UNA ENTRE PLAYBOYS

Capítulo 2

DANIELA

Un chico cogió el teléfono.

-Hola, ¿Quién es?

Me quede callada, tenía una voz tan dulce y tan bonita....

-H-Hola... Soy Daniela llamaba porque he leído que buscáis a alguien para compartir casa y bueno, me iría perfecto.

-Vale, pásate sobre las 12 y hablamos. Chao.

Me quede un poco parada, tan rápido? Ni una pregunta ni nada? Parecía que tuviera prisa.... Bueno ya está echo.

Mire la pantalla de mi móvil eran las 11:20, lo mejor era que me preparase ya que la casa estaba a unos 25 minutos caminando, y ya que no tenía coche, cosa que tengo que ir pensando en comprarme uno ya que tengo el carnet, y sería más fácil moverme por toda la ciudad.

Salí del hotel y me fui hacia la casa, llegue tres minutos antes de las 12 y decidí picar a la puerta; cinco segundos más tarde un chico alto, de pelo castaño y con unos ojos marrones preciosos me abrió la puerta, y lo mejor ¡NO LLEVABA CAMISETA!

Creo que el noto el rojo en mis mejillas, bueno se notaba a quilómetros, parecía un tomate en esos momentos, se puso una camiseta negra que tenía por ahí tirada y volvió para saludarme, me di cuenta que el era con el que había hablado por teléfono, y si tenía una voz aún más hermosa en persona.

-Hola, soy Alex, encantado.- me dio dos besos.

-Hola soy Daniela, o Dani como prefieras.

-Ven, te presento a los demás.

-¿Los demás? ¿Cuánta gente vive en esta casa?

- Somos 4, y esperamos que te quedes con nosotros y seamos 5.

Me guiño un ojo y me puse roja. Daniela para, no eres una niña de 13 años, respira, solo es un chico más, seguro que un mujeriego, al que los sentimientos le dan igual.

-Hola chicos, ella es Daniela, bueno a partir de ahora Dani, y puede que sea nuestra nueva compañera de piso.

Todos se pusieron en pie y se acercaron a mi, me sonaban de algo, pero no sabía de qué....

-Hola soy Brandon, Brandon Harrison.

Era un chico alto, precioso, castaño y ojos marrones, se notaba por encima de su camiseta que tenía un buen cuerpo.

-Hola soy Aron Nichals y el es Noah Blair.

Oh dios mío, ya se quiénes son, los 4 chicos más populares y mujeriego de mi instituto.

-Y bueno yo soy Alex....

-Alex Johnson....

Después de decir eso los cuatro se me quedaron mirando como si tuviera un tercer ojo en la cara. Se que al decir eso pude quedar como una acosadora, no? Pero los conocía a la perfección a cada uno de ellos.

En ese momento Johnson se dispuso a hablar.

-¿Nos conoces? ¿Nos espías? ¿Cómo sabes que ese es mi apellido?

-Bueno, yo soy Daniela Sanders, voy al mismo instituto que vosotros, bueno voy a la misma clase que vosotros, aunque claro esta no sabréis quien soy yo....

-Bueno, Dani, mejor te enseñamos la casa a ver qué te parece ya tendremos tiempo de hablar más adelante.

Después de enseñarme cada una de las habitaciones de la casa y enamorarme de cada una de ellas, enseñarme el jardín con la enorme piscina, nos encontramos en el salón esperando una respuesta por mi parte....

-Me encanta la casa, es súper grande y súper bonita pero aun no me habéis dicho cuanto voy a tener que pagar, además no entiendo para qué queréis otro compañero de piso.

Aron salta del sofá dispuesto hablar.

-Dani, queríamos un nuevo compañero para compartir tareas del hogar y esas cosas, más que nada era por eso, pero al tener una chica tan guapa en esta casa, seguro que podemos llegar hacer muchas más cosas....

-Me voy a intentar tomar eso bien, ya que no quiero problemas, y creo que si, que me quedo aquí, si vosotros queréis claro...

Los tres se levantan de un salto del sofá y me abrazan para chillar todos a la vez:

-SI QUEREMOS QUE TE QUEDES!!! BIENVENIDA!!!

Dos hora más tarde me encontraba en el hotel cogiendo mis maletas para mudarme a la que va a ser mi nuevo hogar. Me siento súper feliz, la verdad me apetecía mucho encontrar un sitio donde vivir, y espero que todo vaya bien en esa casa con esos cuatro mujeriegos...

Desearme suerte, vale?

Alex, Noah, Brandon y Aron estaban en las puertas del hotel esperándome con su coche para llevarme a mi mueva casa.
Una vez a bajo, Alex cogió mis maletas y las metió en el maletero de esa gran furgoneta que tenían, era de un color rojo con nueve asientos en el interior.

Después de 15 minutos en coche llegamos a la casa, subí a mi nueva habitación y coloque toda mi ropa en su sitio, mis objetos personales, los pocos que tenia, los puse en diferentes sitios de mi gran habitación. Mi cuarto era precioso, las paredes de un color azul flojo precioso, una gran cama en el centro, un espejo grande en una esquina, un armario de un tamaño normal y al lado de la puerta una mesa de estudios, y una ventana bastante bonita en el techo.

Después de ordenar todo decidí meterme en la cama ya que estaba muy cansada y eran las 8 de la noche, así que me tumbe en mi cama y me dormí al instante.

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Me desperté con un fuerte peso encimas mío, al abrir los ojos no me esperaba ver......