Capítulo 2

604 36 10
                                    

N/A: Bueno, hoy estoy un poco On fire, y aunque no espero muchas reviews, al menos espero visitas, no se si os gusta la historia, pero os voy a poner otro capitulo para que vayáis pillando por donde va la cosa

Se que tal vez al no salir Richard Castle no mole tanto, pero estoy inspirada y siempre he querido leer una historia así jajajaja

Gracias Lithet por tu Review, se que te molan este tipo de historias así que si nadie más comenta, haré la historia para ti jajajaja

Bueno no me enrollo más, espero que la disfrutéis!



.
Salimos del despacho y la capitán me indicó cual sería mi nueva mesa, ya que la que hasta ahora era mía, pronto sería de esa tal detective Beckett. Desde que me había dicho su nombre, no dejaba de darle vueltas, ¿otra mujer para sustituirme?, lo último que necesitaba en ese momento, que lo que hasta ahora había conseguido me fuera arrebatado por una americana que nunca fallaba, que pronto se iban a olvidar de mí.

Mi ánimo estaba por los suelos, cada vez que me traían documentos que examinar y rellenar, se me hacía más cuesta arriba, yo no estaba hecha para eso, no llevaba ni un día allí, y ya echaba de menos las calles.

¿Se suponía que esto iba a ser mi vida a partir de ahora? Papeles y más papeles, sentada todo el día, levantándome para hacer una visita a la sala de descanso o al baño y vuelta a más papeles, menuda suerte la mía, no solo había perdido una pierna, si no que mi emocionante, aventurera y arriesgada vida se había vuelto una aburrida y monótona rutina. Encima aún no había visto a Javi por allí, no estábamos en nuestro mejor momento, ya que durante esas semanas, en vez de darme cuenta de que mi mejor amigo estaba ahí todo el tiempo que podía apoyándome en todo, me había pasado las horas discutiendo con él por lo desgraciada que era mi vida desde el "accidente".

Perder una pierna no solo era una pérdida física, había dejado atrás mis ánimos, mi sonrisa, mi alegría, las ganas de vivir, pasando a ser una joven amargada y huraña, que ladraba al mínimo comentario. Era una efímera imagen de lo que solía ser y veía muy difícil salir de ahí.

Mientras estaba leyendo unos papeles, oí el ascensor, levanté la vista al oír la risa de Javi y Kevin, mis dos compañeros de equipo, bueno, ex compañeros. Pero no iban solos, una chica con el pelo castaño, largo y algo ondulado iba con ellos, ella también se reía, seguramente del mismo motivo que mis ex compañeros. Mi mirada no pudo apartarse de ella, tenía algo hipnotizante, quizá era su mirada segura, o tal vez simplemente porque tenía un físico increíble, llevaba una gabardina beis atada con un cinturón que dejaba ver su perfecta cintura y unos pantalones jeans que marcaban unas largas piernas de infarto. Nunca antes me había quedado mirando fijamente a una chica como lo hice esa vez, pero como he dicho, tenía algo que me hipnotizaba. La seguí con la mirada hasta que se acercó a la capitán, le estrechó la mano y entró a su despacho.

- Hombre Rose, me alegro de verte - dijo Ryan sacándome de repente de mi ensoñación.

- ¿Qué? - contesté sin haberme enterado muy bien de lo que había dicho.

- Solo he dicho que me alegro de verte, Rose - dijo riendo.

- Yo también me alegro de verte Ryan - siempre le llamaba por su apellido.

- ¿Cómo está mi detective favorita?

- Pues contando que ya no soy tu detective, de puta madre - dije con ironía.

- Joder Castle, lo siento.

- No pasa nada, ya sabes, lo superaré - mi mirada seguía fija en el despacho de Gates, esperando a que esa chica saliera.

Mi historiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora