ATY (Suspendida)

Capítulo XLIX "Shattered"

No sé por cuanto tiempo había estado mirando a la nada esperando un estímulo para moverme de ese lugar,  mis piernas permanecían en el mismo sitio frente a la puerta, era como estar congelada.
Según el reloj en mi muñeca eran más de las diez de la mañana, Kendall seguía sin llegar a casa desde la noche anterior, estaba comenzando a preocuparme por él, normalmente avisaba pero en esa ocasión no.
Dustin llamó a las siete en punto preguntando por él con enfado, tenía dos días sin aparecerse en la disquera, ¿En dónde estaba?
La puerta se abrió con lentitud y el rubio entró tratando de no hacer ruido, ¡Demasiado tarde!
—¿En dónde has estado?— es la primera cosa que salió de mis labios.
— ¿Quién eres tú?, ¿Mi madre?— dijo fastidiado como siempre.
—Soy tu esposa, ¿Recuerdas? Y estaba preocupada por ti, no te apareciste desde ayer, ¿Vas a decirme?
—Estaba con Dustin, ¡No molestes!—caminó ignorando mis palabras.
—Dustin llamó hace unas horas.— Se detuvo en seco—Dijo que no te has aparecido en la disquera desde hace un par de días. No estabas con él — suspiré frustrada — Mientes como de costumbre...
—Estaba ocupado— rodó los ojos e hizo una mueca de desagrado.
—Te esperamos para la cena— un nudo se formaba en mi garganta —Scarlett te hizo un dibujo, quería enseñarte, pero no estabas— mi visión se tornaba borrosa, las lágrimas amenazaban con caer.
—Lo lamento pero estaba en algo importante.— su tono de voz frío era como una puñalada en el corazón.
—¿En dónde?— susurré conteniendo el llanto.
—Eso a ti no te importa— agregó a la defensiva— Lo que yo haga es asunto mío, no te metas en mis cosas—caminó de nuevo sin importancia.
—Es mi asunto porque soy tu esposa, me preocupo por ti— deja de moverse y se gira a mirarme.
—¿Mi esposa?— suelta una carcajada amarga — No me hagas reír Tn, tú sólo eres un pedazo de basura y lo sabes.
Hace mucho que no cumples como "esposa", siempre te duele la cabeza o estás con esa niña, yo estoy en el último lugar, ¡No me das lo que necesito!—exclama con furia. —¡Déjate de tonterías! — aquellos ojos verdes que un día brillaban al verme ya no lo hacían más.
— No son tonterías y deja de culparme por todo lo malo que sucede entre nosotros, ¡Nunca estás en casa! — le grité molesta —Odio que no te importe nada sobre nosotros.
— No te hagas la víctima porque no te queda, eres una resbalosa, ¿Crees que no sé lo de tu amante Logan? — después de años seguía con esa idea estúpida — Si esa niña no tuviera el color de mí cabello y mis ojos dudaría de que fuera mía — le solté una bofetada — Sabes que es cierto, Marie y Tyler tenían razón en eso.
—Eres una horrible persona...
— ¿Por qué? — me interrumpió — ¿Tienes idea de lo molesta que eres? La verdad nena es que no me agrada tu presencia, ¡Me das asco! — Yo no sé porque le aguantaba eso — No quiero tocarte, no quiero verte y tampoco escucharte, ¡Me cansé de ti! — No sentía ningún remordimiento por sus palabras —No tienes lo que quiero, ¿Sabes por qué sigo aquí? ¡Porque te embarazaste! No podías esperar, tenías que ser tan idiota como para atarme a ti, por eso no me provocas nada — su rostro estaba rojo del enfado — Cada vez que te miro a la cara me recuerda la estupidez que hiciste al embarazarte tan rápido, tú nos hiciste esto Tn. Tú me hiciste esto — siempre culpandome, siempre despreciandome, estaba cansada.
—Cada vez que te miro me doy cuenta de que no eres el hombre que quiero — se queda en silencio —Estoy a punto de irme— me alejé caminando hacia la cocina. No me siguió, ni siquiera le interesó lo que sentía en ese instante, ¿Por qué se comportaba así?
Grace apareció de la nada frente a mí, con una expresión seria, no me miró a los ojos pero supe que me observaba
— ¿Lo escuchaste todo Grace? — mi voz se escuchaba demasiado aguda.
—Sí.
—No puedo soportarlo más — el llanto había llegado —Voy a dejarlo— hacia tiempo que tuve esa conversación con Grace sobre dejar a Kendall, ella era como mi amiga en esa casa, siempre me escuchaba y en ocasiones me daba consejos.
— ¿Está segura señora?— en su rostro podía ver lo preocupada que estaba por mí y Scarlett.
—Sí, creo que es lo mejor, no sólo para mí sino para Scarlett, estará mejor sin él. Sé que te irás en una semana de vacaciones y aunque no vuelva a verte siempre te agradeceré por escucharme durante estos años.
—No se despida aún, quizá puedan arreglarse las cosas entre el señor Schmidt y usted — ya había perdido la esperanza.
—No lo harán, eso lo sé desde hace tiempo.— la última lágrima traviesa cayó por mi mejilla—Por supuesto que él no debe saberlo, si se entera nunca me dejará ir. Grace cuida de él cuando no esté— era mi despedida y no lo sabía en ese entonces.