Capítulo 15

5.7K 275 2
                                    


-Eres raro, Walter -Dice Abbie mientras iban caminando donde se encontraba los chicos.

-¿Porqué lo preguntas? -Pregunta colocando sus manos en sus bolsillos.

-Deberías saberlo. Sólo te diré que ahí una parte de mi que le gusta demasiado y la otra parte tiene miedo.

-¿Tienes miedo de mi?, te entiendo. Si yo fuera tú me hubiera alejado de hace mucho -Dice en una mueca.

-Si no lo hice cuándo debería hacerlo, ¿Porqué hacerlo ahora? -Pregunta Abbie.

-Esa respuesta sólo la tienes tu -Le guiña el ojo.

-Ojalá no me odies en un rato más. Ya sabes, tus cambios de humor -Explica Abbie.

-No pedí que me entendieras. No quiero que nadie me entienda y tú eres la menos indicada para hacerlo.

-Correré el riesgo -Le sonríe Abbie sabiendo que Walter estaba enojado y eso lo hacía enfurecer más.

-Me dará una pulmonía '
-Dice Abbie mientras ríe.

-Ven -Musita Walter para luego colocar su brazo alrrededor de su hombro.

-Ninguna palabra de ésto a nadie. Nunca te bese, te abraze y mucho menos te pedí perdón, ¿Lo prometes? -Pregunta Walter en el oído de Abbie.

-Sabía que ésto era muy perfecto venir de ti. Eres un mujeriego y podré arruinar tú reputación con ésto, lo siento Sr. Genial. Siento que nos conozcamos y siento no ser las putas con quiénes estas, cómo siempre lo dices: "Soy muy poca cosa para ti. Imperfecta, molestosa, ect. Y más ser la persona que te da repugnancia". Y tranquilo que guardaré tu secreto -Dice Abbie alejada de el.

Odiaba que fuera así. Es un imbécil.

-¿Que querías que pasará?, ¿Que jugaramos a la pareja feliz?, pues no es así, Abbie. Nos besamos pero fue sólo un beso que no provocó nada en mi. Tal vez nunca debiste besame en primera para que no te ilusionaras porqué siempre supe que caerías en mis redes y gustaras de mi, lo que no pense que fuera en tan poco tiempo. Soy un chico encantador lo sabemos pero tu. Tú eres.. -Abbie lo abofeteó.

-Ni te atrevas a decir algunas de tus estupideces refiriéndose a mi. Y si me gustaste no significa que haya caído en tus encantos, querido. No será que tu caiste en los mios -Le sonrió satisfecha.

-¿Qué?, por favor no me hagas reír. A quién encantarías tú, ni que fueras Selena Gomez. Sólo me das lástima, te crees la más genial pero no lo eres, aparentas algo que no eres y no serás. No eres un mujer llamativa si que no lo aparentes más. No llamas la atención ni de una mosca -Dice bruscamente.

-Podré no llamarle la atención a nadie pero lo que tengo muy claro es que yo no soy un demonio disfrazado de ángel. Y nunca fui alguién que nunca he pretendido ser, me siento agusto siendo yo y tú ni nadie me hará sentirme peor por unas palabras si que mantén tú puta lengua callada porqué solo eres un idiota más que está en esté mundo cómo un estorbo -Dice Abbie alterada. Estaba enojada y demasiado que sólo quería golpearlo repentinas veces sin parar.

-Mira maldita estúpida. Nadie pidió tu opinión sobre mi y por lo menos a las mujeres les encanta como soy y en cambio tú. ¿A quién le encanta como eres?.. ¡Ah nadie!, si que no sigas jodiendome con hacerte la chica de hierro que no funciona conmigo que se que estás dolida contigo misma porqué no me fijé en ti como tal vez muchos no lo han hecho. Nadie te manda hacer tan poco cosa -Esas fueron las últimas palabras que cruzaron porqué llegaron ya a la fogata.

Abbie furiosa sigue su camino al auto sin decir nada. Ahí estuvo la mayoría de el tiempo hasta que su amiga se le acercó.

-En primera quiero volver a la cabaña. Tomar mis cosas y volver a casa para no saber más de ese estúpido -Dice Abbie tratando de aguantar sus lágrimas.

-¿Qué?, ¿Qué pasó cariño? -Pregunta Lucy mientras la abrazaba. Abbie ahí es vuando se derrumba y llora en los brazos de su mejor amiga.

-N-ada. Sólo discutimos y me dijo las cosas que siempre me dañan al igual que yo le dije unas cuantas verdades y se enojo más aún al punto de tratarme como una mierda. Lo odio, Lucy -Dice con voz quebrada.

-Tranquila. Sabes que no le dejaré pasar ninguna más a ese imbécil que se ha creído con el derecho de tratarte así. Ningún hombre, escúchame bien, Abbie. Ningún hombre nunca te tiene que sobrellevar por nada de el mundo y si te basuera tu más lo basueras al punto que el si se sienta mal. Es que ese hijo de puta me las pagará y ahora mismo le dire unas cuantas verdades al engendro mal nacido -Dice Lucy con furia.

-¡Espera!, déjalo. Ya pasó y el daño está hecho y no ahí nada para arreglarlo si que se joda con su mierda que me importa lo más minimo lo que me haya dicho -Dice en una forzada sonrisa. Luego quita sus lágrimas de la cara para sonreírle.

-Para la próxima no dudaré en dejarle la cara hecha pebre al imbécil -Dice Lucy.

-Tranquila que de eso me encargaré yo -Bromea Abbie.

Walter trata de aguantar los regaños de Kian pero da un suspiro cuando es su turno de hablar.

-¿Me contarás que paso Walter? -Pregunta Kian seriamente.

-La besé, nos tocamos pero no tuvimos relaciones si que cálmate... y luego le dije que no tenía que contarle a nadie lo sucedido. Entonces ella se sintió mal y empezo a decirme mis verdades, tu sabes como soy de hiriente y la trate mal porqué no soporté que me dijiera mi realidad y fui demasiado grosero con ella hasta el punto que podía ver que en sus ojos se reflejaba dolor y odio -Hace una mueca.

-Pero Walter. Te he hablado mil veces que tienes que calmar tus impulsos para no dañar a las personas.. -Suspira Kian.

-En fin. Lo hecho ya está hecho y nadie puede cambiarlo.

WalterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora