Los Weirdmasters

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¡Hola, gente de todo el mundo!

Para el momento en el que me encuentro escribiendo estas palabras faltan únicamente 4 días para el gran final de la serie y no puedo estar más nervioso. Me carcomen los nervios de saber qué es lo que pasará, cómo terminará y todo lo demás. *Grito fangirl de Dipper*. Pero bueno, es mejor que me tranquilice y los deje con el nuevo capítulo de esta semana. Espero que les guste y si gustan pueden dejarme un review al final, me gusta leer todas sus opiniones.

Por cierto, al final les dejaré algunos datos curiosos relacionados con este capítulo y que hicieron que mi mundo se pusiera de cabeza. ¡Nos vemos abajo!

Gravity Falls Es una obra perteneciente a Disney. Todo lo escrito y expresado dentro de este Fanfic tiene como propósito principal el enriquecer al Fandom de la misma. Todos los personajes utilizados dentro de esta historia son una creación y propiedad original de la talentosísima y brillante mente e ingenio del animador estadounidense: Alex Hirsch. Nada será utilizado con fines lucrativos o comerciales. ¡Disfrútenlo!

Gravity Falls Fanfic: La Novia de Dipper

Capítulo 15: "Los Weirdmasters"

—¿Los Weirdmasters...? —Preguntaron Dipper y Pacifica al mismo tiempo, arqueando una ceja.

—Creo que tendré que contarles todo desde el principio. Pongan atención, mortales. Ya que esta será la última historia que sus oídos escuchen...

El bebe del tiempo alzó sus pequeños, pero regordetes brazos al cielo; ocasionando que un gran destello alcanzara el cielo para explotar pocos segundos después, segando temporalmente la visión de Dipper y de Pacifica. Cuando ambos chicos la recuperaron, se dieron cuenta de que se encontraban dentro de una ilusión en tiempo real creada dentro de sus mentes, la cual era acompañada por la poco tranquilizadora voz del bebe del tiempo mientras narraba todos los hechos acontecidos.

—Todo comenzó hace eones de años... Mucho antes del nacimiento de las primeras estrellas, galaxias y nebulosas... Mucho antes de lo que ustedes conocen simplemente como El Big Bang... Y mucho antes de la invención de los primeros chupones cósmicos con sabor a miel... Existió un mundo localizado en el centro del universo. Este mundo era conocido por el nombre de: Dhara. Dominio de Thahir, mi padre. Dios del tiempo, dios del espacio y dios de la vida. Guardián del pasado, del presente y del futuro también. —Suspiró—. Dhara... Un planeta tan masivo como una galaxia completa, y tan bello como aquello que ustedes humanos suelen llamar: "el paraíso". La vida en Dhara no podría ser de lo más próspera. Sus habitantes no se convalecían por los problemas que afronta la raza humana hoy en día. No había guerras, ni enfermedades, o hambre. Por supuesto, no todo podía ser perfecto, ya que como era de esperarse, estas eran razones más que suficientes para que otro tipo de razas de intelecto frío, con intenciones hostiles y con ojos envidiosos; fijaran su mirada en las riquezas y los secretos del planeta. Sin embargo, sus habitantes no tenían nada de qué preocuparse, ya que la guardia personal de mi padre servía generalmente como la primera y la única línea de defensa. Este pequeño grupo era conformado por diez todopoderosos, omniscientes y parcialmente omnipotentes guerreros, mejor conocidos como la guardia del alba. Guerreros cuyo poder era más que suficiente para mantener bajo control cualquier clase de situación. Desde cambiar mis pañales sucios, hasta frenar una invasión proveniente de otros mundos distantes o dimensiones alternas, ya que dentro de sus habilidades más reconocidas, se encontraba la capacidad para manipular a voluntad los elementos del poder, el tiempo, la probabilidad, la mente, la percepción, la realidad, la suerte, el espacio, la vida y la muerte. Debido a esto, la guardia el alba ganaba todas sus batallas sin muchos contratiempos. Pero lamentablemente, solo era cuestión de tiempo para que emergiera algo con la fuerza necesaria para poner en peligro la vida no solo del planeta Dhara; sino la vida de todas las demás razas existentes en el universo entero. Nadie sabe exactamente de dónde provino... Así que lo primero que observaron en el cielo fue una anomalía; una cuarteadura en la bóveda celeste apuntando hacia una dimensión desconocida de la cual ni siquiera mi padre tenía pleno conocimiento de su existencia. Luego, del interior de aquella gigantesca grieta, surgió una criatura de dimensiones tan colosales como el planeta en sí mismo. Una bestia con un millón de ojos, un millón de brazos y una piel tan oscura que era capaz de opacar al manto cósmico. Sin embargo, lo peor todavía estaba por confirmarse. Poco después mi padre descubrió que en la boca de su estómago se hallaba un agujero negro lo suficientemente poderoso e inmenso para succionar miles de mundos a la vez. Por tal motivo, mi padre bautizó a este monstruo con el nombre de: Vórtice.

La Novia de Dipper [Dipcifica] [Romance/Angst]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora