Capítulo 22

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DANIELA

- Siempre me ha gustado leer, desde pequeña leía todo lo que se me ponía delante. Poder leer y emocionarme con lo que leía me hacía sentir genial. Siempre soñé con escribir un libro o poder dedicarme a algo relacionado con ello.

Estuvimos hablando una hora, una hora en la que me contó como había empezado a trabajar el aquí; me explico que su bisabuelo fundó todo esto, y ahora todo era suyo.

Zed, que era como se llamaba el jefe, no devia tener mas de 25 años, se notaba que era mayor pero que no superaba los 30 años, su pelo era castaño, sus ojos de un color gris azulado, y debía medir 1'80, ya que era mucho más alto que yo; vale que yo media 1'60, obvio que todo el mundo me parecía alto comparado conmigo, pero el mucho más.
Zed me enseñó durante toda otra hora las instalaciones del edificio. Y antes de que acabará me enseñó mi despacho, mi nuevo despacho,porque si, me habían contratado!! Tuve que firmar un montón de papeles, y cuando me di cuenta de lo que iba ha cobrar aquí casi se me sale el corazón por la boca, era mucho más de lo que necesitaba para sobrevivir.
Mi despacho era increíblemente grande, tenia una mesa que ocupaba el centro de la sala, con un gran ordenador, en el lado izquierdo había un armario y en el derecho un gran ventanal con unas vistas a la ciudad magníficas.

Salí de ahí justo a las 2.
Y a lo lejos pude ver como Brandon estaba apoyado en su coche esperándome; así que salí corriendo hacia el -todo lo que mis pies me permitian- y cuando llegue a el me tire a sus brazos.
- ¡Estoy dentro, estoy dentro! ¡Me han contratado!!
- Me alegro mucho nena. - Me dijo envolviendome con sus brazos.
Nos metimos en el coche y no pude parar de sonreír al recordar que ya estaba dentro que iba ha trabajar aquí.

Mi móvil vibro, era mi jefe, le debían aver dado mi número.

            Hola Dani, se que mañana empiezas las clases, y bueno se me había olvidado decirte tus horarios, te los envío por mensaje. Un beso.

Mis horarios eran bastante buenos; las clases solo eran de 8 a 2 de la tarde; y mi trabajo era de 4 a 6.

Le decidí contestar con un simple "Gracias" y antes de bloquear el móvil me llego otro mensaje de un número privado.

           Dentro de unos días se cumplen dos años desde lo que paso. ¿Aún tienes esas pesadillas?

Bloquee el movil y la sonrisa en mi rosto se esfumó de golpe.
- Dani estas bien? - Dijo Brandon preocupado.
- Sí claro, perdón, todo esta bien.
Decidí dejar de pensar en eso.

Llegamos a la casa y ahí estaban todos.
Después de explicarles que me habían metido dentro de la empresa y que me felicitaran por ello me llego una llamada. Era Zed.

- Hola Daniela. Quería saber que tal veías tu horario?
- Bien, muy bien.
- Se que no tienes coche, así que me gustaría ofrecerte llevarte yo al trabajo.
- No quiero molestar, puedo ir en autobús.
- No es molestia. Dame la dirección y mañana estaré ahí.
- Vale, ahora le paso la dirección por mensaje. Gracias por todo mañana nos vemos.
Los chicos se me quedaron mirando una vez colgué.
- Quien era?- Dijo Noah.
- Era Zed, mi jefe.
- Qué quería? - Pregunto Brandon.
- Mañana vendrá a buscarme para ir a trabajar, sabe que no tengo coche y a decidido llevarme él.
- Qué simpático. - Dijo Brandon irónicamente.
- Como es tu jefe? - Pregunto Noah.
- Es muy simpático, muy agradable la verdad.
- No me refiero a eso digo físicamente. Que edad tiene? - Pregunto Noah de nuevo.
-Tiene 25 años. Y físicamente es... no se como es. No está mal.
Después de estar hablando de mi jefe y de que mañana iban ha empezar otra vez las clases me subí a mi cuarto a darme una ducha.

Después de una hora salí de la ducha envuelta en una toalla.
Picaron a la puerta y seguidamente la abrieron.
- Brandon! No te he dicho que podías pasar.
- Puedes seguir vistiendote. - dijo mirándome todo el cuerpo.
- Mejor voy al baño a cambiarme.
Y antes de hacer nada me atrajo hacia si.
- Yo creo que estas más guapa así.
- Brandon... Tengo que vestirme.
- Sí quieres puedo vestirte yo... - Sonrió acercándose a mi oreja. - No tengo ningún problema en tener que hacerlo.
- Cerdo. Voy a cambiarme al baño no tardo nada.

Después de cinco minutos ya estaba vestida con unos pantalones cortos de chándal y una camiseta de manga corta.
Al salir del baño me encontré con un Brandon leyendo mi libro de After tumbado en mi cama.
- Sabes? Pensaba que este libro era un asco, pero joder, me excita hasta a mi.
Intente sacarselo de las manos pero fue estúpido ya que el se apartó muy rápido.
- Me gusta este libro.
- A mi también, es mi saga favorita. - Dije yo.
Se sentó a mi lado mirándome a los ojos.
- Dani...
- Sí?
- Qué pasó ayer por la noche?
- T- tuve una pesadilla. - Dije apenas con un tono de voz casi inaudible.
- Eso ya lo se. Pero eso no era normal. Eso fue algo más fuerte que una simple pesadilla.
- No me apetece hablar de ello ahora.
Asintió con la cabeza.

Después de eso estuvimos hablando durante horas. Hasta que llegó la hora de irse a dormir.

Me metí en mi cama, y me quedé dormida y con eso todas mis pesadillas llegaron a mi.

UNA ENTRE PLAYBOYSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora