Planes.

101 3 0
                                    

-Alo...muy bien...eso haremos. Nos vemos. Adiós.

- ¿Quién era?

-Alonso.

Al ver que no contaría de que hablaron seguí el interrogatorio. - ¿Qué dijo? - quería saber.

-Nada. Solo conversábamos que haríamos mañana en la noche. Por mientras revisaba el perímetro del colegio.

- ¿Él sabe que yo sé? - eso sonó como trabalenguas, pero sabía que me había entendido.

-No sabe aún.

-Ah. Entonces ¿mañana llegan?

-Si.

Volvió a interrumpirnos el celular y contesta disimuladamente para que el profesor no la viera.

- ¿Qué paso?... Ok... Nos vemos. - corto y se dirige hacia el profesor, un hombre canoso y con cara de pocos amigos. Luego sin decir nada sale de la sala.

Me quede haciendo mis tareas. Sin nada más que pudiera hacer. En esos momentos me sentía inútil. Es desesperante sentirse así.

Lamentable, ya me estaba acostumbrando cuando llega.

-El Alonso quiere verte. Se enteró de que te conté todo.

- ¿Está enojado? - me asusta que quiera hablar conmigo.

-No te preocupes por eso que ya me retaron.

-Oka, ¿Dónde está?

-Búscalo en el primer piso, hay debe estar.

Me dirigí hacia el profesor y pido permiso para ir al baño. Ni me mira y me concede el permiso.

Lo busco por todos lados, pero al parecer a esta especie le gusta desaparecer. Realmente pongo todo mi esfuerzo en encontrarlo, pero me estaba costando mucho tiempo y ese lujo no me lo podía dar mientras estaba en clase.

Vuelvo a la sala y esta vez el interrogatorio iba dirigido a mí.

- ¿Lo encontraste?

-No, parece que se fue antes de que pudiera llegar abajo.

-Mañana no salgas de tu casa. La estaré vigilando mientras el Alonso se encuentra con nuestras visitas.

- ¿Cuántos son?

-Por el momento solo tres.

- ¿Y va él solo?

- Si, luego de ver que no se acerquen ni a tu casa ni a la mía me voy a encontrar con él para ver si vienen en son de paz.

-Oka.

No me encontraba nada de tranquila pensando que Alonso se enfrentará solo a ellos simplemente porque Ashley va a estar rondando mi casa. Me sentía mal por él. ¿Y si le pasaba algo?

El secreto mejor guardadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora