Euphoria

Armas letales (Capitulo 16)

-¿Para qué nos llamaría?- me pregunto Nick.

-Lo mismo me pregunto- observamos por el ventanal los alrededores de la universidad y cientos de personas ir y venir.

-Cassie, Nick- Elena Curie nos miró sonrientes y señalo las dos sillas que estaban enfrente de su escritorio.

Nick y yo nos limitamos a sentarnos en la silla sin decir una sola palabra y contemplando el andar de Elena por la oficina hasta llegar a su silla enfrente el escritorio. Ella nos admiro expectante y hasta después de unos minutos, habló.

-Sus audiciones han sido los mejores que he visto hasta el momento y créanme, las felicitaciones se quedarán demasiado cortas a lo que quisiera decirles a cada uno de ustedes. Nick admiro el talento con el que has llegado hasta aquí y admiro la forma en la que llegaste tan alto. Se que has solicitado una beca, becas que la mayoría de las veces, negamos- Nick bajo la mirada y se pasó la mano por el cabello nervioso- Sin embargo tu esfuerzo es increíble y de verdad admiro todo lo que has hecho y todo por lo que has luchado para que te encontraras aqui, así que te felicito has ganado la beca en esta universidad- Nick la miro eufórico.

-¡Gracias, muchas, muchas gracias!- Elena le sonrio.

-Espero no me decepciones. Sal un poco, necesito hablar con Cass- Nick me miro nervioso y asiente. Salió dejándome sola con Elena.

-Cass sé que tu situación es la más complicada que voy a tener hasta el momento. Veo tanto en ti que no puedo describir la euforia que siento cuando bailas. Sé que pronto te irás y qué no piensas volver a pisar Australia y eso créeme que me tiene tan intrigada y algo triste, pues sé bien que un talento como el tuyo no se ve a diario. Te suplicaría qué te quedarás, pero sé que es una decisión que tú has tomado seriamente y qué va a ser lo más complicado en el mundo tratar de que te quedes y dejes ir las opciones que tú ya has tomando. Sé que tienes una beca en Francia y que no lo piensas desperdiciar, yo misma tomaría también esa decisión, pues es algo importante y una oportunidad única pero también deberías tomar en cuenta que esta universidad es una de las más importantes a nivel internacional. No sé qué haré y creo que esta es la oportunidad que nunca le había dado a nadie más. Si decides cambiar de opinión el lugar que te has ganado a pulso para estar aquí nunca se irá si decides regresar las puertas de esta universidad estarán siempre abiertas para ti y yo seré la primera en recibirte con un fuerte abrazo y con unas ganas tremendas de verte crecer a lo largo del tiempo en el que te transformaras en la mejor bailarina que el mundo haya visto-

-Señora Curie...-

-Dime Elena, por favor-

-Bueno, Elena, agradezco de verdad la oportunidad y no sé cómo responderle-

-Comenzando, creo que deberías dejar de llamarme de forma tan formal Cassie, porque en primer lugar me se toda tu vida- no puedo dejar escapar un alarido de sorpresa. Lo sabe todo- No debería sorprenderte, eres algo nuevo para mí, me vi en la necesidad de hacerlo. Tu vida ha sido un remolino ¿Cierto?-

¿Y ahora? ¿Cómo responderle a la mujer que se sabe de memoria hasta mis pasos? No me iba a poder librar tan fácil, vaya que lo sabía. 

Elena me mira de una manera algo interrogativa pero curiosamente con algo de bondad y dulzura. Las palabras en este momento eran como las balas, una sola palabra en falso y apretaba el gatillo y mataba las oportunidades.

-Demasiado revuelo en una sola vida- sé que sueno estúpida con esto, pero mi mente no logra formular las palabras suficientes para darle al blanco.

-Lo se Cassie...-

-Ahora yo le pido que me llame Cass- Elena sonríe.

-Pues Cass, creo que tienes mucho que desahogar- yo la observo confundida.