P.O.V. Brad
Mierda, por más vueltas que doy en esta comodisima cama que me debería ayudar a dormir, no consigo hacerlo. No dejo de pensar en qué debo hacer, qué sería lo correcto... Bueno, eso lo sé. Lo correcto sería entrar en esta universidad sin darle una sola vuelta más, vale. Pero eso implicaría renunciar a Emma, y no quiero hacer tal cosa. Joder, desearía no tener que irme ya a la universidad, desearía no tener que decidirme tan apresuradamente a hacer algo de lo que no estoy seguro. Encima, yo esperaba que ella reaccionase de otra manera cuando se enteró de que me habían aceptado. Sé que en parte se alegra por mí, porque no es egoísta para nada -egoista soy yo que la quiero sólo para mí-, pero vamos... Decirme que me venga a Florida sin pensarlo más... ¿No es extraño? Eso me deja pensando que... Igual no le importo tanto como yo creía, y que quiere utilizar esto como excusa para no tenerme en casa y para que ella no tenga que estar evitando hacer ciertas cosas... No. No, eso suena muy estupido. Estoy muy estresado ahora mismo y ya no sé ni lo que pienso ni digo, pero... No creo que... No no, claro que no. Me niego a volver a pensar eso. Es imposible. Además, por teléfono parecía echarme de menos, en mi opinión... Eso no se puede fingir. Y ella tampoco lo haría.
Me doy la vuelta en la cama, quedando boca abajo con las manos bajo la almohada y mi vista puesto en el estrellado y azul cielo de Florida.
¿Qué vamos a hacer, Brad..? ¿Qué opción será la correcta? No, a la mierda lo correcto. Hace demasiado que dejamos de hacer lo jodido correcto. Digamos mejor... La indicada.
Sin apenas darme cuenta, me encuentro pensando en lo triste que sonaba su voz por teléfono... En parte porque me echa de menos creo, pero... No sé, hay algo que le preocupa. Estaba rara. Fue como si se hubiera dado cuenta de algo y la poca felicidad que sentía al estar hablando conmigo se le desvaneciera de repente. Pero, ¿qué? ¿Qué será? ¿Le habrá pasado algo? No, no lo creo... Me lo hubiera dicho, o hubiera hecho algo al respecto, es muy inteligente, sabe cuidarse, así que no creo que nadie le haya molestado de ninguna forma. Espera, no estaba asustada así que esto no tiene mucho sentido. Lo que había en su voz era más... Había algo demasiado extraño... Era... Culpabilidad. Se sentía culpable por algo. Estoy segurisimo. Recuerdo cuando empezó el instituto, yo ya iba a segundo así que estaba acostumbrado a ese ambiente, pero en cambio ella... Ella estaba perdida en todos los sentidos. Cuando los primeros exámenes empezaron, yo estaba más o menos tranquilo porque ya sabía como debía estudiar, pero ella no. Decia que cada vez que abría los libros, sobretodo el de matemáticas, todo se le convertía en una sopa de letras, sólo veía números y más números -sonrío al recordar aquella escena, era tan pequeña...-, sin pensármelo, me ofrecí a ayudarla, y decidido, me ponía cada tarde con ella -antes de ponerme con mis propios deberes- durante una hora a repasar todo lo que había dado ese día y no había entendido, pero era -es- muy tozuda y por más que le explicaba... No le entraba en la cabeza -simplemente, las matemáticas no son lo suyo para nada-, así que al verla tan apurada... Se me ocurrió una única manera de ayudarla a aprobar el maldito examen; le hice una chuleta. Sabía perfectamente lo que le iba a caer en el examen, así que no tuve ningun problema... Al día siguiente hizo el examen y sacó un ocho, mamá no se lo podía creer, la llevó de compras, una tarde de chicas ya que sabiendo lo que le costaban las mates, haber sacado un ocho era algo realmente asombroso... Pasaron los días, y Emma, la exagerada, tozuda, y llena de ansiedad chica que me vuelve loco... Estuvo más o menos una semana comiendo demasiado mal. Y lo poco que comía le hacia daño al estómago, no me gustaba verla de aquella manera, así que por la noche, justo cuando pensaba en ir a hablar con ella, fue ella quien vino a mi cama, a tumbarse a mi lado. Decía que no quería dormir sola, pero yo sabía perfectamente lo que pasaba. Necesitaba hablar con alguien que supiese su 'secreto' y ese alguien era yo. Le pregunté que qué le pasaba -ya lo sabía, pero quería oirlo de ella para que lo echara fuera de una vez y volviera a ser la misma-, recuerdo exactamente las palabras que me dijo jugando nerviosa con sus dedos -algo que aún sigue haciendo-; Yo sólo quería que mamá estuviera orgullosa de mí, pero por algo que haya echo realmente yo. Todo ha sido tu culpa, eres una mala influencia para mí. No voy a volver a pedirte ayuda porque tu no sabes ayudar, sólo empeoras las cosas.
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No Me Olvides [1] +18 ✔︎
Romance📣 Primera parte de la trilogía. 📣 Contiene palabras mal sonantes, violencia y escenas de sexo explícito. 📣 Micromachismos, posesividad y celos como consecuencia de los problemas de confianza y abandono entre personajes. 📍 Portada hecha por: @...