- Tengo que enseñarte algo.- saco la carta echa una bola de mi bolsillo y la abro intentando quitárselas.
Me mira con atención. Se cruza de brazos y deja caer todo el peso de su cuerpo en el pie derecho. Extiendo mi mano entregándole la carta.
- ¿Qué es?- dice serio. No mira la carta, sigue con su mirada puesta en mi.- Mira Alice, ya estoy harto de esta mierda, hace solo un puto día me dijeron que mi hermana había muerto y no tengo ningunas putas ganas de hacer nada ahora.- sentencia gruñendo. Extiende la mano con la carta en ella.
- ¿No piensas leer lo que ponen?- mi ceño se frunce. Niega.- Es sobre Anna.- su mirada se vuelve de un tono más oscuro.
- No la menciones...- gruñe. Forma sus manos en puños. Camina dando pasos lentos hasta quedar a centímetros mío. Lo miro seria.- Tu tuviste la culpa de su muerte...- sigue gruñendo bajo. Mi boca se entre abre por sus palabras.
- ¿Yo tuve la culpa de su supuesta muerte?- hablo alto y claro. Echa la cabeza hacia detrás al escuchar mi voz.- Venga ya... Ian.- río irónica. Niego mordiendo mi labio con fuerza.
- ¿Entonces quién la tuvo si no fuiste tu?- dalea la cabeza y abre más sus ojos cabreado. Respiro hondo.- Desde que tu llegaste al pueblo, mi vida y la de mi familia se a complicado. ¿Tengo algo que ver yo en eso?- mueve las manos para que hable.
Me llevo una mano a la nariz y la paso por esa zona repetidas veces. No me puedo creer que me este echando la culpa de todo esto.
- Dime si es verdad, ¿Antes de que yo llegara todo era como un cuento de hadas? ¿Nunca te has metido en problemas, peleas...? ¡¿Nunca a pasado nada hasta que yo llegué?!- niego.- Los dos sabemos que eso es mentira Ian. Se que mi mierda me acompañará hasta el resto de mis días. Pero eso no te da derecho a ti de recordarmelo.- doy media vuelta para irme, pero coge mi mano con brusquedad.
- ¿Qué ponen en la carta?- cierro los ojos con fuerza para luego abrirlos. Me doy la vuelta mirándolo a los ojos.
- ¿Ahora sí quieres saber lo que ponen?- niego sonriendo de lado.- En esa carta ponen que tu hermana sigue viva. ¡Y adivina que! El trato es mi vida por la suya.- su ceño se frunce.
- ¿Qué harás? ¿Darás tu vida por la de mi hermana?- mi mirada se encuentra fija en el suelo. No digo nada. Todavía no tengo pensado lo que haré.- ¿Sabes qué? No importa, seguro es mentira. Los bomberos encontraron los restos del cuerpo de mi hermana...- dice lo último con tristeza y rabia.- Encontraré a los hijos de puta que empezaron el incendio y luego los mataré poco a poco, lentamente...- observo su mandíbula apretada. Sus ojos se cierran con fuerza. Da media vuelta y sale andando a pasos rápidos. En menos de lo esperado lo pierdo de vista.
_____________Miro hacia mis lados. Nadie.
Meto una de mis manos en el interior de mi chaqueta. Toco el frío metal de la pistola. Respiro hondo intentando concentrarme en cualquier ruido.
Sigo caminando hasta parar justo enfrente de una tienda antigua. Frunzo el ceño al ver en el estado en el que se encuentra. Horrible...
Saco la mano del interior de la chaqueta y empiezo a andar a pasos decididos hacia el interior de la sucia tienda. Empujo la puerta haciendo que esta haga un fuerte chirrido. Cierro los ojos por la tirria que me da escucharlo.
Arrugo la nariz al sentir el fuerte olor a sucio. Entrecierro un poco los ojos pasando mis manos por delante de mi cara.
Miro una puerta al escuchar pasos. Dos hombres grandes y robustos pasan por la puerta sin apartar la mirada de mis ojos ni un misero segundo.
- ¡Mira!- habla mirando a su lado.- ¿A quién tenemos aquí?- sonríe enseñando sus amarillentos dientes. Hago una mueca de asco al mirarlo.
- El trato era mi vida por la de la niña. ¿Dónde esta?- me cruzo de brazos mirándolos seria. Ellos se miran por unos segundos y luego sonríen de lado.
- No se encuentra en este momento aquí.- uno de ellos da un paso hacia delante y yo hacia detrás.- No intentes escapar, Alice. Un trato es un trato.- gruño al escuchar sus palabras. Hijos de puta...
- No me iré con ustedes hasta que la niña esté a salvo.- me agarro a una estantería oxidada al chocar con ella.- Como has dicho, un trato es un trato.- en menos de lo esperado, tres hombres más entran en el interior de la vieja tienda.- ¿Pero qué mierda...?- no puedo decir nada más, ya que siento un fuerte olor en mi nariz y luego como mis ojos se cierran cansados.
_____________Noto unas manos pequeñas y cálidas tocar mis mejillas. Abro los ojos poco a poco encontrándome a la gemela delante mía con sus ojos totalmente rojos y uno de sus pómulos con un gran moretón. Mis ojos se abren asustada por el estado de Anna.
- Quiero a mis papis...- solloza corriendo a una esquina del vacío cuarto.
Intento moverme, pero noto que mis manos y pies se encientran atados a la silla en la que me encuentro sentada. Muevo con fuerza mi cuerpo intentando zafarme de la cuerda, pero nada.
- Anna...- hablo bajo para que no se asuste. Ella eleva su pequeña cabeza de sus rodilla y me mira un poco asustada.- Ven...- susurro mirándola. Niega.- No te voy a hacer nada, te lo prometo.- mira sus lado para luego levantarse y caminar a pasos lentos hasta llegar a mi.- ¿Qué te han echo en la mejilla?- ella toca su cara y hace una mueca de dolor.
- Un hombre me a pegado porque no quería comer...- susurra quitándose una lágrima.- Quiero irme de aquí.- vuelve a sollozar.
Subo la mirada y ella se asusta y se pone a mi lado al ver como la puerta se abre. Anna coge mi brazo con sus pequeñas manos, yo me sorprendo por como tiembla su cuerpo.
- ¡Anna!- grita uno de los hombres que se encuentran en la puerta.- ¡Ven!- vuelve a gritar. La pequeña llora más fuerte y yo me asusto por lo que pueda pasar.
- Ella no va a ir a ningún lado...- gruño haciendo que la gemela me mire de reojo. Le sonrío intentando que se tranquilice.
- ¿Cómo? ¿Has dicho lo que creo que has dicho?- fruce el ceño. El de al lado tiene la cara tapada con un pasa montañas. Mira a su lado y el otro hace un movimiento raro con la mano.- Perfecto...- sonríe de lado.
- No te atrevas a acercarte...- gruño moviéndome en la silla. La pequeña aprieta su agarre en mi brazo.
- La vamos a pasar muy bien, Alice. O como te llama un conocido mío, pequeña...- ríe enseñando sus blancos dientes.
- No...- susurro.
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Holiiii. Aquí les dejo el capitulo. Espero que les haya gustado. Se que es corto... Pero no e podido hacerlo más largo.
Voten y comenten. Bss
Marta. ;)
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Alice Green
Ficción GeneralAlice Green es una chica huérfana. Sus padres murieron en un incendio producido por una persona desconocida a la que ella busca, más que nada por venganza. Pero la cuestión es que ha salido de una cárcel de menores, llegando a un pequeño pueblo. Por...