~Capítulo 55~ escaleras

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Luego de su largo día del trabajo en el que se había saltado el almuerzo tras ir tres veces al baño descompuesta de vómitos - algo de lo que había comido le había caído mal, y sospechaba que había sido el sandwich de jamón con huevo que había cenado el día anterior -, al fin volvía a su casa lista para descansar. Pero lo que menos se esperaba era encontrar a esa mujer en la puerta de su departamento. Tardó, pero la logró reconocer.

Qué mierda iba a hacer?

-Hola?- se animó a hablar, llamando su atención.

-Sos vos, no es así?-

-Perdón?-

-No te hagas la estúpida conmigo.- se le notaba la furia en la voz. -Sabés perfectamente quién soy. Así como yo sé perfectamente que vos sos la puta de mi marido.-

-Rebecca.. qué haces acá?-

-Qué hago acá?!- rió irónica gritando -Vengo a defender lo que es mío.- apuntó -Estoy casada con Zayn hace doce años. He soportado de todo, incluso a la hija que tuvo con una prostituta. Pero no voy a soportar que me quiera dejar porque le gusta el culo de una estúpida rubia periodista.- exclamó, cada vez más molesta -Estoy embarazada, no lo ves? Él es el hijo de Zayn, suyo y mío, fruto de nuestro amor. Vos no sos nadie para él, no sos nada, solo una putita que le gustó más de lo normal y que seguro lo está manipulando. Él no puede dejarme! Estamos casados y con un hijo en camino! Todo era perfecto hasta que apareciste vos!-

-Lo suyo jamás estuvo perfecto. Rebecca, entiendo que estés enojada conmigo, pero fue Zayn quien tomó todas esas decisiones. Él decidió tener amantes como decidió pedirte el divorcio.- defendió.

-Toda su maldita vida tuvo amantes! Nunca le importó nadie que no fuera de su familia. Lo único que quería era follar y eso hacía. Sabés cuántas noches dormí sola en lugar de hacerlo en sus brazos? No sabes lo que se siente!- la furia en estado líquido se deslizaba en sus mejillas mientras ella aún gritaba -Jamás pensó en dejarme, porque lo nuestro funcionaba así, yo soportaba sus infidelidades y a cambio éramos una familia feliz.- negó -Pero vos, maldita perra, lo manipulaste para que me dejara, no es así? Es por el dinero? Seguro que sí, el apellido Malik es tan tentador como su billetera.-

-Yo no quiero su dinero. Toda mi vida trabajé para tener lo que tengo, no pienso dejar de hacerlo.-

-No te hagas la tonta. Crees que voy a caer en eso? Una mujer joven que trabaja todo el día y solo se hace tiempo para follarse a mi marido, por supuesto que estaría encantada de tener más tiempo libre y el triple de dinero en su cuenta bancaria.-

-Estás muy equivocada.-

-No me digas.- rodó los ojos llena de ironía. -No vas a quitarme a mi marido. No voy a dejarlo ir solo porque cree tener algo con una pendeja. Y ni que fueras la gran cosa!- siguió gritando, acercándose a ella -No vas a salirte con la tuya!- gritó, lanzándose contra ella.

-Soltame!- Rebecca tiraba de su cabello con fuerza, y ella casi no podía defenderse.

Las escaleras estaban cerca, y eso le preocupaba.

-Sos una puta! Una puta arrastrada! Y todo el mundo tiene que saberlo!- espetó, empujándola cada vez más al borde de la escalera; un paso y...

Cayó.

El departamento de Perrie estaba demasiado cerca de las escaleras y ella estaba cayendo por ellas. Pero no iba sola. El impulso arrastró a la morena, haciéndola también caer.

Los gritos y las lágrimas poblaban el lugar.

Lo último que Perrie pudo ver fue la sangre que le empapaba los ojos, el fuerte dolor en su frente y el grito desesperado de una sangrante Rebecca. Luego de eso todo fue oscuridad y frío.

Cuando recuperó la conciencia, un médico le apuntaba con una luz a los ojos que la hizo enseguida querer volver a cerrarlos.

-Está consciente.- escuchó la voz hablar -Perrie? Me escuchas?- ella asintió -Bien, estate tranquila. Vamos a hacerte todos los estudios necesarios.- avisó, y ella solo pudo volver a asentir y cerrar los ojos, el dolor de su cabeza era fuerte, pero le dolía todo el cuerpo.

• • •

-Srta. Edwards.- sonrió el doctor a Perrie mientras entraba en la habitación.

Hacía rato que estaba consciente, pero sin hablar. El cuarto donde estabas era blanco y limpio, seguramente un consultorio.
Perrie supuso que los vecinos habían escuchado los gritos y la caída, ante lo que habían salido de sus departamentos, encontrando una escena sangrienta y horrible.

Solo una cosa le preocupaba en ese momento. Rebecca.

-Todo está perfecto, no hay de qué preocuparse, solo le dimos unos puntos en la frente pero no sufrió contusión alguna, y..- antes de que pudiera terminar de informar, ella lo interrumpió.

-La mujer, la mujer con quien llegué, ella está bien?-

-La Sra.Malik.. ella está bien.- de repente su rostro se ensombreció -Pero no pudo hacerse nada con el bebé.. eso.. Lamento informarle que perdió al niño.-

-Qué?- el aire pareció abandonar sus pulmones, la sangre se le heló.

<<oh dios. El hijo de Zayn.. no puede ser..>>

-Sí.- lamentó -Pero justamente venía a informarle que se podía quedar tranquila, el suyo está bien.-

-Cómo?- la angustia no la abandonaba, pero ahora estaba también desconcertada.

-Su bebé está bien.-

-Qué bebé?-

-Acaso usted no lo sabe?-

-Saber qué?-

-Srta. Edwards, usted está embarazada.-

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Heyyyy escribo esto rápido porque me estoy yendo a hacer mi rutinaaaa

Muchas gracias por todos sus votos y comentarios! Me encantan y espero que sigan estando.

Los aprecio muchísimo!

Espero que este capítulo les haya gustado. Sé que lo del embarazo es algo trillado, pero acá tiene un significado importante.

A partir de esto, todo cambia.

Good Afternoon

~Foreveryoung:)

This Don't Have To Be Over ~ Zerrie  |mature| (Terminada) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora