Una pésima semana

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Harry decidió mejor cambiar de opinión y contarle a Sirius sobre los dragones para que le diera un consejo para enfrentarlos, después de que Sirius se levantara asustado al oír pasos en la casa de los gritos y se hubiera tropezado con las escaleras. Llamo a Remus mediante un patronus para que llegara todo desfajado, con el cabello alborotado, con el cuello lleno de chupetones y la cara llena de besos con labial. Sirius en ese momento estaba lanzando una moneda para ver que le interesaba hacer primero, si interrogar a Remus por el estado en el que llego o ver porque Harry habia llegado a interrumpir su profundo sueño. Para suerte de Remus el interrogatorio tendría que esperar.

-Ya se cuáles son los dragones.-Dijo Harry algo confundido al ver a Remus estar sentado en una silla con la mirada perdida en el techo, mientras sostenía una barra de chocolate sin abrir en sus manos.-Tres dragones son casi similares y un colacuerno.

-Te tocara el colacuerno.-dijo Sirius con una mirada seria y pensativa.-Tienes tan mala suerte que no me sorprendería que te tocara contra los cuatro dragones.

-Pues tu plan de dejar ciego al dragón no funcionaría.-dijo Remus intentando parecer serio para que Sirius no lo interrogara.-El colacuerno no es como los otros dragones que lo puedes dejar ciego y aprovecharte de eso.

-y tu plan de mojarlo con Acuaractor es más tonto Lunático.-dijo Sirius poniendo los ojos en blanco, mientras se ponía a caminar por toda la sala buscando su cajetilla de cigarros.-antes fumaba para llamar la atención de las chicas y verme como un chico rebelde, ahora tengo que hacerlo para tranquilizar mis nervios de cada tontería que te toca, de haber sabido que cornamenta tendría un hijo con tan mala suerte como el, lo hubiera llevado a hacer una limpia o tal vez sea culpa de Lily por haber rechazado miles de veces a James, también la hubiera llevado a hacer una limpia a ella.

-Pero mínimo un chorro de agua puede frenar una llamarada de fuego.-Dijo Lupin algo pensativo y que parecía que estaba más bien perdido en sus pensamientos de lo que acababa de pasar cuando lo interrumpieron.-Saldrían ricos vapores aromáticos, un masaje...

-Acuaractor.-Dijo Sirius apuntando a Remus con su varita para que un chorro potente de agua impactara en Remus y lo tumbara del sillón en el que estaba sentado, mientras escupía agua cansado.-¿Vapores aromáticos? Los dragones respiran azufre, ¿masaje?, si quieres dile a Harry que lo bañe y lo invite a un paseo en Hogsmade para que sea tu pareja en el baile.

-¿de qué están hablando?-dijo Remus algo confundido, mientras le salía agua por la nariz.

-Ignoremos a lunático un momento que parece que estaba en un burdel y sus tontas ideas de tener citas con un dragón.-Dijo Sirius seriamente mientras caminaba por la casa de los gritos tratando de encontrar sus cigarros.-¿Cómo se te ocurre vencer a un dragón?

-De hecho pensaba llevar a un perro para que lo distrajera y yo tomar cualquier cosa que tuviera que recuperar del dragón.-dijo Harry algo pensativo mientras jugaba con su varita y Sirius sonrió contento ante esa mención.

-¿de dónde piensas sacar un perro?-Dijo Sirius al fin encontrando sus cigarros y llevándose uno a la boca para encenderlo.-Mejor dicho ¿cómo piensas aparecer a un perro?

-Pensaba que podías esconderte en el campo y aparecer cuando te necesitara.-dijo Harry nervioso y levantando los hombros, mientras Sirius se ahogaba por el humo del cigarro ante la declaración de Harry y Remus empezaba a reírse a carcajadas.

-Mejor que se te ocurra otra cosa, no pienso sacrificar mi lindo rostro para que derrotes a un dragón, lástima que solo puedes usar tu varita.-Dijo Sirius pensativo y dándole una calada a su cigarro sin el miedo de estarse ahogando de nueva cuenta.-Pero puedes atraer una bazuca y matarlo a bazucasos.

Ganare el torneo por ti HermioneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora