Cuando llegamos, sonreí aún indecisa de lo que sea que sucedía en aquellos momentos. Simplemente no quería saber que era lo que significaba la realidad en aquel entonces, simplemente quería perderme en la perplejidad de lo que parecía más sueño que un hecho, el ahora. El ahora parecía más lo que eran los sueños felices, la sensación de bienestar. Lo que simbolizaba Will. Él me observaba atento, a la espera de mi siguiente movimiento, el cual fue agarrar fuertemente su mano para después dar una vuelta, observando el alrededor, él sonrió y bajó la mirada a nuestras manos entrelazadas aún, a lo que me sonrojé y la solté de inmediato.
-¡Hey! Disculpa, simplemente esto es...-
-Bello, yo lo sé. Como tú lo eres- la sala permanecía en silencio, pero me reconfortaba y a la vez había una sensación completa de miedo.
-Will, debes saber que yo-
-Saber que tienes novio, Cassie. Yo lo sé, escuché ayer como se lo decía a Nick en el estudio, entre por equivocación. Siendo sincero sé que no deberías preocuparte por una persona como yo, especialmente siendo tan yo. Jamás pretendería despojarte de tanta alegría ni ser aquella persona que termine jodiendo algo tan bello como es aquello que tu tienes con él. De verdad que ese chico tiene una suerte infinita contigo a su lado- Lo observe anodada, algo en el brillo de sus enormes y fantásticos ojos me decía que no mentía, que debía creerle por completo.
-Gracias William-
-Para ti puedo ser Liam o Will, tanta formalidad me hace sentirme muy en familia- sonreí abiertamente, tratando de entender un poco su forma tan honesta y segura de ser ante mi.
-"Es momento de que inicien, chicos"- la voz de Clarissa nos hizo despertar del trance en el que os habíamos dispuesto estar. Nos giramos para observar en la pantalla a nuestros amigos, Cameron y Anne se colocaron en puestos contrarios, cada uno en una esquina del escenario.
-Deberé estar por completo loco ¿Sabes?- levanté una ceja ante su dirección, por lo que se echó a reír- Creo firmemente que ellos tienen algo de ¿Química? si así se le puede llamar. Tan solo obsérvalos, hay algo ahí-
- Locos seremos ambos, entonces- él sonrío y volvimos a admirar sorprendidos como nuestros amigos bailaban tierna y fuertemente sobre el escenario, al unísono y completamente felices.
Sus voces eran mágicas y al sumarse a la del otro parecían estar destinadas a ser la melodía perfecta para cualquier que los escuchase, pues la expresión de los jueces no me dejaba mentir. A tan solo un poco de horas de estar juntos pudieron crear una pieza de arte que nos había dejado por completo sin aliento, claramente ellos estaban hechos para permanecer ahí y hasta para estar uno al lado del otro. Estaban hechos para el otro.
Al terminar era imposible dejar pasar las sonrisas y evidentes expresiones de satisfacción de todo el mundo que los había visto, solamente una persona que no sabría el amor dejaría pasar la química que brotaba entre ellos. Durante las críticas, que no fueron más que claras felicitaciones por parte de los jueces, ellos se observaban a escondidas, tratando de observar al otro y sonreír tontamente.
-¿Cass?- me giré para observarlo. Él me veía con una sonrisa triste de lado, parecía un niño asustado pues se había movido hasta la esquina del sofá y hablaba más para él que ni para mi- Yo, de verdad, te extrañaré-
-¿Lo sabes?- él asintió. Sabía perfectamente que serían los últimos instantes a su lado, sabía que no tardaría mucho para que yo me marchase y no me volviese a ver o por lo menos que no volvería a saber de mi por un buen tiempo.
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Euphoria
Romance*Segunda parte de Parallel* ¿Qué sucede cuando no existe nadie en quien confiar? ¿Qué pasa cuando hasta el amor resulta ser un engaño? ¿En quien confiar en un mundo falso? Todos los sueños se han roto, todo el abismo a regresado. Ya no existe una...