Fire And Ice-Derek Y Tu

Recuerdo De La Noche En Lo Que Todo Comenzó

Recuerdo esa noche como si hubiera sucedido ayer. En casa se podía palpar el nerviosismo dado que Gerard vendría a visitarnos por lo que él llamaría inconvenientes, esos inconvenientes era la gran creciente de manadas en la zona donde vivíamos.

-Buenas noches-dijo entrando Gerard con su aura de poder a la casa.

-Gerard-dijo mi madre a modo de saludo dándole un beso en cada mejilla.

-Dante-le dijo Gerard a mi padre abrazándolo estilo saludo de la mafia-que grande que estas-dijo ahora caminando hacia mi con los brazos abiertos, fingido una sonrisa lo abracé-pronto deberás conocer a tu prometido Luna.

El rostro de mi padre era una obra de arte. No le gustaba para nada la idea de Gerard de buscarme un prometido.

-No todavía es pequeña-le dijo mi madre con una sonrisa mientras me abrazaba por los hombros-porque no pasamos a la mesa, prepare una comida que de seguro te encantará.

La cena era rica, pero se sentía una gran incomodidad. Mis padres se daban miradas cómplices. Presentía que algo malo iba a pasar, el rostro de mis padres me lo decía, ellos sabían algo que yo no.

-Dime Luna-dijo Gerard limpiándose la boca con una servilleta, yo mire mi plato de comida, no tenía mucha hambre-¿cuál es tu opinión sobre las manadas que están aumentando en Roseecup?

-Mis padres se encargaran de ellos-le conteste jugando con mi plato.

-Mírame cuando me respondas jovencita-me dijo Gerard molesto, yo subí mi mirada y lo mire a los ojos con la mirada más aburrida que tenia.

-Nada de la mierda de cazadores me interesa-le dije dejando mi cubierto en la mesa.

-Gerard-dijo mi padre pidiéndole que no arme un alboroto-ella es simplemente una adolescente y todavía no piensa en estas cosas.

-Sabes Dante-dijo Gerard parándose y mirando su celular-sé lo que está pasando en Roseecup y sé que ustedes están ayudando a las manadas... ustedes están rompiendo el código.

Sentí que la puerta era tirada, mi madre gritó ocasionando que yo también gritaba. Comenzaron a entrar cazadores con armas apuntando a mis padres. Sentí un cañón apoyarse en mi nuca.

-Hola luna-me dijo la voz de Kate por detrás, ella sostenía el arma en mi cabeza. Mis padres cuando vieron eso dejaron de luchar y se dejaron esposar.

-Cumplirán el castigo de haber roto el código de honor perteneciente a nuestra familia-dijo Gerard, miraba a mi alrededor en busca de ayuda, se encontraba mi tío Chris y su esposa, pero no hacían nada, nadie hacía nada, todos miraban como si fuera un espectáculo. Lagrimas comenzaban a caer por mis mejillas.

-No-grite llorando, mi madre me miro con lastima, por sus ojos caían lágrimas también. Mi padre sostenía la mano de mi madre y se mostraba fuerte-No, no se los lleven-comencé a gritar cuando comenzaban a llevarlos hacia fuera.

Me subieron a la fuerza en una camioneta y nos guiaron al bosque que había en Roseecup. Kate mantenía su arma en mi cabeza, Chris me daba miradas de lástima pero no hacía nada.

-Esta será la historia que le contaras a la policía-me dijo Gerard con una cuchilla en mi cara-estaban dando un paseo por el bosque y vino un atracador-dijo comenzando a caminar hacia mis padres, yo limpiaba mis lágrimas-viste como tus padres le entregaron dinero y celulares... pero el ladrón igual los apuñaló matándolos-dijo esto él comenzó a acuchillarlos, un hombre o chico lo que fuera me agarró por la espalda y tapó mi boca evitando que gritara. Trataba de moverme pero no podía, sus cuerpos iban perdiendo la vida que llevaban dentro, tirados en la tierra con hojas secas y no podía hacer nada, no pude salvarlos.

Los siguientes días fui interrogada muchas veces por la policía y todos me miraban con lastima. En el entierro de ellos estaban todos los partícipes de su asesinato, recuerdo que yo decidí quedarme un poco más de tiempo sola en el cementerio y cumplieron al menos eso, me dejaron sola, algunos alfas aparecieron para presentar su respeto.

El chico que me había sostenido mientras mataban a mis padres se llamaba Luke, para mi mala suerte era el chico que Gerard me quería comprometer. Chris dijo que se haría cargo de mi y que nos mudaríamos a Beacon Hills.