XXI

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Después de unas semanas solo. Solo por mis amigos en una relación y por compañeros apurados en salvar una nota. Tuve vacaciones. Las peores, la primera semana siquiera salí de mi cuarto. Mi madre seguía tomando turnos extras para tener una excusa y no volver temprano. De repente me sentía como de 10 años otra vez. Cuando despertaba lo primero que veía al bajar a la sala eran billetes sobre la mesa y una nota que después de todo no leía, la hacía bola y la tiraba.

Había veces que salía los sábados y jugaba un poco con Charlie y los del equipo, pero realmente aún no me sentía preparado para volver. Ya ni siquiera sabía qué rayos hacer conmigo mismo. Apostaría un montón de dinero por saber qué es lo que harían los adolescentes normales con dinero y sin una persona adulta en casa, algo que no fuera comprar comida empaquetada y quedarse comiendo los años de juventud frente a una laptop y coca.

Podía visualizar bajo mis ojos bolsas bajo mis bolsas, y ahora también era mitad panda.

Había veces en que me quedaba solo y enterraba mi cabeza en mi almohada hasta que no podía respirar, hasta que la última gota salía de mis ojos y después... Después me veía en el espejo y me maldecía por un montón de cosas en el pasado.

Cuánto daría por tener a Niall justo ahora y justo aquí. Él hubiera sabido qué hacer. Pero definitivamente su cuerpo estaba más tieso y seguramente él solo me mandaría al demonio: "¡déjame descansar maldito idiota!"

—Que terrible... Mírate nada más, estás perdido. Y lastimosamente no hay nadie para encontrarte, ¿verdad?, tu amigo muerto y la relación de tus únicos amigos vivos. Tu cabeza... No puedes ni decidir si entrar a algo que seguramente te haría la vida más fácil. Pero tú simplemente no puedes.

Me quejé.
—Cállate.

—Solo me gustaría saber, Liam, ¿por qué tu cabeza está lentamente complicándose más y más?

—Tu sabes muy bien que detesto mucho tu tono de sábelo todo filosofo de... Así que ya no quiero escucharte más hablar de esa manera, al menos conmigo.

—Yo he visto cuanto tiempo estás aquí adentro, en lugar de salir con tus amigos o llamar o ir de compras. Nada de eso, y honestamente, ¿tú sigues viviendo?

—Pues no, dudo mucho que esto que estoy haciendo sea vivir. Estoy hablando con ellos, pero quiero un pequeño momento para entablar una conversación con este hámster como mente. Y ni yo ni él nos vamos a entender por más que queramos.

—¿Ah sí? ¿Y por qué?

—Porque uno de nosotros no es humano.

—No puedes seguir esperando por alguien para salvarte, es mas, no sabrías lo que yo pagaría por verte convertirte en tu propio salvador. —dijo– Cualquiera que intente sacarte de esto ahora, solo será un héroe por fuera, porque por dentro te estará haciendo más daño. Te estará enseñando a ser un dependiente y no hay nada peor que eso.

Nos quedamos mirando mientras un revoltijo de sensaciones se estaban acumulando en mi estomago.

Pues no puedo hacerlo. —dije— No puedo ser ni siquiera la mitad de lo que pagarías por ver, así que quédate con el dinero y ve a invertirlo en ti, ¿acaso no crees que sería bueno arreglar tu problema de insensibilidad?, antes de tratar darle lecciones a alguien aprende a seguirlas tú mismo. No necesito de tus consejos estúpidos. Como si fuera tan fácil.

—Estas hablando como un completo idiota. —respondió de inmediato

—¿Y qué si lo soy, Zayn? De todas formas es lo que has estado viendo todo este tiempo, a un chico idiota. Y yo lo creo, fue muy idiota de mi parte asociarte a alguien tan puro como Niall, ahora mismo no eres nada a su lado. Eso me convierte en el ganador, en el rey de los idiotas por siquiera haberte escuchado todo este tiempo. De tu boca solo salen palabras. No eres ni la mitad de lo que hablas. —y sabía que ahí tenía que parar, que, de hecho, ya había cruzado una línea bastante delgada, pero ahora mismo lo que fuera que estuviera frente a mí, vivo, merecía ser el bote de descarga de todos mis problemas.— Solo eres una copia barata.

Me quedó viendo, con los ojos abiertos y un destello que, justo en ese momento, no descifré. Entró a su habitación y al salir Zayn esta vez ni siquiera me miró, solo saltó por la ventana, con la mochila en la espalda, mi corazón había comenzado a latir demasiado rápido, lo había llevado todo al infierno.

Me asomé solo para verlo correr hacia el final del pequeño callejón, con el cabello desordenado y las mangas de su suéter sin doblar, no estaba mostrando ningún tatuaje, llevaba un beani azul en la mano, que antes de desaparecer de mi vista, se colocó por sobre su negro cabello.

No podíamos estar juntos de todas maneras, éramos totalmente opuestos, en serio, no había encontrado a alguien tan diferente a mí hasta que se mudó, nosotros simplemente no podíamos funcionar.  Y tal vez era eso lo que más me molestaba, tal vez era eso lo que me hacía hablar cada vez que se acercaba. Lo quería, y me alegraba que ya no estuviera ligado con Niall, pero ahora lo quería a él. Y por supuesto él a mí no.

Y yo no era lo mejor para él. Estaba hundido. Era como estar muerto.

Regresé la vista a la pantalla de mi laptop, observando la conversación desde la ventana, caminé de nuevo a mi cama solo para tomarla y releer el mensaje de Kendall.

"¿entonces de verdad no están teniendo algo? porque Harry está pensando cosas y la verdad yo también"

Teclee lo más rápido que pude.

"Qué, nosotros no."

Lo mejor que podía hacer ahora era seguir así, sin Zayn. Después de todo lo que dije, él ya no volvería a mí como solía.

¿Nosotros no?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora