Amores de adolescencia

Capitulo 8# Ya falta poco

El despertador suena, miro al despertador con una cara me ducho, son las 6 y cuatro. No tengo ganas de levantarme. No quiero ir al Insti, no quiero ver a Lucas y tampoco a Alex. ¿Y si me hago la enferma? A lo mejor funciona. Pero no puedo, hoy tengo que ir... Sergi viene a buscarme, supongo que debe de estar enamorado para venir desde ibiza a verme y quedarse unos días...
Me levanto y voy hacia el baño a lavarme los dientes, me lave y volví a mi habitación mientras escuchaba música, la música se para y escucho el tono de llamada.

-¿Aló?- pregunté sin saber quién es.

-¿Estás mejor?- era la voz de Alex.

-Bueno, si ¿y tú?

-Se nota que un estás enfadada, pero haré que me perdones.- me dice con una risa.

-No tengo nada que perdonar. Yo también fui una egoísta, sabía que querías decírselo y yo no quería que se lo dijeras... Eres tú el que me tiene que perdonar, lo siento.- dije mientras ponía el móvil en altavoz para seguir secándome

-Te perdono, pero con una condición. - le sale una risa.

-¿Qué condición? - respondí.

-Dame una segunda oportunidad. -se ríe.

-Bueno, te dejo que voy a vestirme. - le cambie el tema,

-¿Estás en pijama? - preguntó ansioso.

- Acabo de ducharme.- me reí.

-¿Me invitas a vestirme contigo? - me preguntó con una risa picarona.

-Si, claro, ven rápido que si no no llegas a tiempo. - Le respondí.

-¿En serio?- respondió muy animado.

-Já, más te gustaría, tete. Venga nos vemos luego, adiós.- le corte.

Me visto y voy hacia la cocina para comer algo, lo intento pero no consigo.. Mi estómago está cerrado, estoy nerviosa. Hoy tengo bastante tiempo así que saco a mi perro Bobby a pasear, es un Border Collie es negro y blanco, tiene 4 años y es adorable. Deje mi móvil encima de la mesa y cogí las llaves. Cuando volví vi que tenía 5 llamadas perdidas y 4 mensajes de Sergi. Tengo que disculparme por lo de anoche, estoy ilusionada de que venga pero estoy segura que va Lucas va ir a buscarlo y Alex va a querer conocerlo también... Estoy tan confundida.

Cogí mi bolso, mi gafas de sol , mi iPhone y mis auriculares, salí y cerré la puerta con llave. Mientras que caminaba me pude los auriculares y llame a Sergi.

-Buenos días, princesa. - me dijo nada más responder.

-Buenos días, guapo.- le respondí.- Lo siento mucho por lo de ayer, estaba mal y la pague contigo.

-No importa, bueno llego a las 11 a Barcelona, así que estaré a la hora de comer en tu instituto. ¿Vas a comer conmigo verdad? - me preguntó riéndose.

-Pues claro, tengo muchas ganas de que estés aquí. ¿Cuánto te quedas?

-Me quedo una semana, ósea que me voy el martes que viene. Así tenemos el finde para nosotros. - me respondió muy alegre.

-Que guay, bueno té tengo que dejar que viene el bu... - me interrumpió.

-Quédate un poquito más, porfa. Ayer no hablamos casi nada.

-Bueno, está bien. Pero cuando llegue al instituto cuelgo, eh. - respondí riéndome mientras cogía el bus.

-Me mostraras al chico que te rompió el labio cuando llegue.