Lauren POV.
Estábamos en la universidad y Camila me agarraba de la mano llevándome a rastras a junto de Shawn.
- No quiero, Camila. No me puedes obligar. - Me paré en medio del pasillo y Camila tiró más fuerte de mi mano para que la siguiera pero como yo era más grande y tenía más fuerza que ella apenas me movió.
- Vamos, Lauren, iremos a junto de Shawn y le vas a pedir perdón por haberle pegado.
- No quiero. - Le contesté sonando como una niña pequeña.
- Lauren... - Camila me echó una mirada amenazante.
- Se lo merecía, no pienso pedirle perdón.
- No se lo merecía y vas a pedirle perdón ahora y vas a tratarlo bien.
- No. - Volví a repetir con voz de niña enfadada y Camila volvió a retarme con la mirada.
- O le pides perdón o estas un mes sin sexo. - Abrí los ojos como platos mirándola.
- No es justo.
- Es totalmente justo. - Bufé y Camila volvió a tirar de mi mano para que fuéramos a junto del chico ese.
- Que sepas que voy en contra de mi voluntad. - Le dije mientras me arrastraba por el pasillo hasta la clase de Shawn.
- Más te vale ser amable. - Volví a bufar y fruncí el ceño enfadada.
Cuando llegamos a su clase el niñito estaba sólo en la clase leyendo un libro de sabe dios que asignatura. Antes de entrar Camila me agarró de las manos.
- Lauren, antes de que entremos quiero decirte algo que ayer no te conté. - La miré confundida. - Ayer por la mañana Shawn me besó. - Apreté la mandíbula y note como el enfado iba haciéndose presente en mí.
- ¿Te gustó? - Quería entrar en esa clase y partirle la cara pero también quería escuchar a Camila. No iba a permitirme perderla otra vez.
- No. Me sentí rara, no eras tú. Me dijo que le gustaba y lo rechacé, entendió que estoy enamorada de ti y seguimos siendo amigos. Sólo amigos así que no te pongas paranoica.
- ¿No va a intentar nada otra vez? ¿le quedó claro que estás conmigo? - Camila levantó una ceja.
- Lauren... - Le hice un gesto con la cabeza para que contestara. - Sí, idiota, le quedó muy claro.
- Está bien, le pediré perdón pero si vuelve a intentar algo lo mato. - Ella negó con la cabeza.
- No tienes remedio.
Entramos en la clase y mientras Camila se acercó a Shawn para saludarlo yo me quedé en el marco de la puerta.
- Hey, Mila ¿Qué tal? - Se levantó de la silla y le dio un abrazo.
- Hola. Vinimos porque Lauren quiere decirte algo. - Él centro su mirada en mí un poco extrañado y yo le puse mi sonrisa más falsa. - Lo, ven vamos. - Me acerqué a ellos de mala gana y me puse al lado de Camila.
- Hola. - Dije haciendo un gesto de saludo con la cabeza.
- Venga dile. - Me incitó Camila.
- Perdón. - Dije en bajito, casi susurrando.
- ¿Qué? - Dijeron los dos a la vez.
- Que perdón por, ya sabes, el puñetazo. - Miré a Camila que estaba con una sonrisa de oreja a oreja. Shawn me miró sorprendido.
- Perdonada, supongo. - Asentí con la cabeza.
- Pues muy bien, a la ya nos podemos ir. - Le di la mano a Camila para que saliéramos de ahí pero la voz irritante de él sonó otra vez haciéndome parar.
- ¿Estáis juntas otra vez? - Miré para él y sonreí maliciosamente.
- Sip. - Contesté yo orgullosa antes de que Camila pudiera hacerlo.
- Me alegro. - Dijo con un poco de desgana.
- Seguro que lo haces. - Pasé mi brazo por los hombros de Camila.
- Lauren, ya. - Me dijo por lo bajo para que sólo yo pudiera escucharlo. Le sonreí y le di un beso en los labios. Ella rodó los ojos. - Bueno nos vamos, mañana nos vemos. - Se separó de mí para despedirse de él con un pequeño abrazo.
Salimos de la clase y Camila no dejaba de mirarme.
- ¿Qué? - Le pregunté luego de un rato.
- Te pasaste.
- ¿Con qué? - Ella levanto una ceja mirándome.
- Te dije que fueras amable.
- Y lo fui. - Me miró fijamente. - Vale, igual le restregué un poco en la cara que estábamos juntas otra vez pero era para dejárselo más claro, por si no lo había entendido bien.
- Eres imbécil.
- No te lo niego. - Se rió y me dio un golpe en el brazo. - Auch, eso era innecesario.
- Te lo merecías. - Bufé.
- A veces te odio.
- Me amas.
- No, ahora te odio.
- Me amas.
- Te amo. - Sonrió y se puso de puntillas para darme un beso.
Camila POV.
Llegamos a mi casa y después de estar un rato hablando con Dinah nos fuimos a mi habitación. Lauren se tiró en mi cama mientras yo estaba en el escritorio pasando algunos apuntes al portátil. Estuvimos un rato así hasta que note como ella me giraba en la silla para que la pudiera ver. Agarró la silla y la arrastró hasta dejarme al lado de la cama y ella se sentó en la cama en frente de mí. Se inclinó hacia delante y me besó. El beso se fue poniendo más caliente y Lauren dejó mis labios para recorrer mi cuello entre besos, mordidas y chupones.
- Lo... Lolo, tengo que acabar de pasar los... - Me mordió en el sitio más sensible que tenía en el cuello y no pude evitar soltar un gemido. - Apuntes... Y Dinah... Dinah está en casa. - Acabé de decir como pude mientras ella no dejaba de torturarme con su boca.
Paró de besarme el cuello y antes juntar nuestras frentes dejó un pequeño beso en mis labios. Tenía su mirada clavada en la mía y sus ojos estaban más oscuros de lo normal.
- Llevo casi un mes sin sexo, estoy que me subo por las paredes y tú llevas todo el día torturándome con esa falda. Estoy tan caliente que podría encender cualquier cerilla o hasta una puta antorcha así que me importan una mierda los putos apuntes y que Dinah esté en casa, es más si no quiere escuchar ya se puede ir poniendo tapones en los oídos porque te voy a follar ahora mismo y seguramente el resto de la noche. - Tragué saliva y me lamí los labios. - ¿Está bien? - Asentí con la cabeza. - Bien.
Se levantó de la cama y me tendió la mano para que yo también lo hiciera. Me pegó a ella y empezó a besarme otra vez. Sus manos se fueron a mis muslos levantándome la falda lentamente hasta subirla del todo y apretar mi trasero. Gemí en su boca y sonrió. Sus besos volvieron a mi cuello otra vez y yo aproveché para desabrocharle el pantalón. En minutos nos habíamos quitado la ropa quedando sólo en ropa interior. Me agarró de los muslos quedando en sus brazos, rodeé su cintura con mis piernas mientras ella me desabrochaba el sujetador y se metía una teta en su boca haciéndome gemir. Mientras que su lengua jugaba con mi pezón su mano se entretenía con el otro pecho. Me tiró en la cama y se puso encima de mí con cuidado de no aplastarme. Jugó un rato más con mis pechos en su boca y luego me quito las bragas para hacerme delirar con su lengua en mi entrepierna.
Después de horas de gritos, gemidos y tener el mejor sexo de nuestra vida, caímos agotadas. Lauren me rodeo con sus brazos y apoyé mi cabeza en su pecho. Me dio un pequeño beso en la cabeza a lo que yo sonreí.
- Te había echado de menos, pequeña.
- Yo también, mi amor. - Me incorporé un poco y dejé un pequeño beso en sus labios para luego volver a apoyar la cabeza en su pecho y quedarme dormida entre sus brazos. La había echado tanto de menos. Entre sus brazos se duerme millones de veces mejor.
ESTÁS LEYENDO
Cuando menos te lo esperas (camren fanfic).
FanfictionCuando menos te lo esperas aparece lo que menos te imaginas, el amor.