Cazadora Solitaria [CS#1]

30: La bruja, digo, Charlotte, mejor lo dejamos en "Brujarlotte"

En cuanto la bruja abandonó su cuerpo original la batalla cesó. Ahora en lugar de estar rodeados de máquinas de matar sedientas de sangre estábamos rodeados de máquinas de matar muy confundidas.

Charlotte, bueno, la bruja usando el cuerpo de Charlotte, abrió la boca como si fuera a decir algo, sin embargo salió corriendo hacia la parte alta del castillo.

Nadie tuvo que dar ninguna indicación para que todos empezáramos a perseguirla. Por desgracia Charlotte o la bruja eran muy buenas corredoras, ya que nos perdió de vista rápidamente.

Me transformé en loba para avanzar más rápidamente lo que solo sirvió para chocarme con todas las esquinas que doblaba.

Tras unos minutos de desesperación sin saber por dónde avanzar un grito agudo me indicó que alguien la había encontrado en el piso de arriba, en la tercera sala a la derecha.

Y mi oído no se equivocaba.
Allí estaba Michael sujetándose el pecho mientras trataba de controlar su respiración (efectivamente, el grito agudo había sido suyo) mientras un gran oso blanco le gruñía amenazante.
Cuando entré en la sala el oso le dio un zarpazo en la cara a mi amigo, tirándolo al suelo, y se lanzó sobre mí.

Me aplastó contra la pared del otro lado del pasillo haciendo que se me parase un momento la respiración, pero recuperándome justo a tiempo para asestarle un golpe en la garganta.
Intentando volver a respirar me liberó y volvió a ser humana.
Charlotte, quiero decir, la bruja (mejor dejemoslo en Brujarlotte) cayó sobre sus rodillas aspirando aire sonoramente.

Una pequeña parte de mí deseaba que no pudiera volver a coger aire y todo acabara, pero otra más grande estuvo expectante hasta que se volvió a levantar tosiendo y me miró con odio.

-Aún no, Tala -dijo con la voz todavía afectada de mi golpe.

Empezamos una pelea cuerpo a cuerpo, que duró muy poco.
Ella me había lanzado contra la pared de nuevo y cuando iba a volver a golpearme me agaché, de forma que su puño impactó contra el muro, y al girarse para... no estoy muy segura de qué, llegó Oliver y la tiró al suelo.

-¿Estás bien? -me preguntó mirándome momentáneamente, mientras se aseguraba de que Brujarlotte no se levantaba poniéndole un pie en el hombro.

Asentí levemente y saqué uno de mis cuchillos para acabar con la misión.

Antes de que pudiera hacer nada Oliver me pegó un puñetazo en la cara tirándome a un lado. No necesité mirar sus ojos totalmente negros para saber que la bruja lo había poseído.

Me recuperé rápidamente del golpe y puse en práctica la clase de Buse. Sabía que yo sola no iba a poder ganarle, pero había que intentarlo.

Creo que los golpes que yo le daba me dolían más a mí que a él.

En algún punto de la pelea lo conseguí lanzar al piso de abajo pero antes de llegar al suelo se convirtió en cuervo y logró no hacerse daño.
Yo salté, cayendo sobre sus hombros y derribándolo.
Él me agarró una pierna y nos dio la vuelta acabando él con una rodilla sobre mi pecho, sujetándome las manos con las suyas mientras yo forcejeaba para liberarme. Que romántico.

Le conseguí pegar un rodillazo en la espalda, con lo que el cayó hacia delante sobre mí. Aproveché su momento de debilidad para soltar mis manos y levantarme.
Cuando él se incorporó sacó su arma, y supe que no me quedaba otra que usar mis cuchillos.

Esta vez la pelea fue más difícil para mí, él había tenido muchos más años de entrenamiento y era notablemente mejor que yo.
En pocos minutos consiguió desarmarme y empecé a retroceder.