Harry enganchó su brazo con el mío, estaba caminando a mi paso aunque ya estábamos tarde para la escuela, su cara lo decía todo, estaba cansado.
—¿Has notado algún cambio extraño en Kendall? —sus palabras crearon vaho
—¿Extraño?, no.
—¿Es más amable contigo?, ¿te manda mensajes y eso?
—Él solo me envía mensajes cuando quiere quedar, y por supuesto que no es amable, es más, últimamente ha estado siendo más molesto de lo usual, ¿está haciendo todas esas cosas contigo?
—Si. Sigue igual de serio y crecido pero ahora es... Más dulce. —se sacudió— Y estoy un poco asustado, si está comenzando a ser dulce es porque probablemente un demonio esta comiéndose sus neuronas y su estómago, está planeando algo macabro. —me reí
—¿No crees que eso es un poco tonto?, tal vez solo quiere ser amable.
—¡Cuando!, él ha sido amable como nunca, quiero decir, ha pasado más de la mitad de su vida siendo un perro egocéntrico, ¿por qué de repente está siendo dulce?, ¡es que no te inquieta como a mí!
—Tal vez solo está en esa etapa del amor, ya sabes, a lo mejor hay alguna chica que le guste y ahora lo único que hace es derramar miel.
La expresión de Harry cambio por completo.
—¿Tú crees?, ¿y quién podría ser?
Me encogí de hombros.
—Puede ser cualquiera.
Cuando llegamos a las clases lo hicimos con media hora de retraso, Kendall aún no había llegado y no sabíamos si se presentaría, Harry había estado demasiado servicial y tierno, aunque siempre era así era un tanto extraño que lo fuera a ese extremo conmigo.
Ese día Kendall faltó. Y ninguno de los dos sabía porqué. Yo no era el de los textos, ese era él y el de las llamadas siempre había sido Harry, pero estaba retorciéndose en su asiento.
—¡Puedes llamarlo tu!, ¡por el amor de Dios Liam!, no esperes que todo lo haga yo.
—Seguramente mañana vendrá, tal vez le dio flojera moverse de la cama.
—Bueno, si.
—¿Nos vemos mañana?
—Claro, adiós Liam. —levante la mano y caminé. Saqué mi reproductor de música y me coloqué los audífonos, había dejado a Harry justo frente a su casa así que caminaría hasta la mía de regreso.
Todo iba de maravilla hasta que vi a Zayn y a su compañero bajo un árbol casi seco, ambos estaban fumando, traté de no verlos, no demasiado al menos, pero la posición en la que estaban hacía que mi mente se echara a volar, y por alguna extraña razón, mi estomago arder.
Zayn estaba recargado en el tronco del árbol, su compañero estaba bastante cerca de él y parecía que estaban hablando, estaba apoyando su mano en el tronco sobre el hombro de Zayn a un lado de su cara y ninguno parecía estar incomodo.
Ambos llevaban gorros, pero Zayn siempre tendía a cubrir por completo su cabello, mientras que al otro chico se le podía ver el copete en la frente, castaño.
Pasé frente a ellos con la cabeza abajo, hundiéndome en mi música y en mis pensamientos, hasta que llegue a casa.
Estaba dejando los audífonos sobre el escritorio cuando la ventana de en frente se abrió con brusquedad, era una mujer, parecía grande pero no mucho mayor, su cabello era negro y tenía un muy buen depilado de cejas, ella me miró después de mirar abajo con enojo, me quedé paralizado.
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¿Nosotros no?
Fanfiction"Lo vi, su silueta se alineaba perfectamente contra la luz de la luna, sus brazos se movían sobre el suelo de la azotea, su beani cubría cualquier mechón de cabello que pudiera salir, era tan distinto a Niall, era una persona fría y de la noche, era...