Capítulo 29

38 3 4
                                    

 -¿Sólo eso? ¿No lo van a castigar o algo parecido?-reclama el actor.

-Yo me aseguro de que entregue el dinero- dice Melanie y le hace un ademán de que la siga. Dexter me abraza antes de salir.

-No lo puedo creer. Sabes lo que me va a costar su mínimo error- comenta Brayden después de un rato.

-¿Tanto?

-Una multa. Mi contrato tenía ciertas especificaciones.

-Pero tú no lo mandaste- contesto. Asiente con la cabeza.

-Pero era mi Iphone. Mi foto.

-¿Y?

-Yo permití que sucediera. No le puse clave a mi celular, deje que se cayera, no regresé por él. –Brayden se da ligeros golpecitos en la cabeza con la pared.

-No fue culpa tuya. Eres humano, cometes errores.

-No lo entiendes- susurra. –Hollywood es una bestia, lo disfrazan como ensueño, pero es un fraude grande. Muy grande.

-Bien. ¿Por qué sigues en él?- pregunto mirando sus hermosos ojos miel.

Brayden aprieta los labios. Tiene algo que decir, que por supuesto no me contará. Por ahora.

-Como sea. Ese día le quite la clave a mi celular para que mi manager pudiera descargar el guion de la película en el.

-Con razón. Creí que eras lo bastante ingenuo como para tenerlo sin clave- me reí, el también.

-C.E.S.Y. – hace una pausa- 2379. Esa es mi clave.

-El nombre de tu perrita- acierto al decir.- ¡Lo sabía!

Brayden suelta una larga carcajada.

-La extraño. Mucho. Cada noche que llegaba a mi hogar ella, por asqueroso que fuera, me lamía los pies a más no poder.

Vuelvo a reír. Eso sí que suena gracioso.

-Y a mis padres.- Brayden baja la mirada. –Extraño bastante a mis padres.

Lo que dijo me latiga el corazón. Recordé que sus padres lo estaban buscando, creían que su hijo estaba desaparecido, lo buscaban, lo extrañaban. Porque no solo secuestré a Brayden West, sino que secuestré a un hijo de sus padres. Como si mis papás estuvieran sin mí. Como si yo estuviera sin ellos.

-¿Qué extrañas de tu familia?- preguntó con miedo.

Brayden levanta la comisura de sus labios.

-Las peleas con mi madre, las prácticas de pelea de karate con mi padre, las historias de ambos...

-¿Historias?- me sorprende oír eso.

-Mamá y papá solían vivir en un establo. Cuentan muchas aventuras juntos. Que cuando mi mamá era niña y comió (sin saber) a su borreguita, que papá piso mal y cayó en un pozo de serpientes...

-Suenan una familia unida.

Brayden se encuentra con mis ojos, ambos nos miramos.

-Sí. Claro que discutíamos... pero nos amamos.

Está bien. Lo admito: esa última frase de Brayden sí que partió mi corazón.

-Puedes hablar con ellos si quieres- dice mi voz obedeciendo a mi corazón y no a mi cerebro. Si Brayden hablaba con ellos, podría decirle donde se encuentra o con quien, y esto nos delataría y tiraría todo el plan de escena a la basura pero por otro lado, los extrañaba mucho.

-¿Qué? ¿Enserio?- dice con un brillo en sus ojos que no había visto jamás.

-Sí -le tiendo su celular- Diles cuanto los quieres. Que no se preocupen, que estas bien.

Brayden comienza marcar con prisa. No le importa que sus manos estén atadas, él solo se las maneja para poder hablar con sus papás.

-Pero no les digas donde estas- anunció cuando se coloca el celular cerca de su oído.

Brayden frunce el ceño, sé que no me hará caso. Pero antes de que logre contestarme, su madre contesta.

-Bueno- suena triste.

-¡Mamá!

-¿¡Brayden?!

-Soy yo. ¿Mamá cómo estás?

-Oh Dios mío. Hijo. ¡Estás bien! No, espera... ¿estás bien? ¿Dónde te encuentras?

Brayden me mira, clava sus ojos miel en mis pupilas. Aprieta la mandíbula, después exhala como si solamente estuviera cansado.

-Sí, estoy perfecto. No te preocupes por mí. Lo siento, tuve que salir por trabajo.

-¿Sin avisarnos?

-Cuanto te he echado de menos mamá.

-¡Brayden!- lo regaña. -Dime donde estas.

-A salvo. Lo prometo.

-¡Bob! ¡Brayden habla por el celular, ven rápido!- se escucha como grita y al cabo de unos segundo otra voz resuena.

- ¡Hijo!

-Papá, estoy bien. De verdad. No se preocupen por mí.

-¿A dónde te fuiste? Nos tienes preocupados- dice su padre.

-Lo sé, lo siento. Estoy en una especie de descanso-trabajo, no tardaré- contesta Brayden mirándome.

-¿Por qué te fuiste así? Ese no eres tú. Quiero que me digas la verada, Brayden. Ahora- exige su madre. Y es allí cuando ya no puedo escuchar la conversación. Simplemente me siento incómoda y muy mal.

Pero antes de salir de la habitación escucho a Brayden decir:

-Confíen en mí. Todo estará bien. Volveré a casa en unos días. No me extrañen tanto. Por cierto ¿cómo esta Cesy?...

::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::::

¡Hola Suricatos! Feliz San valentín de parte mío y también de los chicos, en especial de Bryaden y Dexter. 

¿Hay Team Brayden <3? ¿Team Dexter <3?

Como sea, jaja espero que se la hayan pasado muy bien en compañía de sus amigos, famlia y seres queridos, son muy importantes. 

GRACIAS POR LEER

¡Y, nos vemos en próximo capítulo!

Atte:

 AnaLucíaRdz

Plan de escenaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora