Capítulo 35. Verónica.

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Estoy haciendo el desayuno, pancakes con frutas, es mi favorito, y el de Emma, y el de Joseph, no me había dado cuenta que teniamos eso en común. Lo de anoche fue perfecto, fue algo diferente a lo que hacemos, pero me gustó, y creo que a Joseph también. Mi bebé, será la consentida del mes, así que voy a cocinarle todos sus favoritos. El timbre suena y me acerco a la puerta para ver quien es. Quedo en shock cuando abro.

- ¡Caleb!.- digo sorprendida lanzándome a sus brazos con una sonrisa.

Me abraza fuerte, lo extrañé mucho.

- Oh por Dios, es muy bueno verte. Pasa, estoy haciendo el desayuno.

- Gracias, me encantarían unos pancakes.- me dice besando mi mejilla.

- ¿Cómo sabes que estoy haciendo pancakes?.- le pregunto extrañada.

- ¿Te has visto en un espejo?.- me dice riendo.

Veo mi camisa y está llena de harina y mezcla, si, que desastre. Entramos a la cocina y le ofrezco café a Caleb, se ve distinto, renovado, no se que ha estado haciendo pero le ha hecho bien.

- Entonces, ¿cómo has estado?.- le pregunto.

- Genial, si. Tuve tiempo para pensar, despejar mi mente, sabes, un tiempo para mi. Pude pensar sobre lo que pasó, y mientras más lo pensaba más me daba cuenta lo loco que suena. Fue un error... Y lo siento.- me dice.

- No hay nada que perdonar.- le digo de corazón.- ¿Cuándo volviste, de...dónde sea que hayas estado?.- se ríe antes de responder.

- Ayer en la noche en realidad, llamé a papá y me dijo que Emma había tenido un accidente.

- Oh, si, pobrecita, se rompió el brazo.- le digo haciendo una mueca.

- ¿Cómo sucedió eso? Ella no es tan inquieta.- me dice extrañado.

- Fue un accidente, se cayó.

- ¿De dónde?.- pregunta más confundido.

- De mis hombros.- se escucha la voz de Joseph detrás de nosotros.

Caleb gira su cuerpo, sorprendido de ver a Joseph en la casa, en pijamas.

- Joe... Estas aquí.- dice Caleb sorprendido.

- Si, hola hermano.- se acerca a Caleb para darle un abrazo. Puedo ver la cara confundida de Caleb.

- Hola...ahm, ¿qué está pasando aquí?.- pregunta señalándonos.

Joseph y yo nos vemos a la cara, y nos echamos a reír.

- Joseph tiene permiso para estar fuera de la institución por una semana.- le digo a Caleb y el abre sus ojos en sorpresa.

- Wao, eso es genial. Eso es genial Joe.- le dice dándole una palmada en la espalda.

- Si, gracias.- dice sonriendo.- Emma está despierta.- dice mirándome.- le prometí que le llevaría pan-

- Listo.- le digo extendiendo el plato de pancakes.

- Está dos pasos delante de ti.- dice Caleb a su hermano, riendo.

- Siempre.- dice Joseph guiñando un ojo. Ruedo los ojos.

- Ya vuelvo. Voy a traer a Emma, va a enloquecer cuando te vea.- dice Joseph dejando el plato en la mesa.

- Se ve bien.- dice Caleb mirándome.

- Si, está mucho mejor. El médico dijo que lo dejarían salir dentro de poco.

- Ah, me alegro. ¿Están juntos?.- me pregunta sin rodeos.

- Eeh, no lo sé.

- ¿Durmieron juntos?.- me pregunta encongiendo los hombros.

Mr. Carter Donde viven las historias. Descúbrelo ahora