Deje de verlo por mucho tiempo, pero ya no había dudas sobre mis sentimientos. Lo amaba, más que a nadie. Un día cheque mis redes sociales y pude ver que estaba mal. No le avise, supuse que él no querría ver a nadie. Así que sólo llegue.
-David. ¿Puedo pasar?
-Sí, pasa.
-¿Estas bien?
-No.
-¿Qué sucede? Cuéntame.
-Pelee con Victoria hasta las 2 de la madrugada. Creo que me está engañando de nuevo. Y ahora no responde. Sólo quiero saber si se irá con el otro o no. Para no seguir rogando.
-Tranquilo. Llámale.
David le llamo y ella respondió. – ¿Dónde estás? Preguntó él. –Estoy sola. Dijo Victoria. –A ver, no hables. Ella colgó. La llamo de nuevo. -¿Por qué cuelgas? Sólo dime si te iras con él. Dijo él. –Sí, ya déjame en paz. Dijo Victoria. Los ojos de David se llenaron de lágrimas, no pude evitar llorar de verlo así.
-Tranquilo, tal vez es lo mejor.
-¿Cómo podría ser lo mejor Mia?
-Si ella ya no es feliz a tu lado, déjala ir.
Tal vez yo debería oír mis propios consejos.
-Es que, duele. Cuando te quedas estancado en algo y no puedes salir de ahí. Es horrible. ¿Lo has sentido?
-Como si no lo supieras.
-¡NO PUEDE HACER ESTO! Dijo lanzando todo lo que estaba a su paso.
-David, tranquilo. Mírame. Mírame otra vez. Dije mientras lo abrazaba.
-Mia, por favor. Me duele. Pero esta es la definitiva. Ya no más. Cambiare las contraseñas de mis redes sociales. Pero no tengo celular.
-Claro, ten mi celular, hazlo ahora.
Comenzó a cambiar todo, pero una llamada interrumpió. Era Victoria.
-Le acabo de mandar mensaje a tu mamá, de todo lo que me hiciste.
-¿QUÉ HICISTE QUÉ? ¡ESTAS LOCA VICTORIA! Dijo David, y colgó.
-David cálmate.
-No, tú no sabes todo lo que ella ha hecho.
-Cuéntamelo ahora, pero cálmate.
-Hace tiempo le invento a mis papás que estaba embarazada, lo hizo porque termine con ella. Pero estaba harto de cómo me trataba. Me trata mal.
No dije nada.
-Mia, ella es muy grosera conmigo la mayoría de veces. No confía en mí, cree que la engaño.
Seguí sin decir nada.
-Mia, di algo. Odio que te quedes callada.
-No puedo decirte nada, si te digo lo que realmente pienso dirás que sólo quiero que termines con ella.
-No, dilo. Ya sé que soy un idiota.
Un idiota al que amo con todo mi corazón y es demasiado tonto para darse cuenta de las cosas.
-No, no es eso. Es que no puedes seguir con ella. Ve cómo te pones. Reacciona. La vida no gira en torno a Victoria.
-Es que, algunas veces te quedas estancado en algo y no quieres salir de ahí.
-David ¿Por qué no te das cuenta que yo...?
Victoria interrumpió.
-Si David, estoy con mi ex novio. Te puedes quedar con esa zorra. Dijo refiriéndose a mí. Piérdete de mi vida, ¿Qué puedo esperar de ti? Eres un muerto de hambre. Adiós.
David comenzó a llorar, y a lanzar cosas de nuevo.
Lo abrace y le dije:
-Tranquilo David, ya pasará.
-No sé cómo ella puede hacerme esto.
-Es que ella no te ama de verdad.
-6 años Mia, 6 años y me deja porque soy un muerto de hambre.
-No eres eso, hay cosas que te hacen rico. Una de ellas es tu mentalidad. Tu amabilidad, la forma en la que vez todo. La humildad. David, por favor reacciona.
-Mia, yo la amo. Pero tienes razón. Seguiré adelante. Esta es la definitiva
-No te creo. ¿Cuantas veces has dicho eso?
-Mia, es enserio.
-Está bien.
-Podría iniciar algo contigo.
-¿Algo serio?
-Claro que sí. Pero no ahora. Dame tiempo.
-¿Qué?
-Estoy lastimado, lastimado sólo hago más daño.
-Claro David. Por favor anímate.
-Mia, te quiero. Gracias por estar aquí siempre que te necesito. Sabes cómo ser oportuna. Por eso debo darte esto.

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En pequeñas piezas (EN EDICIÓN)
RomanceTodo aquel que tenga corazón se ha enamorado alguna vez, quizá de la manera equivocada,de la persona incorrecta en el momento correcto o viceversa. Esta es mi historia, mi nombre es tan simple que sólo lleva 3 letras: Mía. Soy tan común como mi nomb...