Eve

28

—Si quiero— dice y suspira —Déjame entrar.

—¿A dónde?.

—Aquí— con su dedo índice toca mi frente haciéndome reír —Y aquí también— baja su dedo señalando el lugar en donde está mi corazón.

Sonrío y niego con la cabeza.

—Es peligroso.

—¿Por qué?— sus ojos piden esperanza. Puedo notarlo, por qué puedo leerlos —Hemos hablado por semanas y me gustas, me gusta tu manera de ser conmigo, es diferente, somos buenos amigos, pero yo te quiero y quiero protegerte también.

—¿Y si rompes mi corazón?— cuestionó y el sonríe.

—No soy ese prototipo de persona, soy de las que se entregan por completo a una solamente, no te fallare— sonrío.

Mis ojos se llenan y me obligó a no llorar, ahora no.

—¿Y si yo rompo tu corazón?.

El se queda serio, parece buscar la respuesta a lo que acabo de decirle. Ni siquiera sé si exista una respuesta.

—Entonces te buscaré de nuevo para que lo repares.

Sonrío irónica -si tú supieras que ya no podré estar-.

—Por favor, quiero conocerte más, quiero vivir mis días buenos contigo, quiero que el mundo sepa que estamos en algo— muerdo mi labio inferior.

¿En serio lo estoy pensando? Yo debería decirle que no. Que mejor se aleje y que lo mejor es que ni amigos seamos ya.

Eso es lo que debo decirle, así que se lo diré, le pediré que se vaya y no volveremos a hablar.

—Esta bien— ¿espera que? ¿Ese ah sido mi puñetero corazón y mi bocota traicionándome?

—¿En serio?— su sonrisa es tan grande que parece que su rostro se partirá en dos.

Yo también sonrío y asiento.

El suelta mi mano y siento frío en ella, pero eso se remplaza por el calor que me llena cuando sus brazos me rodean.

—Juro que no te decepcionaré, Eve— sonrío.

Me siento... Feliz.

Se aparta y nos vemos sonriendo como idiotas, y puedo decir idiotas por qué en serio parecemos idiotas.

El silencio se presenta, e incluso parece que se pone a fumar a nuestro lado por qué dura un rato, mis ojos ven los labios de Connor, no me había dado cuenta las ganas que tengo de besarlo hasta ahora.

Y como si de un himan se tratara choque mis labios con los suyos.

Y de pronto todo mi mundo giro.

Era como si estuviéramos conectados, por qué el sabía perfectamente cómo movería mis labios, era como si él ya estuviera un paso adelante y yo dos atrás, era como querer tomar el control y no poder hacerlo por qué él ya lo tenía, era como dejarme hacer a su manera y no protestar en absoluto, por qué me gustaba.

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Muchas gracias a Disclosure, (que obviamente hay un 100% de probabilidad de que nunca lea esto :p) por inspirarme con su canción
"You and Me" a escribir este hermoso capítulo.❤️

Hasta pronto, chau💕