CAPÍTULO 26

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Ashley Greene => Kristen

Quería correr detrás de ella, pero en ese momento no me podía mover. Ella me odiaba. La había cagado.

No sé en qué ni como, pero la había cagado.

Salí del cuartillo unos segundos después y oí un llanto lejano. Seguí el sonido y me llevó a un rincón al lado de las escaleras. No me acerqué del todo porque imagino que Emma querría un poco de intimidad. Además oí su voz.

-No me lo puedo creer Ariann – el llanto ahogado de Emma me rompía – Me ha besado, y yo le he seguido – Pausa – Sí que es malo – Otra pausa – Porque me ha gustado, y porque he sentido algo – su llanto se intensificó – No quiero que me pase igual que me pasó con Jackson – Otra pausa de nuevo – No lo sé, no parecen iguales, pero ya sabes cómo acabé por culpa del bastardo – Silencio - ¿Después del beso? Me dijo que se estaba enamorando de mí, y que su novia se dio cuenta antes que él, y que cortaron porque me quería – Más silencio – No Ari no, será muy bonito y todo lo que tú quieras, pero nada me asegura que Edgar no es como Jackson – Un silencio más largo de lo normal invadió el pasillo – Si, eso es cierto...

-¿Puedo saber quién es ese Jackson con el que tanto me comparas desde que me declaré a ti? Y ya de paso ¿qué es cierto?

-Ariann – dijo bajito – Tengo que colgar – hizo una pausa y luego me miró – Mi mejor amiga quiere hablar contigo – me tendió su teléfono y yo lo acepté confuso.

-¿Hola? – Me senté junto a Emma y con mi mano le sequé las lágrimas – No llores más por favor, odio verte así – le susurré tapando el micrófono del móvil.

-Hola ¿tú eres el famoso Edgar? – La voz suave y fina de una chica sonó al otro lado del móvil.

-Bueno, muy famoso por allí no creo que sea. Depende de lo que entiendas tú por famoso.

-Créeme, para mi eres famoso. Siempre que hablo con Ems habla de ti. Por cierto me llamo Ariann.

-Encantado. Espero que cuando hable de mi sean cosas buenas.

-Más o menos.

-Ya, lo suponía – hice una pausa – ¿Podrías decirme quién es Jackson?

-Lo siento pero eso es algo que te tiene que explicar ella.

-Claro, no quiero parecer borde pero, ¿puedo saber porque querías hablar conmigo?

-Para conocerte, y para advertirte. Si pretendes conquistar a mi mejor amiga, más te vale no ser un capullo, porque me da igual que esté en Noruega, vendré a por ti – Hizo una pausa – Pero me caes bien – dijo con voz amigable – De momento – ahora su voz era seria. De repente la llamada se cortó.

-Toma – le tendí su teléfono – Muy maja Ariann, por cierto – ella asintió, sin mirarme, intentando ignorarme - ¿Sabes? Me da la sensación de que te he cortado con tu amiga y que ibas a desahogarte con ella.

-¿Por qué sigues aquí?- dijo con la voz rota.

-Porque necesitas a alguien con quien hablar, y dado que tu amiga ha colgado, me gustaría que hablaras conmigo.

-Son cosas demasiado personales para compartirlas con alguien como tú. Ni siquiera Alec sabe cómo me siento de verdad y que ocurrió realmente. Sólo Ariann y mi primo Isaac.

Los sollozos ahogados de Emma sonaban cada vez más fuerte, y su pelo ya no le servía para ocultar su rostro empapado.

-Ems – le cogí de las manos – puedes confiar en mí. No te estoy pidiendo nada, solo quiero que sepas que puedes confiar en mí siempre – ella bajó aún más su cabeza – Mírame por favor. No puedo seguir viéndote así.

-Pues vete, déjame sola – dijo entre sollozos.

-Eso nunca – Hice una pausa y ella me miró, sorprendida – Ya te dije lo que sentía, y no esperaba una respuesta inmediata ni muy positiva, pero que no hayas reaccionado bien no cambia nada para... - Un abrazo por su aparte me interrumpió, suspiré y la abracé, acaricié su suave pelo mientras ella lloraba en mi hombro.

-Tengo miedo – susurró.

-Ven, vámonos a casa, es mejor que tampoco vayamos a la siguiente clase – intenté que se levantara pero no se movía, solo permanecía abrazada a mí.

-Cómo voy a apartarme de ti si siempre hay algo que nos une – solloza.

-No tienes por qué separarme de ti.

-Y no quiero, pero es lo que debo hacer.

-¿Porqué?

-Porque no quiero que me pase lo mismo que me pasó con Jackson – se separó de mí – Te lo explicaré todo.

Aunque dijo eso, no se movió, así que la cogí en brazos.

-Vámonos de aquí encanto – le sonreí y ella solo se cogió a mi cuello.

-¿Edgar?

-Mmm.

-¿Cómo nos vamos a ir?

-Vaya... No había pensado en eso – reí y la dejé en el suelo. Aun así permanecimos medio abrazados, yo la sostenía por la cintura y ella tenía su brazo rodeando la mía.

-Por fin os encuentro – La voz de Isaac nos sobresaltó e instintivamente nos soltamos el uno del otro – Os he visto abrazados y como la has traído hacia aquí. Tomad – me tiró unas llaves – Llevaos el coche de Jace. Está claro que necesitáis hablar.

(...)

El camino en coche fue muy silencioso, pero era normal, no era un silencio incómodo.

-Bonita casa – comenté. Era enorme y muy hogareña.

Entramos y la casa estaba vacía. La seguí subiendo unas escaleras enromes y siguiéndola entramos a la que parecía su habitación. Era violeta y blanca. Nos sentamos en la cama sin articular palabra alguna. Así que decido ser yo quien comience a hablar.

-Bien, háblame de Jackson – ella asintió y cogió aire.

-Verás...

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Y.... tachaaan!

Aquí está el otro capítulo que prometí, disfrutenlo :) 

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