y peligrosa, que hacia que todos se espantaran con un escalofrió. Se inclino hasta llegar al oído del doctor moribundo y le susurro suave al oído "yo, soy Dios." Los doctores al rededor estaban aterrados, ella, tranquilamente salio del cuarto, y saludo a la seguridad que había llegado al cuarto con su rostro sin vida cubierto de sangre mientras se alejaba aun riendo. La enfermera sobreviviente, que cayo en shock, la llamo "El inexpresivo" y jamas se volvió a saber de ella.
Se dice que todo el que mira sus dientes, se convierte en su bocadillo.
La enfermera que sobrevivió el incidente la llamó "el Inexpresivo" y nunca más se supo de ella.