Mis padres muertos, los mato Gerard Argent, si mi abuelo los mato porque se negaron a seguir con el código de la familia. Ahora me encuentro en una camioneta camino a Beacon Hills con mi tío y su loca esposa, a mi lado va su única hija Allison. Sé q...
"Lo que llamáis azar no existe. Hay una causa para todo efecto y todo efecto es la causa de otro efecto. El universo no es sino una gloriosa red de fenómenos causales."-Anónimo-.
-Lo siento –pidió Malia cuando Derek comenzaba a arrancar el auto.
-No tienes que disculparte –le hablo Derek dejando el auto quieto.
- Si no quieren ser encontrados, entonces no los vamos a encontrar –comente mirando por el retrovisor a Malia, a lo que ella me miro raro.
-Algunos hombres lobo tienen una habilidad –le conto Derek-, una especie de dominio sobre sus cuerpos que les permite reprimir su olor.
-¿Pueden esconderse de otros hombres lobo? –pregunto Malia colocándose entre medio de los dos.
-De cualquiera que los intente encontrar –conteste yo mirándolos.
-Por eso nadie sabía nada sobre Brett –dedujo Malia girando su cabeza de un lado al otro para poder mirarnos.
-Lo mismo que con Demarco –agrego Derek.
-Quizás tenemos que probar algo diferente –comento Malia captando nuestra atención-, quizás necesitamos pensar como Stiles.
-¿Cómo un tarado hiperactivo? –pregunte ganándome una mala miranda de su parte, pero una divertida de parte de Derek.
-Como un detective –me corrigió ella-, si realmente son budistas, a lo mejor en vez de preguntarnos donde se esconden los hombres lobo, deberíamos estar preguntando...
-Donde se esconderían los budistas –complete yo mirando a Derek.
-Cuando Buda se sentó bajo el árbol Bodhi, busco la iluminación hacia el este –comento Derek mirándonos.
-¿Hay algún tipo de orientación hacia el este en Beacon Hills? –pregunto Malia con su mirada en Derek.
-Si –contesto Derek-, en el puesto de observación –dicho eso abrí la puerta y los demás siguieron mi acción, emprenderíamos nuestro camino hacia el puesto de observación.
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Caminamos lo más rápido posible que pudimos en el bosque, hasta que llegamos al punto de observación, el cual parecía ser un acantilado.
-¿Malia? –pregunte al ver que ella me tomaba por la muñeca.
-¿No huelen eso? –pregunto mirando en alguna dirección.
-Espérenme aquí –dijo Derek acariciando mi brazo.
-No vas a ir solo –le dije agarrando su muñeca, tuvimos prácticamente una lucha de miradas y el tomo mi mano. Al final gane yo y terminamos yendo a revisar los dos tomados de las manos.
-Oh... Dios –casi que grite llevando mi mano a mi boca, no sé si para ocultar mi grito o para contener las ganas de vomitar que me provocaba la escena, supongo que toda la manada estaba muerta, pero estaban muertos de una forma rara salían alguna cosa viscosa de los ojos, nariz y oídos de las personas muertas en el suelo.
-¿Qué ha pasado? –pregunto Malia llegando a nuestro lado mirando la escena.
-Creo que podrían haber sido envenenados –comente viendo el sangrado que tenían, era como se ponía la sangre cuando trataba de curarse por envenenamiento.
-Eso es genial –comento Malia, pero no pude deducir si era sarcasmo o no por su tono de voz, esperaba que fuera sarcasmo y lo confirmo con lo que dijo a continuación-, si el asesino con armas no te atrapa, el del acónito lo hará o quizá uno sin boca, a lo mejor deberíamos huir todos de Beacon Hills, huir por nuestras vidas, tan pronto como podamos.
Nos estábamos yendo, pero sentimos unos ruidos y al darnos vuelta pude ver una mano levantada, rápidamente nos encaminamos hacia esa persona. No me crean mala persona, pero mi preocupación bajo cuando vi quien era, era la mercenaria.
Malia decidió ir a contarle la nueva noticia a Stiles y Scott caminando, con Derek nos dirigíamos al hospital con una inconsciente Braeden en el asiento trasero, hacia unos minutos comenzó a llover torrencialmente.
Cuando llegamos me baje y abrí la puerta a Derek para que la pudiera sacar, también abrí la puerta del hospital.
-Le han disparado –entre gritando hacia la madre de Scott que se encontraba en el recibidor-, creo que se está muriendo.
Si, habíamos dormido en el hospital esperando a que esa chica se despertara y nos contara todo lo que sabía, junto con lo que le había sucedido, estábamos haciendo una inversión en ella porque encontrara a Kate y se encontraba en una camilla.
-¿Por qué no vas al loft a descansar? –me recomendó Derek después de mi quinto bostezo.
-Quiero saber si ha sido Kate la que la dejo en esa camilla o si fue algún nuevo asesino a sueldo del que preocuparnos –le conteste reacomodándome en la silla y recostándome sobre su hombro, el paso su brazo a mi alrededor, permitiendo que me acomodara un poco más y sintiera calor.
Desde que había vuelto ser una simple humana estaba teniendo problemas con el control del calor corporal y prácticamente vivía temblando de frió, cosa que Derek ya había notado hace mucho tiempo, porque generalmente como ahora terminaba con su campera para tratar de conseguir algo de calor.
-¿Por qué siempre me entero de las cosas un poco tarde? –le pregunte fingiendo estar molesta a Derek mientras nos sentábamos con un café cada uno.
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-Con todo lo que ha estado pasando no pensé que fuera importante –comento Derek recibiendo una mala mirada de mi parte.
-¿No es importante? Derek tienes una prima, la cual es hija de Peter pobre chica y es Malia, la chica prácticamente salvaje –le reproche colocando mis manos alrededor del vaso para obtener su calor-. Claro que es importante.
