7. Vamos a una fiesta

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Camino a casa conecte mi teléfono al reproductor del auto y me puse a tararear cada canción que sonaba, en ese momento, comenzó a sonar Work From Home de Fifth Harmony y empecé a cantarla mientras me movía al ritmo de la música, agradecí llevar las ventanas arriba, ya que si alguien hubiese llegado a verme, sin duda esa persona hubiera pensado que estaba loca, por la forma en la que me movía.

Al llegar a casa, baje del auto y me dirigí a la puerta, luego escuche que alguien me llamaba, así que voltee a ver quién era, de inmediato una sonrisa se plasmó en mi rostro.

— ¡Luke! — no sabía por qué estaba él ahí, ¿Me habrá seguido? No, no lo creo, aunque no tenía ningún problema al respecto. — ¿Que haces aquí? No me estarás siguiendo, ¿O sí? —.

— Por supuesto que no, Hollywood. — Contestó divertido. — Esta es mi casa — Dijo señalando la casa junto a la mía. — Recién llegue y te vi bajando de tu auto. ¿Esta es tu casa? — Preguntó.

— Sí, esta es. — Sonreí.

— ¿Y vives sola? — Pregunto haciendo una mueca.- Porque esta casa es enorme. — Término de decir.

— Sí, papá la compró para mí, él se la pasa de viaje, asi que no vive conmigo. — Imite su mueca.

— Bueno, quería decirte que los chicos me acaban de llamar, al parecer habrá una fiesta para celebrar la victoria del equipo. ¿Quieres ir? —.

— Eh...sí, seguro. — Contesté algo insegura, iba a ser mi primera fiesta desde que llegue a la ciudad y sólo conocía pocas personas, pero aun así, me pareció divertida la idea de una fiesta, sería una buena forma de despejarme.

Decidí aceptar, no tenía idea de que me pondría, ya que papá me compró mucha ropa cuando me mudé aquí, tendré que revisar mi closet más a fondo.

¡Genial! Te busco a las ocho. — Sonrió, plantó un beso en mi mejilla y se dirigió a su casa.

Entré a mi casa, deje las llaves en la mesa que estaba al lado de la puerta y subí a mi habitación.

Comencé a buscar que me pondría, observé mi reloj y eran las 18:30 hrs, busque en el armario y opté por un pantalón negro de cuero, una camisa blanca sin mangas, que mostraba sólo un poco de piel, unas botas de tacón negras y una camisa a cuadros roja.

Pensaba que no sería buena idea ir en tacones, pero, al diablo, quiero divertirme, me arregle el cabello planchando un poco la parte de arriba y rizando las puntas. Luego me coloque algo de maquillaje, lo esencial, un poco de base, máscara para las pestañas y algo de brillo en los labios.

Cuando revisé la hora, ya eran las 19:58, minutos después, sonó el timbre, así que me puse perfume y bajé las escaleras con cuidado, fui a abrir la puerta, eran los chicos.

— Wow — dijeron al unísono.

— No digan "Wow". — Hice una mueca en señal de nerviosismo.

— ¿Lista para divertirte como nunca? — Preguntó Michael.

— Muy lista. — Contesté, saliendo de la casa y cerrándola con seguro.

Los chicos se adelantaron y me dejaron sola con Luke.

— Te ves hermosa. — Sonrió Luke, bajando la mirada algo sonrojado.

— Gracias. — Contesté en agradecimiento. — Tú tampoco estás nada mal — Dije, tratando de que sonara como cumplido.

Sonrió, subí al auto de Ashton con Calum, mientras Michael iba con Luke, estaba puesta la radio y en ese instante escuchamos una canción.

En fin, la cantábamos mientras sonaba a todo volumen.

Entre El Rubio Y El Rizado (HS. LH) [En edición]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora