Capítulo 35

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-¿Te parece bien hablar ahora, mamá? -le pregunta Brad al bajar ya vestido

-Claro, cielo -responde ella dando unas palmaditas en el sofá libre para que se siente él y este lo hace

-Bien, a ver... -se pasa una mano por el pelo. Está nervioso.

Mierda, Brad. No hagas eso, me excita. Dios, ¿porqué me excita cuando hace eso? Bueno, no es lo único que me pone "nerviosa", pero... Vale, Emma. Centremonos.

-En primer lugar... Quiero que sepas que yo no te puedo estar más agradecido por todo lo que llevas haciendo desde que me trajiste a esta casa -a mi madre le empiezan a brillar los ojos. Supongo que al recordar ese día.- de verdad, no lo voy a olvidar jamás. No voy a olvidar jamás todas las veces en las que me has ayudado y apoyado y...

-Hijo, no tienes que darme las gracias por nada. Es mi deber darte y ayudarte en todo lo que necesites -responde ella cogiendo su mano y él sonríe-, y voy a seguir apoyándote en cada decisión que tomes, así que tranquilo. Di lo que tengas que decir

-Me he echado hacia atrás en cuanto a la solicitud porque... -mira sus manos y suelta el aire despacio- mamá yo... Quiero quedarme aquí. Aquí está ni vida, y sí, sé que suena inmaduro y que tengo que volar por mi propia cuenta pero... Yo no me quiero ir de aqui, mientras pueda quedarme; lo haré. Y ahora mismo puedo, porque sabes de sobra que quieren tenerme en esta universidad, y la verdad... Es bastante buena. ¿Te das cuenta? Todo son ventajas. Estoy en casa, sin necesidad de irme de la ciudad, tengo la solicitud aceptada también...

-Hijo... Escuchame, sé que quieres quedarte, sé que te quieren en esta universidad... Pero... ¿Realmente porqué te quieres quedar? ¿Solo porque aquí tienes tus amigos? No me parece muy...

-Mamá, puede que haya algo más, pero... Todo a su tiempo, ¿de acuerdo? -mi corazón se acelera y me incorporo un poco nerviosa

-¿Es algo malo? -él sonríe, no me mira directamente a la cara. Sí no que mira mis manos, que ahora han empezado una guerra los dedos de una contra los de la otra.

-No, que va. No es nada malo, te lo aseguro

Ella respira hondo.

-Entonces... -se encoge de hombros- ¿te quedarás y estudiarás aquí?

-¿Te parece bien?

-Si te digo la verdad, me parecía mucho mejor que estudiaras en la universidad de tus sueños, pero...

-De tus sueños, es mucho decir. Es una universidad, no es algo de lo que dependa mi vida

-Lo sé, y lo entiendo -responde ella asintiendo- ¿estás seguro de lo que haces?

-Completamente -responde él

-Pues por mí no hay problema, eres libre para decidir

-Y lo he hecho

-Entonces no hay más que hablar -responde mi madre- ¿ni siquiera esto te alegra la noche? -pregunta ella mirándome

-¿Qué? Sí, mucho -respondo con una falsa sonrisa

-¿Te pasa algo, cielo?

-No, mamá. Nada

-Pero que mal mientes... -dice él acercándose y poniendo su mano sobre las mías para que estas dejen de moverse- anda, dime

-Tengo algunas dudas -digo finalmente y él alza las cejas- ¿porqué tuviste que quedarte un día más?

-Tenia que hacer otra entrevista, con otra gente -se encoge de hombros tan tranquilo

No Me Olvides [1] +18 ✔︎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora