¿POPULARES? #Wattys2017

CAPÍTULO 31

Ashley Benson -> Michelle Miles

-¡Emma! – grité. Llevaba apenas 5 minutos buscándola, y ya me estaba desesperando. ¿Y si le había pasado algo? – ¡Emma! – repetí.

Cogí el móvil, ningún mensaje ni llamada perdida. Marqué el número de Emma mientras corría por toda la planta.

Un pitido..., dos pitidos..., tres pitidos... cuatro pitidos... Llamada finalizada.

Colgué y me apoyé en la pared. Ya había recorrido toda la superficie de ese piso y no había encontrado rastro de Emma.

-Vamos Emma... ¿Dónde diablos estas? – suspiré agotado.

Oí una puerta abrirse y me di cuenta de que me había sentado justo al lado de la entrada del baño de mujeres. Giré mi cabeza y me encontré con una morena de grandes complexiones y con un maquillaje abusivo.

Ella no era Emma. Apoye mi cabeza en la pared de nuevo. Oí la puerta abrirse otra vez. Pero lo ignoré. Posiblemente sería otra mujer.

-¿Edgar? – la dulce voz de Emma inundó mis tímpanos. Me levanté de golpe. Y lo primero que hice fue abrazarla, puse una de mis manos en su cabeza y la atraje hacia mí.

Inhalé el aroma de su pelo, olía de maravilla.

-¿Y esto porque? – rió ella abrazándome por la cintura.

-Estábamos preocupados por ti, te hemos llamado mil veces y no lo cogías, los demás te están buscando como locos. Igual que yo hace unos minutos – Nos separamos.

-No cogía el móvil porque lo tengo en silencio, y además, no hablo por teléfono mientras hago mis necesidades – se encogió de hombros y sonrió. Yo amaba esa sonrisa – Llamaré a Isaac, a estas alturas ya se habrá vuelto loco.

-Vamos, nos están esperando – rodeé sus hombros con mis brazos, en un gesto de sobreprotección hacia ella. Apoyó su cabeza en mi hombro y caminamos hacia la cafetería.

-Vaya, pero mira quien está aquí. Habéis tardado mucho – Jake levantó las cejas y nos echó una mirada pícara.

-Cállate Jake. Si tuviera un cojín, te lo tiraría a la cara para que te ahogaras – y como la persona madura que era Emma, le sacó la lengua.

-Uou, uou, tranquila tigresa – rió – Bonita lengua, por cierto – su risa se intensificó.

-Idiota... - murmuró Emma.

-Tranquila encanto, Jake es así – reí.

-Soy precioso – hizo gestos imitando a una chica pija.

-Ya, claro – rió Matt a sus espaldas.

-Mi barriga pide comida, así que vamos ya a comer – Kylan tocó mi hombro por detrás sobresaltándome.

Todos asentimos y nos dirigimos a la cafetería.

-Hola, ¿saben ya que van a tomar?

-¡Chocolate! – Exclamó Kylan – Ponme 5 de cada donut que lleve chocolate – dijo medio babeando – Para tomar aquí por favor – dijo emocionado.

-Vale... - La chica, una rubia con curvas bastante guapa, se dio la vuelta poniendo en una vendeja los donuts.

-La verdad, no sé si babeas por la chica o por los donuts Ky – reí tocando su hombro.

-Chocolate – señaló una máquina que derretía chocolate – Oh, dulce chocolate – comenzó a cantar.

-Oh no, por favor – suspiré agotado.

-¿Qué está haciendo? – Preguntó Alec a mi lado, como si Kylan no estuviera.

-Le canta al chocolate – respondió Jake por mí – está obsesionado, ignórale.

-Sí, mejor – le apoyé.

-¿Algo más? – la chica llegó con una bandeja llena de bolsas.

-¡Donuts! – gritó Ky como un niño pequeño. Le arrebató la bandeja a la chica – Os espero en la mesa – ahora su voz sonó cantarina.

Todos ordenamos nuestros donuts y bebidas y cada uno pagó lo suyo.

***

-Mmm, estaba delicioso – murmuré en el coche.

-Cierto – Ky se agarró el estómago – Pero creo que debí haber prescindido de los últimos 10 donuts.

Reí y saqué mi móvil, el cual llevaba vibrando unos segundos. Miré la pantalla: Mamá

-Hola mamá. Estoy de camino a casa.

-Hola hijo, ¿a que no sabes de que me he enterado? – mi madre parecía más feliz de lo normal.

-No, ¿Qué ha pasado mamá?

-Hoy he ido a tu escuela porque tenía reunión con la tutora de Michelle, debido a su cambio de comportamiento...

-Mamá ves al grano – mi madre tenía la costumbre de irse por ramas cuando estaba explicando algo "emocionante" según ella.

-Estoy en ello, pero no me dejas hablar – oí como una sonora carcajada salía del altavoz – Verás, cuando ya me iba del colegio, choqué con una mujer, ¡que resultó ser Marie! - ¿Marie? Por favor que no sea la señora Ovesen - ¡Marie Ovesen! Estudiamos juntas durante un año con su hermana Jenna que era menor pero siempre iba con nosotras. Éramos muy buenas amigas, pero se marchó con su familia a Noruega. Hablamos y resulta que es tu profesora –Definitivamente era la señora Ovesen - El mundo es un pañuelo.

-Mamá... ¿A dónde quieres ir a parar? – pregunté con temor.

-El caso es que fuimos a una cafetería a tomar algo juntas y decidimos que en Navidad comeremos juntos, así se reencontrará con el tío Nick. ¿Sabes? Ellos dos estuvieron saliendo por un tiempo... - Me imaginé la cara de mi madre en este preciso momento. Iugh.

-Mamá, calla – se escuchó un pitido, como si la llamada se hubiera cortado - ¿Mamá? – Miré la pantalla de mi teléfono y, efectivamente la llamada se había cortado. Raro.

Al minuto mi móvil vibró. Nuevo mensaje de Emma.

*Em-Em*: Tenemos que hablar de nuestras madres

Emma no estaba en el mismo coche que yo así que, imagino que por eso me envió un mensaje.

*Yo*: Lo sé, mi madre me acaba de llamar *-* :O

*Em-Em*: Y... ¿Qué te parece lo de cenar en mi casa?

*Yo*: No sabía que sería en tu casa

*Em-Em*: Si, es más grande y tenemos servicios, estaremos más cómodos allí

*Em-Em*: Edgar, prométeme que hablaras con tu hermana, no me gustaría tener que montar un escándalo delante de mi familia.

*Yo*: Claro, hablaré con ella, pero, ¿te podrías pasar por mi casa mañana? Creo que tu y yo también tendríamos que hablar.

*Em-Em*: Está bien, pienso lo mismo.

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Hola mis langostitas :3

¿Cómo se encuentran hoy? No saben como me costó escribir la mitad de este capítulo. ¿Que les parece la cena entre las dos famílias? ¿Quieren peleas entre Emma y Michy? Yo si :) Pero no quiero ser mala. Ya verán...

Nos leemos pronto :)

Voten y comenten por favor, me ayudaría mucho. Las amoo:3