Capítulo XXXIII

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—¿Hola? —llamé al entrar a mi casa. 
No había nadie, ni en la cocina ni en la sala, en ningún lado.

Subí las escaleras y caminé hacia la habitación de Carrie.
No escuchaba ningún ruido y eso provocaba escalofríos sobre mi cuerpo, como si estuviese en una película de terror.

Al abrir la puerta me quedé totalmente extrañada; la habitación estaba totalmente vacía, sólo estaba ocupada por la base de madera de una cama, sin colchón.

Dejé las maletas ahí pero seguí cargando a Nathan en mis brazos, él seguía durmiendo profundamente.

Me dirigí a la habitación de mi madre, todo estaba normal en ese lugar a excepción de que no había nada, absolutamente nada, de las cosas de Frank. No habían botellas de alcohol tiradas en los pies de la cama matrimonial, no había ropa de hombre regada por el suelo, y por fin olía bien, no a vómito y cigarro.

Todo esto era muy extraño.

 ¿Qué habría pasado?

Estaba muy desconcertada y demasiado cansada, así que fui a mi habitación, que seguía como la había dejado al irme, recosté con cuidado a Nathan y a su lado me dormí yo.




-○-○-○-




Al caer la noche por fin llegó mi mamá.
—¡Mamá! —exclamé al verla.
—¡Andrea! —gritó ella de felicidad, soltó su bolso y nos abrazamos.
—Pero, ¿qué haces aqui? —preguntó con mucha sorpresa—. ¿Acaso no ibas a tomar las clases por allá?
Yo negé con la cabeza.
—¿Por qué?
—De eso podemos hablar otro día, ahora, lo más important...
—Quieres hablar acerca de Cameron, ¿cierto?
—Sí, de eso mismo y también de...
—Carrie —acompletó ella.
—Sí... ¿qué pasó todo este tiempo?
—Es algo muy largo de contar.
—Tenemos tiempo —dije y las dos nos sentamos en el sofá de la sala.
—Primero que nada, hija. Me da gusto verte después de tanto tiempo —sonrió y me volvió a abrazar.
—Nunca quisiste visitarme —le mencioné y la aparte —. Ni si quiera para ver a tu nieto.
—No, no es eso Andrea —mi madre se acomodó un mechón de cabello que traía suelto delante de su rostro y lo puso detrás de su oreja—. Las cosas por aquí estuvieron complicadas, yo siempre llegaba cansadísima del trabajo y luego debía lidiar con Frank.
—¿Dónde está él?

Hubo un largo silencio hasta que ella tragó saliva y se propuso a hablar.

—Verás, tu padre...

—¿Padre?
—Tu padrastro...
—Frank —la corregí.
—Bueno, él... —dio un gran suspiro—. Él está en la cárcel.
—¿En la cárcel? —pregunté totalmente extrañada y a la vez sorprendida.
—Sí... hace meses él tuvo una pelea callejera y cuando las autoridades llegaron lo encontraron con altos niveles de alcohol en la sangre. —realmente no me sorprendió escuchar esas palabras, era típico de él—. También descubrieron que tenía varias multas y actos delictivos anteriormente —explicó y me alegré al saber que ese maldito hombre, que ni siquiera se le puede llamar hombre, está detrás de las rejas. 

Pero toda esa felicidad se desvaneció cuándo pregunté por Carrie...

—A ella... —dijo y sus ojos se cristalizaron—. Se la llevaron.
Mi madre agachó la cabeza y se llevó las manos a sus ojos.
—¿¡Quién!? —pregunté y me levanté en seguida.

—Su madre biológica.
—¿¡Qué!? ¿¡por qué!?
—Porque ella debía quedar a cargo de Carrie, además, nosotras no somos nada de ella ni biológicamente ni oficialmente.
—¡Pero yo a ella la consideraba mi hermana!

Ella no dijo nada, simplemente se quedó en silencio. Yo no podía creerme nada de esto.

—¿Por qué no me lo dijiste, por qué no me llamaste si quiera para despedirme de ella?
—Lo siento hija... —se disculpó y bajó la vista.

—¿¡Por qué no me lo dijiste!? —grité molesta, estaba enojada y sobre todo estaba triste.

No hubo respuesta.

—¡Tan siquiera quería despedirme de ella! —grité y me fui a mi habitación dando un portazo por lo furiosa que estaba, lo que ocasionó que Nathan despertara.
—Ma' —balbuceó él y alzó sus manitas para que lo cargara.
—Ahora no, Nathan —tomé mi almohada y grité.


Estaba enojada, triste, molesta, melancólica, estaba mal.
Carrie era muy importante para mi, ella me traía la felicidad cuando Frank me golpeaba, ella me hacía reir, ella era como mi hermana, como si fuese mi hermana de verdad.

Era muy doloroso saber que alguien que quería, que amaba, se fue, para siempre de mi vida y lo peor era que no tuve la oportunidad de despedirme de ella...









N/A:

Hermosas lectoras: ♥
Quería decirles que...*chan chan chan* ¡En una semana subiré el capítulo final! 
Sí, el final ya es en el siguiente capítulo. :s
 Y bueno, quería contarles sobre algo muy importante para mi, no es nada sobre Wattpad (bueno, un poquito), es sobre mis estudios y quiero que ustedes lo sepan pk si. :')
En 4 días haré mi examen para entrar a la preparatoria, y estoy muuuy nerviosa.

Es un examen global de toooodas las materias, debo estudiar y por eso es que me he tardado un poco en actualizar. :( 

Sólo espero que me quede en la que quiero. :s
Espero que me comprendan. pero cuando termine todo esto de los examenes y bla bla actualizaré en seguida.
¡Deseenme mucha suerte, pls!
Gracias por leer.
Les quieroooooooooooooo. ♥ 




¿Esto es amor?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora